Una mujer en el frente de batalla

Shandor

Colaborador
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La Capitana narra la historia de la única mujer que comandó un batallón republicano durante la Guerra Civil Española. En su larga vida de lucha participó de diversos procesos revolucionarios de la primera mitad del siglo XX.


Mika Feldman, argentina de origen ruso judío, fue la única mujer que estuvo al frente de un batallón republicano durante la Guerra Civil española.
La escritora argentina Elsa Osorio, autora entre otras novelas de A veinte años, Luz se deslumbró con la historia de esta mujer que participó en todas las revoluciones del siglo XX. Por esta razón escribió una novela que la tiene como protagonista absoluta, La Capitana.
El relato abarca una existencia que tuvo características cinematográficas, con más visos de ficción que de realidad por la intensa trayectoria de Mika (1902-1999).
Esta revolucionaria participó activamente de diversos hechos históricos: las huelgas en la Patagonia, la defensa de la República en Madrid, los grupos clandestinos de oposición al stalinismo en Francia, y en Berlín cuando comenzaba a gestarse el nazismo.
La Capitana fue publicada por Siruela en España y próximamente Planeta la editará en América Latina. Su vida está marcada por la lucha por la justicia, la libertad y la igualdad, que Mika Feldman emprende junto a su marido Hippolyte Etchebéhère.
La historia sedujo a Elsa Osorio desde que la conoció por boca del escritor Juan José Hernández, en 1986, declaró la autora a Efe.
“Mika es una de las grandes olvidadas de la historia –explica la autora–. Me fascinó su vida de lucha y empecé a indagar; leí sus memorias y me fui a París para seguir sus pasos, pero no la llegué a ver. Estaba en una residencia para mayores y sé que murió escribiendo y opinando sobre la guerra del Golfo.”
Su vida de luchadora se forjó con las ideas que le trasmitieron sus padres rusos, que habían huido de los “pogromos” (persecución y linchamiento contra los judíos).
Odontóloga de carrera, Mika Feldman se lanzó con su marido por el mundo. Iban en busca de justicia. Llegaron a Madrid en el ’36, después de pasar por la Asturias en lucha, y tras conocer a la “Pasionaria” se metió de lleno en una columna del POUM (Partido Obrero de Unificación Marxista) que finalmente comandó.
La autora hace foco en la condición femenina de Mika en un momento histórico en que el mundo era absolutamente machista. Mika desconocía las técnicas militares y estrategias pero su carácter firme era su mejor arma. Nunca sometió sus propias ideas a la aprobación de ningún partido ni se dejó influir por ideologías ajenas a su pensamiento personal. Se dejó guiar solamente por su afán de justicia y de libertad. Dice Osorio: “Tuvo el respeto de todos los milicianos que fueron los que la eligieron capitana pero finalmente la echaron, porque ella nunca fue del Partido Comunista. Siempre tuvo una coherencia total.”
Osorio es Premio Nacional de Literatura en Argentina y Premio Literario de Amnistía Internacional. Presentó su última novela en España y dice que quiere dejar claro que, como “defensora de los Derechos Humanos”, le parecen “terriblemente injustos los juicios a los que se está sometiendo al juez Garzón”.
“Soy argentina –declaró a Efe– y los juicios que se hicieron en España contra el genocidio argentino por Garzón dieron una vuelta a los derroteros políticos de mi país. Se aprobó en Madrid que se juzgara el genocidio argentino. Eso es de una modernidad impresionante.”
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