Imagen cortesía de I News

El ejército iraquí continuó su ofensiva renovada contra los objetivos de ISIS al oeste del río Tigris, pero un portavoz del ejército dijo que el progreso ha sido lento. “La lucha es extremadamente intensa … la presencia de civiles significa que tenemos que ser muy cautelosos”, dijo.

Los bombarderos suicidas también han sido desplegados por el ISIS para frenar el avance de los militares iraquíes, mientras que el complicado y denso diseño de la calle de la Ciudad Vieja dificulta los avances del ejército.

Las fuerzas iraquíes apoyadas por la coalición ahora apuntan capturar la totalidad de la ciudad de Mosul antes del 10 de junio. Si tienen éxito habrá sido exactamente tres años para el día desde que la ciudad cayó a los extremistas islámicos.

El inicio del Ramadán también se cree que está afectando los esfuerzos de los militares, ya que los soldados iraquíes también participan en el ayuno. El último impulso también está desplazando a las familias que no han podido escapar de la ciudad. “No esperábamos tal flujo de miles de familias huyendo hacia nuestras fuerzas”, dijo el general de brigada Ali al-Sharifi de las fuerzas de la Policía Federal. “Retrasamos los choques para darles rutas seguras y tuvimos que preparar cientos de camiones para evacuarlos. No es una situación fácil “.

Hoy Mosul es la ciudad más grande bajo el control de ISIS y su último gran punto de apoyo en Irak. Los civiles atrapados en las partes bajo control de ISIS Mosul se han quedado sin agua, comida y medicina, según la ONU.

La coordinadora humanitaria de la ONU en Irak, Lise Grande, dice que hasta 200.000 personas están detrás de las líneas ISIS en la ciudad vieja de Mosul y otros tres distritos. “El número de personas que se están moviendo es ahora tan grande, que cada vez es más difícil asegurar que los civiles reciban la asistencia y la protección que necesitan”, dijo.

Alrededor de 700.000 personas se cree que han dejado Mosul desde que la campaña para retomar la ciudad comenzó hace siete meses.

En un cambio de enfoque, el gobierno de Irak no recomendó inicialmente a los ciudadanos de Mosul abandonar las zonas controladas por el ISIS, temiendo un desplazamiento masivo de personas que requerirían ya escasos suministros de alimentos, agua y refugio fuera de los distritos de la ciudad. Los informes locales ahora sugieren que el gobierno ha cambiado de posición otra vez, con los aviones iraquíes que lanzan folletos en Mosul urgiendo  a los residentes a salir de la ciudad.

A medida que ISIS se  retira y acumula sus fuerzas restantes alrededor del distrito de la Ciudad Vieja, los militantes están destruyendo la infraestructura que dejan atrás, incluyendo hospitales. Hoy los militantes atacaron el distrito de Karrada en Bagdad, apuntando a una heladería y matando a 26 personas.

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