Noticias de la Armada Argentina (ARA)

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Eduardo Moretti

Colaborador



La comandante general Laura Richardson se reunió ayer con oficiales militares en Ushuaia, en el extremo sur de Argentina, para aprender más sobre su trabajo en una región que es vital para el transporte marítimo y el comercio marítimo mundial.
U.S.Southern Command
5 de abril de 2024
 

Merchant Marine one

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Moderador

El Comandante del Área Naval Austral despidió a los avisos ARA “Estrecho de San Carlos” y “Bahía Agradable”​

Las unidades zarparon con rumbo a sus apostaderos naturales tras participar en la Patrulla Antártica Naval Combinada y la Campaña Antártica de Verano 2023/24.

VIERNES 5, ABRIL 2024

Ushuaia – El Comandante del Área Naval Austral, Comodoro de Marina José Alberto Martí Garro, despidió a los avisos ARA “Estrecho de San Carlos” y ARA “Bahía Agradable” que zarparon desde el muelle comercial de la capital fueguina, tras finalizar su participación en la XXVI Patrulla Antártica Naval Combinada (PANC) y en la Campaña Antártica de Verano (CAV) 2023/24.
Tras cumplir 142 días fuera de su apostadero natural, el “Estrecho de San Carlos”, bajo el mando del Capitán de Corbeta Sergio Daniel Baiocco, finalizó el pasado 31 de marzo su participación en una nueva edición de la PANC, operación que se lleva a cabo junto a la Armada de Chile.
Durante las etapas Alfa y Charlie, el buque cumplió funciones en el sector antártico contribuyendo a la salvaguarda de la vida humana en el mar y el control de la contaminación durante el periodo estival. Además, desarrolló tareas de balizamiento, traslado de personal entre las distintas bases antárticas y demás tareas de apoyo. Participó también de la ceremonia por el 42° aniversario de la Base Antártica Conjunta Carlini.
En su estadía en la capital fueguina, como Buque de Apoyo Antártico en las etapas Bravo y Delta, dicha unidad realizó ejercitaciones en las costas del Canal Beagle junto a la lancha rápida ARA “Indómita” y las lanchas patrulleras ARA “Barranqueras” y ARA “Baradero”, pertenecientes a la Agrupación Lanchas Rápidas, y elementos del Batallón de Infantería de Marina Nº4.
Además, prestó apoyo en tareas de sostenimiento en los Puestos de Vigilancia y Control de Tránsito Marítimo en la isla Grande de Tierra del Fuego e Isla de los Estados bajo jurisdicción del Comandante del Área Naval Austral.
Por su parte, el aviso ARA “Bahía Agradable”, bajo el mando del Capitán de Corbeta Martín Ignacio Villalba, concluyó con éxito su participación en la Campaña Antártica de Verano 2023/24 realizada bajo control operativo del Comando Conjunto Antártico.
La unidad que había iniciado su participación en la CAV el pasado 16 de diciembre de 2023 zarpando desde la Dársena Norte del Puerto de Buenos Aires, realizó despliegue de personal militar y científico en las diferentes bases antárticas, trasladó toneladas de cargas varias y especiales como gasoil antártico, tubos de gas, nafta, víveres, cámaras y antecámaras frigoríficas, vehículos y cargas científicas, entre otros.
Durante la ejecución de la Campaña Antártica, el aviso “Bahía Agradable” hizo escala en la ciudad de Ushuaia para su reabastecimiento, contando con el apoyo permanente de la Base Naval Ushuaia y el Área Naval Austral.
De esta manera, tras cumplir sus funciones como pieza clave en la logística de la zona antártica, soltó amarras para volver a su apostadero natural en la Base Naval Puerto Belgrano.

Créditos: Gaceta Marinera Digital



 

Merchant Marine one

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Moderador

Fuerzas Especiales realizaron prácticas integradas​

Las Agrupaciones Comandos Anfibios y Buzos Tácticos se adiestraron en instalaciones del Batallón de Infantería de Marina N°2.

VIERNES 5, ABRIL 2024

Baterías – Durante la semana pasada, las Agrupaciones Comandos Anfibios (APCA) y Buzos Tácticos (APBT), dependientes del Comando de Fuerzas de Operaciones Navales Especiales (COFE), realizaron un ejercicio de tiro integrado. La actividad estuvo supervisada por el Comandante del COFE, Capitán de Navío Eduardo Javier Mateo.
Durante las prácticas integradas de ambas Agrupaciones, sus miembros concretaron distintas etapas de tiro en desplazamiento y una actividad de combate en espacios restringidos. Previamente, en su respectivo asentamiento, cada unidad había realizado ejercicios de perfeccionamiento de técnicas.
El Capitán Mateo explicó que se debe garantizar el adiestramiento de estas dos Unidades para que la Armada pueda disponer de ellas cuando lo necesite. El ejercicio buscó posicionarlas en un nivel deseable, respondiendo a los planes que se encuentran en vigor.
Por su parte, el Comandante del APCA, Capitán de Fragata Bernabé Sergio Nelson Cardozo detalló que “aunque cada Agrupación tenga su especificidad, es necesario tener técnicas y procedimientos unificados. En este momento estamos integrando las dos culturas organizacionales y es algo histórico”. En el mismo sentido, el Comandante de la APBT, Capitán de Fragata Rodrigo Sergio Acuña Guinder concluyó: “Debemos tener el mismo nivel para atender las necesidades del servicio naval y estar a la altura de las circunstancias para la que nos necesite el país”.
Las Unidades de Fuerzas Especiales continuarán adiestrándose de forma particular en sus respectivos asientos naturales, pero proyectando los futuros ejercicios integrados según el Plan Anual de Adiestramiento del COFE.

Créditos: Gaceta Marinera Digital



 

Merchant Marine one

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Moderador

Campaña del Batallón de Infantería de Marina Nº 2​

Realizaron adiestramiento individual y de grupo en operaciones ofensivas.


VIERNES 5, ABRIL 2024


Baterías – Compañías del Batallón de Infantería de Marina N°2 (BIM2) “Capitán de Fragata Pedro Edgardo Giachino”, dependiente de la Brigada Anfibia de Infantería de Marina “Teniente de Navío D. Cándido de Lasala” (BRIM), llevaron a cabo una campaña de instrucción y adiestramiento en la Base Naval de Infantería de Marina Baterías (BNIM).
El propósito central de la campaña fue el de alcanzar los niveles de adiestramiento individual y de grupo en operaciones ofensivas, en línea con las directrices establecidas en el Plan Anual de Adiestramiento de la BRIM.
Las actividades para el personal fueron diseñadas a fin de fortalecer las habilidades tácticas y operativas. Entre ellas se destacaron desplazamiento y reconocimiento del terreno, ejercicios de fuego y movimiento con prácticas de ataque tanto diurnas como nocturnas, a nivel de sección de tiradores.
Participaron de la campaña las Compañías de Tiradores Delta, Comando y Apoyo Logístico y Armas. Asimismo, se enfatizó la importancia del trabajo en equipo, la disciplina y la coordinación durante el desarrollo de las operaciones.
Además, se contó con el apoyo del Batallón Comando y Apoyo Logístico y el Batallón de Comunicaciones N°1, cuya contribución fue crucial para el éxito de la campaña.
Estas actividades de instrucción y adiestramiento no solo permitieron el desarrollo y la mejora de las capacidades operativas de los infantes de Marina, sino que también reafirmaron el compromiso del BIM2 con la excelencia en el cumplimiento de su misión.

Batallón de Infantería de Marina N°2 “Capitán de Fragata Pedro Edgardo Giachino”

Se creó por Decreto Nº 67.347 el 15 de julio de 1940, con asiento en la Base de Infantería de Marina Baterías.
Ostenta la condecoración, medalla y diploma “Operaciones de Combate” otorgada por la Nación Argentina por su destacada participación en el Conflicto del Atlántico Sur.
Participó en la Operación Rosario durante la recuperación de las Islas Malvinas como Batallón núcleo de la Fuerza de Desembarco. Luego tomó parte en la defensa de Puerto Argentino con una Sección de la Compañía de Tiradores “Delta”, cuya responsabilidad era la defensa de la península Camber.
El resto de la unidad desplegó en la Isla Grande de Tierra del Fuego, como parte de la Reserva Estratégica Operacional del Teatro de Operaciones del Atlántico Sur.

Créditos: Gaceta Marinera Digital
 

Merchant Marine one

Miembro del Staff
Moderador

El Comandante de Adiestramiento y Alistamiento recorrió el buque logístico ARA “Patagonia”​

Fue recibido por el Comandante de la unidad y su Plana Mayor.

VIERNES 5, ABRIL 2024

Puerto Belgrano – El Comandante de Adiestramiento y Alistamiento de la Armada, Contraalmirante Juan Carlos Coré, realizó un recorrido por el buque logístico ARA “Patagonia” para interiorizarse sobre las capacidades de la unidad.
Durante su visita lo acompañaron el Comandante de la Flota de Mar, Contraalmirante Gustavo Fabián Lioi Pombo; el Jefe de Mantenimiento y Arsenales de la Armada, Comodoro de Marina Rodrigo Fabián Ataún, y el Comandante Naval Anfibio y Logístico, Capitán de Navío Darío Andrés Buscarolo.
Fue recibido por el Comandante del ARA “Patagonia”, Capitán de Fragata Cristian Carrizo y su Plana Mayor. Posteriormente se realizó una presentación en la Cámara de Oficiales y una recorrida para interiorizar al Comandante de Adiestramiento y Alistamiento sobre el funcionamiento de los sistemas y la habitabilidad de la unidad.

Créditos: Gaceta Marinera Digital
 

Merchant Marine one

Miembro del Staff
Moderador

Un médico naval en la Operación Rosario​

“Doc, prepare a su gente y equipo que necesitan un cirujano en tierra".

VIERNES 5, ABRIL 2024

A pocas horas de concretarse la recuperación de Malvinas el 2 de abril de 1982, el entonces Teniente de Navío Jorge Dardo Rosas pisó suelo malvinense para salvar la vida de los primeros heridos en combate.
“La noche anterior al desembarco, nadie durmió. No se trataba de un ensayo, era una situación real de guerra”, recordó Jorge Rosas, quien estaba embarcado en el destructor ARA “Hércules” como Jefe de Sanidad.
El buque navegaba a poca distancia de la costa integrando la Fuerza de Tareas 40 que apoyó el desembarco anfibio, y desde su puesto de combate en popa, escuchó las primeras explosiones y disparos de fusil.
Cerca de las 8 de la mañana, lo solicitaron en el Puente de Comando para desembarcar con urgencia: “El Comandante me dice ‘Doc, prepare su gente y equipo que necesitan un cirujano en tierra’; no hubo mayores precisiones”.
Rápidamente abordaron el helicóptero Sea Lynx con que contaba el buque el Teniente bioquímico Roque Cvitanovich; el Suboficial Enfermero Alberto Moyano, él y un voluminoso equipo sanitario alistado con elementos de primeros auxilios, material para el tratamiento de quemados, sueros, equipos de perfusión intravenosa, medicamentos, cajas con instrumental quirúrgico y banco de sangre. En pocos minutos sobrevolaron Malvinas y aterrizaron en una cancha de fútbol, cerca al Hospital de Puerto Argentino.
Las tropas argentinas le adelantaron que había tres bajas; una en la morgue, el Capitán de Fragata (PM) comando anfibio Pedro Edgardo Giachino; y dos gravemente heridos, el Teniente buzo táctico Diego García Quiroga, y el Cabo Segundo enfermero, Ernesto Urbina.
Fuera y dentro del hospital, el escenario era complejo mientras buscaban a los heridos. Recordó los gritos de dolor del Teniente García Quiroga, que tenía heridas de proyectil perforantes en el abdomen, a la altura del hígado, y había perdido mucha sangre.
“Inmediatamente con Cvitanovich le suministramos morfina, clasificamos su grupo sanguíneo, y repusimos el volumen de sangre en transfusión. Usamos la sangre que llevábamos; ese fue el primer y gran paso que le salvó la vida”, reflexionó.
Seguidamente se encontró con Arturo Gatica, marino y cirujano como él, que formaba parte de la Fuerza de Desembarco y lo puso en situación de las heridas de Urbina que tenía el abdomen abierto con los intestinos afuera: “Estaba estable pero no había tiempo que perder. Decidimos operarlo en el hospital”.
Evaluaron dos cuestiones: el traslado inmediato de García Quiroga hacia el buque hospital rompehielos ARA “Almirante Irízar”, acompañado por Cvitanovich; y pedir el quirófano con urgencia para Urbina.
“No fue sencillo convencer con mi poco inglés, al director y único médico del hospital, de que éramos doctores y necesitábamos operar. Recuerdo muy bien su aspecto físico, alto, delgado, calvo; y su mirada desconfiada”, detalló el Capitán de Navío Retirado.
“Lo convencí y para nuestra sorpresa, él mismo colaboró en los preparativos del quirófano e instrumentó la operación; nos pasaba las compresas húmedas con suero tibio para limpiar las heridas de Urbina. El suboficial Moyano estaba a la cabecera de la mesa de cirugía, proporcionándonos la anestesia general, ayudado por una enfermera inglesa”, contó enfatizando el profesionalismo médico y la humanidad, más allá de las banderas.
Antes de ingresar al quirófano, pasó por la morgue y observó el cuerpo del Capitán Giachino, que aún conservaba en su rostro restos de la pintura de enmarascamiento. “Su herida en la región inguinal fue mortal. El proyectil había atravesado la arteria femoral y sus minutos de vida eran oro. Lo despedimos elevando una plegaria por su arrojo y valentía, y continuamos con nuestro trabajo”, relató haciendo una mueca de impotencia.
La intervención quirúrgica de Urbina finalizó con éxito y decidieron trasladarlo en un avión hacia territorio continental: “Decidimos las evacuaciones médicas con la premisa de que toda herida de guerra es una herida contaminada”, explicó.
Para ese entonces, las condiciones en el lugar habían cambiado notoriamente. “Había más calma general; no obstante, se notaba una incomodidad entre nosotros y el personal de enfermería inglés”, aseguró.
Cayendo la tarde del 2 de abril abordaron el helicóptero de regreso al destructor: “En el vuelo nos mirábamos entre nosotros sin cruzar palabras; percibíamos nuestros sentimientos por aquellas horas vividas en suelo malvinense […] dejamos atrás una etapa muy nuestra, donde tuvimos la oportunidad de entrar en acción y hacerlo bien. A mi entender, ese día no iban a haber bajas, pero desgraciadamente fueron las nuestras”, inspiró con profundidad.
En Malvinas capitalizó una gran enseñanza: “El médico de sanidad militar debe estar preparado profesionalmente y adiestrarse; no debe haber improvisación porque eso acarrea errores y los errores, malos resultados”.
“Participar de la guerra como médico fue una condición muy particular, estresante e inesperada; te prueba como médico, hombre y marino. Viví ese momento con mucha ansiedad de saber qué iba a pasar y con qué me iba a encontrar; y a la vez, con la certeza de que hay vidas que dependen de uno. Yo confié mucho en la actitud y el profesionalismo de mi equipo de trabajo”, destacó.
Jorge Rosas continuó embarcado en el “Hércules” los 74 días que duró el conflicto, con la satisfacción de haber dado batalla a su propia guerra, la de los médicos contra la muerte. Logró salvar las vidas de García Quiroga y Urbina, y eso aún hoy, a sus 79 años, está sellado a fuego en su memoria.
No hay sutura ni apósito que contenga a una Malvinas que sigue herida. Sólo las voces de los combatientes la mantienen consciente. En el relato de los Veteranos reverbera el eco de quienes quedaron en guardia eterna para que Malvinas siga viva.

Créditos: Gaceta Marinera Digital
 

Un médico naval en la Operación Rosario​

“Doc, prepare a su gente y equipo que necesitan un cirujano en tierra".

VIERNES 5, ABRIL 2024

A pocas horas de concretarse la recuperación de Malvinas el 2 de abril de 1982, el entonces Teniente de Navío Jorge Dardo Rosas pisó suelo malvinense para salvar la vida de los primeros heridos en combate.
“La noche anterior al desembarco, nadie durmió. No se trataba de un ensayo, era una situación real de guerra”, recordó Jorge Rosas, quien estaba embarcado en el destructor ARA “Hércules” como Jefe de Sanidad.
El buque navegaba a poca distancia de la costa integrando la Fuerza de Tareas 40 que apoyó el desembarco anfibio, y desde su puesto de combate en popa, escuchó las primeras explosiones y disparos de fusil.
Cerca de las 8 de la mañana, lo solicitaron en el Puente de Comando para desembarcar con urgencia: “El Comandante me dice ‘Doc, prepare su gente y equipo que necesitan un cirujano en tierra’; no hubo mayores precisiones”.
Rápidamente abordaron el helicóptero Sea Lynx con que contaba el buque el Teniente bioquímico Roque Cvitanovich; el Suboficial Enfermero Alberto Moyano, él y un voluminoso equipo sanitario alistado con elementos de primeros auxilios, material para el tratamiento de quemados, sueros, equipos de perfusión intravenosa, medicamentos, cajas con instrumental quirúrgico y banco de sangre. En pocos minutos sobrevolaron Malvinas y aterrizaron en una cancha de fútbol, cerca al Hospital de Puerto Argentino.
Las tropas argentinas le adelantaron que había tres bajas; una en la morgue, el Capitán de Fragata (PM) comando anfibio Pedro Edgardo Giachino; y dos gravemente heridos, el Teniente buzo táctico Diego García Quiroga, y el Cabo Segundo enfermero, Ernesto Urbina.
Fuera y dentro del hospital, el escenario era complejo mientras buscaban a los heridos. Recordó los gritos de dolor del Teniente García Quiroga, que tenía heridas de proyectil perforantes en el abdomen, a la altura del hígado, y había perdido mucha sangre.
“Inmediatamente con Cvitanovich le suministramos morfina, clasificamos su grupo sanguíneo, y repusimos el volumen de sangre en transfusión. Usamos la sangre que llevábamos; ese fue el primer y gran paso que le salvó la vida”, reflexionó.
Seguidamente se encontró con Arturo Gatica, marino y cirujano como él, que formaba parte de la Fuerza de Desembarco y lo puso en situación de las heridas de Urbina que tenía el abdomen abierto con los intestinos afuera: “Estaba estable pero no había tiempo que perder. Decidimos operarlo en el hospital”.
Evaluaron dos cuestiones: el traslado inmediato de García Quiroga hacia el buque hospital rompehielos ARA “Almirante Irízar”, acompañado por Cvitanovich; y pedir el quirófano con urgencia para Urbina.
“No fue sencillo convencer con mi poco inglés, al director y único médico del hospital, de que éramos doctores y necesitábamos operar. Recuerdo muy bien su aspecto físico, alto, delgado, calvo; y su mirada desconfiada”, detalló el Capitán de Navío Retirado.
“Lo convencí y para nuestra sorpresa, él mismo colaboró en los preparativos del quirófano e instrumentó la operación; nos pasaba las compresas húmedas con suero tibio para limpiar las heridas de Urbina. El suboficial Moyano estaba a la cabecera de la mesa de cirugía, proporcionándonos la anestesia general, ayudado por una enfermera inglesa”, contó enfatizando el profesionalismo médico y la humanidad, más allá de las banderas.
Antes de ingresar al quirófano, pasó por la morgue y observó el cuerpo del Capitán Giachino, que aún conservaba en su rostro restos de la pintura de enmarascamiento. “Su herida en la región inguinal fue mortal. El proyectil había atravesado la arteria femoral y sus minutos de vida eran oro. Lo despedimos elevando una plegaria por su arrojo y valentía, y continuamos con nuestro trabajo”, relató haciendo una mueca de impotencia.
La intervención quirúrgica de Urbina finalizó con éxito y decidieron trasladarlo en un avión hacia territorio continental: “Decidimos las evacuaciones médicas con la premisa de que toda herida de guerra es una herida contaminada”, explicó.
Para ese entonces, las condiciones en el lugar habían cambiado notoriamente. “Había más calma general; no obstante, se notaba una incomodidad entre nosotros y el personal de enfermería inglés”, aseguró.
Cayendo la tarde del 2 de abril abordaron el helicóptero de regreso al destructor: “En el vuelo nos mirábamos entre nosotros sin cruzar palabras; percibíamos nuestros sentimientos por aquellas horas vividas en suelo malvinense […] dejamos atrás una etapa muy nuestra, donde tuvimos la oportunidad de entrar en acción y hacerlo bien. A mi entender, ese día no iban a haber bajas, pero desgraciadamente fueron las nuestras”, inspiró con profundidad.
En Malvinas capitalizó una gran enseñanza: “El médico de sanidad militar debe estar preparado profesionalmente y adiestrarse; no debe haber improvisación porque eso acarrea errores y los errores, malos resultados”.
“Participar de la guerra como médico fue una condición muy particular, estresante e inesperada; te prueba como médico, hombre y marino. Viví ese momento con mucha ansiedad de saber qué iba a pasar y con qué me iba a encontrar; y a la vez, con la certeza de que hay vidas que dependen de uno. Yo confié mucho en la actitud y el profesionalismo de mi equipo de trabajo”, destacó.
Jorge Rosas continuó embarcado en el “Hércules” los 74 días que duró el conflicto, con la satisfacción de haber dado batalla a su propia guerra, la de los médicos contra la muerte. Logró salvar las vidas de García Quiroga y Urbina, y eso aún hoy, a sus 79 años, está sellado a fuego en su memoria.
No hay sutura ni apósito que contenga a una Malvinas que sigue herida. Sólo las voces de los combatientes la mantienen consciente. En el relato de los Veteranos reverbera el eco de quienes quedaron en guardia eterna para que Malvinas siga viva.

Créditos: Gaceta Marinera Digital
Excelente aporte!!!!
 
Bien por

El Comandante de Adiestramiento y Alistamiento recorrió el buque logístico ARA “Patagonia”​

Fue recibido por el Comandante de la unidad y su Plana Mayor.

VIERNES 5, ABRIL 2024

Puerto Belgrano – El Comandante de Adiestramiento y Alistamiento de la Armada, Contraalmirante Juan Carlos Coré, realizó un recorrido por el buque logístico ARA “Patagonia” para interiorizarse sobre las capacidades de la unidad.
Durante su visita lo acompañaron el Comandante de la Flota de Mar, Contraalmirante Gustavo Fabián Lioi Pombo; el Jefe de Mantenimiento y Arsenales de la Armada, Comodoro de Marina Rodrigo Fabián Ataún, y el Comandante Naval Anfibio y Logístico, Capitán de Navío Darío Andrés Buscarolo.
Fue recibido por el Comandante del ARA “Patagonia”, Capitán de Fragata Cristian Carrizo y su Plana Mayor. Posteriormente se realizó una presentación en la Cámara de Oficiales y una recorrida para interiorizar al Comandante de Adiestramiento y Alistamiento sobre el funcionamiento de los sistemas y la habitabilidad de la unidad.

Créditos: Gaceta Marinera Digital
Bien por la presencia control y revision de todos los buques en actividad por la Jefatura de la ARA. eso es lo que siempre se debe hacer.
 

emilioteles

Colaborador

Campaña del Batallón de Infantería de Marina Nº 2​

Realizaron adiestramiento individual y de grupo en operaciones ofensivas.


VIERNES 5, ABRIL 2024


Baterías – Compañías del Batallón de Infantería de Marina N°2 (BIM2) “Capitán de Fragata Pedro Edgardo Giachino”, dependiente de la Brigada Anfibia de Infantería de Marina “Teniente de Navío D. Cándido de Lasala” (BRIM), llevaron a cabo una campaña de instrucción y adiestramiento en la Base Naval de Infantería de Marina Baterías (BNIM).
El propósito central de la campaña fue el de alcanzar los niveles de adiestramiento individual y de grupo en operaciones ofensivas, en línea con las directrices establecidas en el Plan Anual de Adiestramiento de la BRIM.
Las actividades para el personal fueron diseñadas a fin de fortalecer las habilidades tácticas y operativas. Entre ellas se destacaron desplazamiento y reconocimiento del terreno, ejercicios de fuego y movimiento con prácticas de ataque tanto diurnas como nocturnas, a nivel de sección de tiradores.
Participaron de la campaña las Compañías de Tiradores Delta, Comando y Apoyo Logístico y Armas. Asimismo, se enfatizó la importancia del trabajo en equipo, la disciplina y la coordinación durante el desarrollo de las operaciones.
Además, se contó con el apoyo del Batallón Comando y Apoyo Logístico y el Batallón de Comunicaciones N°1, cuya contribución fue crucial para el éxito de la campaña.
Estas actividades de instrucción y adiestramiento no solo permitieron el desarrollo y la mejora de las capacidades operativas de los infantes de Marina, sino que también reafirmaron el compromiso del BIM2 con la excelencia en el cumplimiento de su misión.

Batallón de Infantería de Marina N°2 “Capitán de Fragata Pedro Edgardo Giachino”

Se creó por Decreto Nº 67.347 el 15 de julio de 1940, con asiento en la Base de Infantería de Marina Baterías.
Ostenta la condecoración, medalla y diploma “Operaciones de Combate” otorgada por la Nación Argentina por su destacada participación en el Conflicto del Atlántico Sur.
Participó en la Operación Rosario durante la recuperación de las Islas Malvinas como Batallón núcleo de la Fuerza de Desembarco. Luego tomó parte en la defensa de Puerto Argentino con una Sección de la Compañía de Tiradores “Delta”, cuya responsabilidad era la defensa de la península Camber.
El resto de la unidad desplegó en la Isla Grande de Tierra del Fuego, como parte de la Reserva Estratégica Operacional del Teatro de Operaciones del Atlántico Sur.

Créditos: Gaceta Marinera Digital
Primera vez que leo el término "Brigada Anfibia"

Tiene más sentido dado el formato que tiene en comparación con sus homónimos del EA
 

nico22

Colaborador

Finalizada su patrulla en la ZEE, el ARA Contraalmirante Cordero arribó a la Base Naval Mar del Plata​




@Merchant Marine one ésta parece que fue una buena salida del buque para misiones de control y adiestramiento de la tripulación.
Que opinión te merece??
 
Arriba