Una nueva vivencia del cabo Urbina!!
Malvinas: curó al primer herido y hoy se reencontraron en Alvear
La mendocina Marisa Alejandra Peiró fue una de las enfermeras que recibió al primer herido en batalla el 2 de abril de 1982. Casi cuarenta años después, se reunieron en Mendoza.
La Guerra de Malvinas dejó muchas historias, pequeñas pero profundas, que valoran los vínculos entre los que participaron, en distintas formas y grados, en esa guerra. Uno de esos episodios involucra a una mendocina que perteneció al único grupo de enfermeras de la Armada que recibió al primer herido de la invasión argentina a las islas y que, casi cuarenta años después, se reunieron en un emotivo encuentro.
Peiró, con el uniforme de la Armada Argentina.
Marisa Alejandra Peiró, oriunda de General Alvear, formó parte de la primera camada de enfermeras recibidas en la Armada Argentina, y prestó servicios en la Base Naval de Puerto Belgrano durante la guerra de Malvinas. Allí, la noche del 2 de abril de 1982, junto a sus compañeras recibió al cabo segundo Ernesto Urbina, herido ese mismo día durante la posesión de la casa del gobernador inglés en Puerto Argentino, cuando sufrió una lesión de bala al intentar rescatar al capitán Pedro Giachino quién, a su vez, fue el primer militar de alto rango muerto en combate.
Luego de ser asistido, Urbina volvió al combate y nunca volvió a verla ni retomó contacto. Hace tres años, Peiró logró ubicarlo en Facebook y hoy se reencontraron en General Alvear, donde fueron homenajeados en un acto encabezado por el intendente local Walter Marcolini.
El emotivo abrazo del reencuentro.
En diálogo con el programa
Radio Activas, de
MDZ Radio, Peiró recordó que Urbina "tenía graves heridas en el abdomen que hasta el día de hoy le generan consecuencias", dado que "estaba en el mismo comando que Giachino, el cual desembarcó en Costa Argentina, donde habían tempestades muy fuertes y se tiraban de sus botes para ir al rescate de los heridos".
"(Urbina) estuvo como un mes en la base naval, con los cuidados correspondientes, y después no lo vimos más. Yo no sabía si estaba vivo o qué había pasado con él. Después sé que volvió a la base pero ya habíamos perdido contacto porque después llegaron muchos heridos", añadió.
Peiró, que actualmente vive en Canadá y viaja todos los años a Alvear para cuidar de una hermana discapacitada, comentó que "hace tres años veo su nombre en Facebook y le pregunté qué era de ese chico que atendimos el 2 de abril en Puerto Belgrano, y me respondió que era él. Yo no podía creer que después de tantos años nos pudiéramos comunicar nuevamente".
"No se acordaba de mí puntualmente, sino de un grupo de enfermeras que corrieron a un camión de la Armada que traían los heridos en camillas, entre sirenas y ambulancias", relató.
Al momento de reencontrarse hoy en el sur mendocino, ambos manifestaron una gran emoción luego de 38 años sin verse: "Nos veíamos por Facebook, pero separados tantos años de nuestras vidas sin saber qué era de cada uno, y nos abrazamos como si nos hubiésemos visto toda la vida".
Respecto al aniversario del 2 de abril, Peiró indicó que "a veces me cuesta un montón recordar, pero tampoco lo quiero olvidar". Así, expresó, "cada vez que esta fecha se acerca, para mí son todos esos recuerdos intensos, porque yo también era muy joven".
"Lo que pasamos nos hizo mujeres más fuertes y aprendimos un montón de cosas dejando las lágrimas de lado para hacer lo que podíamos con lo que teníamos. Me lleno de emoción y no olvido", aseveró.
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