A través de un video divulgado recientemente, se dio cuenta del ataque de una munición merodeadora rusa Lancet contra un caza MiG-29 de la Fuerza Aérea Ucraniana. El ataque, viralizado el 19 de septiembre, dio registro visual del accionar de esta clase de vehículos aéreos no tripulados (denominados popularmente como “drones kamikazes”) en el conflicto ruso-ucraniano.

Si bien no se han divulgado mayores detalles, desde diversas fuentes abiertas de información dieron cuenta que el ataque contra el MiG-29 ucraniano fue perpetrado por una munición merodeadora Aero Zala Lancet de origen ruso. En lo referido a la localización, este fue realizado en el aeródromo Dolgintsevo ubicado detrás de las líneas de defensa ucranianas y a aproximadamente 65 kilómetros de distancia de las líneas de contacto rusas.

Un detalle que se aprecia en el video es el accionar de uno o más vehículos aéreos no tripulados rusos. Más precisamente, el que realiza el ataque y el segundo que efectúa el seguimiento de este y posible señalización del blanco, sin detectarse la respuesta de ningún tipo de sistema de defensa aérea de corto o muy corto alcance ucraniano, tanto de misiles o cañones, que intenten interceptarlos.

Fotografía empleada a modo de ilustración: MiG-29 de la Fuerza Aérea Ucraniana.

Esta situación permitió apreciar con mayores detalles el impacto de la munición Lancet a muy corta distancia del MiG-29, no siendo un impacto certero y directo contra el fuselaje del caza estacionado en tierra. No obstante, la onda expansiva de la explosión resultante al impacto podría haber provocado severos daños al fuselaje delantero del avión de combate, donde se ubica la cabina y el morro que aloja a los sistemas de radar y sensores.

Por último, y en referencia a la munición merodeadora utilizada, esta es fabricada por la empresa rusa Aero Zala, firma perteneciente al conglomerado Kalashnikov. Al día de la fecha han ganado un alto perfil por su empleo por las Fuerzas Terrestres rusas y su efectividad para atacar diverso tipo de objetivos detrás de las líneas ucranianas, como sistemas de defensa aérea y artillería autopropulsada y remolcada. Parte del éxito de las municiones merodeadoras Lancet se debe a la capacidad de inteligencia, vigilancia y reconocimiento que aportan otros vehículos aéreos no tripulados, como la apreciada en el video registrado del ataque al MiG-29.

*Fotografía principal: MiG-29 de la Fuerza Aérea Ucraniana antes de la guerra en el Ejercicio CLEAR SKY 2018

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