La propuesta presupuestaria de 2012 enviada por el gobierno brasileño al Congreso prevé R$ 16.050 millones para los gastos del ministerio de Defensa entre inversiones y gastos de administración (excluyendo personal y encargos), lo que representará un aumento de 5,8% en comparación al valor definido en la ley presupuestaria de 2011.
Aunque parece poco, los gastos de Defensa fueron los más afectados por el recorte de R$ 50.000 millones en el Presupuesto de este año, que llevó adelante la presidenta Dilma Rousseff. Esa cartera perdió R$ 4.300 millones y mantuvo un presupuesto de R$ 10.800 millones para costeo administrativo e inversiones. En comparación con ese límite, la propuesta presupuestaria para el año próximo proyecta un aumento de 48,6%.
"La presidenta avaló lo que el ministerio de Defensa pidió para 2012", dijo una fuente del área. "Estamos retomando los valores iniciales del Presupuesto de 2011", agregó. Fue el ex ministro de Defensa, Nelson Jobim, quien elaboró la propuesta presupuestaria de Defensa para 2012.
Pero a pesar del discurso optimista, los militares no esconden su preocupación ante un eventual nuevo recorte que el gobierno podría anunciar en febrero, y temen que se repita lo ocurrido este año.
Los uniformados quieren preservar los proyectos de inversión que consideran estratégicos, como la construcción del submarino a propulsión nuclear, el avión carguero KC 390, la compra de helicópteros franceses, el desarrollo del blindado Guarani y la operación y mantenimiento del Sistema de Control del Espacio Aéreo Brasileño (Sisceab).
La semana pasada, el comandante de la Marina, almirante de Escuadra Julio Soares de Moura Neto, se encontró con el relator general del Presupuesto 2012, el diputado Arlindo Chinaglia, del Partido de los Trabajadores (PT), y algunos legisladores de la Comisión Mixta de Presupuesto del Congreso para exponerles sus proyectos. En las próximas semanas, será el turno de los comandantes del resto de las fuerzas.
Entre bastidores, los militares alimentan la idea de convencer a los diputados y senadores a aprobar un dispositivo en la ley presupuestaria que excluya a los proyectos considerados esenciales para la defensa nacional de los recortes de gastos.
Esa propuesta no cuenta, sin embargo, con la simpatía del área económica del gobierno, que rechaza los intentos de reducción de la base de gastos pasibles de recortes, porque según evaluaciones técnicas, eso enyesa más el presupuesto.
Incluso con el fuerte corte en sus gastos, el ministerio de Defensa consiguió, todavía bajo el comando de Jobim, preservar algunas de sus principales inversiones, porque la reducción se realizó preferencialmente en los gastos relativos a la administración.
Un informe de ejecución presupuestaria del 6 de septiembre, al que tuvo acceso Valor, mostró, por ejemplo, que de un total de R$ 183,3 millones destinados por el Presupuesto a la construcción del submarino a propulsión nuclear, se habían utilizado $ 174,5 millones.
En la misma fecha, todos los recursos presupuestarios de R$ 100 millones destinados al desarrollo del carguero KC390, en asociación con Embraer, también se habían empleado. Lo mismo sucedió con el sistema de seguridad de vuelo y control del espacio aéreo, que tenía recursos por R$ 522,1 millones este año, y R$ 325,5 millones se habían utilizados.
En tanto, el proyecto de adquisición de helicópteros franceses EC 725, se colocó a "baño maría", porque el Presupuesto de este año preveía gastos por R$ 205 millones, y hasta el 6 de septiembre, Defensa había utilizado apenas R$ 46,7 millones. Lo mismo sucedió con el programa de modernización y revitalización de aeronaves, que contaba con un presupuesto de R$ 320,7 millones y solo R$ 56,5 millones se ejecutaron con esa finalidad.
Pero el corte de este año alcanzó con más fuerza otros proyectos, como es el caso de Calha Norte, con dotaciones de R$ 473,5 millones, de los cuales solo R$ 22,9 millones se ejecutaron hasta la fecha del informe.
En la propuesta presupuestaria para 2012, el ministerio de Defensa buscó, nuevamente, preservar los proyectos que considera estratégicos, y si los mismos no sufren recortes, tendrán un sustancial aumento de recursos.
El proyecto de la Marina para implantar un astillero y base naval para la construcción y mantenimiento de submarinos, por ejemplo, pasará de R$ 945 millones previstos en el presupuesto de este año (antes del recorte) a R$ 1.200 millones. La construcción de submarinos a propulsión nuclear tendrá R$ 192,7 millones, más o menos el mismo valor de este año. La Marina espera construir cuatro submarinos convencionales y, para eso, contará con R$ 738,9 millones.
El mayor presupuesto será el de la Aeronáutica, que contará con R$ 4.600 millones, sobre un total de R$ 8.020 millones para toda la cartera de Defensa. La Aeronáutica tendrá R$ 900 millones en 2012 para adquirir 50 helicópteros franceses, R$ 544 millones para desarrollar el carguera KC 390 junto a Embraer, R$ 975,7 millones para el sistema de control del espacio aéreo y R$ 901,4 millones para la compra y modernización de aeronaves.
La propuesta presupuestaria destinó también R$ 240 millones para misiones de paz, en especial para la misión en Haití.
Aunque parece poco, los gastos de Defensa fueron los más afectados por el recorte de R$ 50.000 millones en el Presupuesto de este año, que llevó adelante la presidenta Dilma Rousseff. Esa cartera perdió R$ 4.300 millones y mantuvo un presupuesto de R$ 10.800 millones para costeo administrativo e inversiones. En comparación con ese límite, la propuesta presupuestaria para el año próximo proyecta un aumento de 48,6%.
"La presidenta avaló lo que el ministerio de Defensa pidió para 2012", dijo una fuente del área. "Estamos retomando los valores iniciales del Presupuesto de 2011", agregó. Fue el ex ministro de Defensa, Nelson Jobim, quien elaboró la propuesta presupuestaria de Defensa para 2012.
Pero a pesar del discurso optimista, los militares no esconden su preocupación ante un eventual nuevo recorte que el gobierno podría anunciar en febrero, y temen que se repita lo ocurrido este año.
Los uniformados quieren preservar los proyectos de inversión que consideran estratégicos, como la construcción del submarino a propulsión nuclear, el avión carguero KC 390, la compra de helicópteros franceses, el desarrollo del blindado Guarani y la operación y mantenimiento del Sistema de Control del Espacio Aéreo Brasileño (Sisceab).
La semana pasada, el comandante de la Marina, almirante de Escuadra Julio Soares de Moura Neto, se encontró con el relator general del Presupuesto 2012, el diputado Arlindo Chinaglia, del Partido de los Trabajadores (PT), y algunos legisladores de la Comisión Mixta de Presupuesto del Congreso para exponerles sus proyectos. En las próximas semanas, será el turno de los comandantes del resto de las fuerzas.
Entre bastidores, los militares alimentan la idea de convencer a los diputados y senadores a aprobar un dispositivo en la ley presupuestaria que excluya a los proyectos considerados esenciales para la defensa nacional de los recortes de gastos.
Esa propuesta no cuenta, sin embargo, con la simpatía del área económica del gobierno, que rechaza los intentos de reducción de la base de gastos pasibles de recortes, porque según evaluaciones técnicas, eso enyesa más el presupuesto.
Incluso con el fuerte corte en sus gastos, el ministerio de Defensa consiguió, todavía bajo el comando de Jobim, preservar algunas de sus principales inversiones, porque la reducción se realizó preferencialmente en los gastos relativos a la administración.
Un informe de ejecución presupuestaria del 6 de septiembre, al que tuvo acceso Valor, mostró, por ejemplo, que de un total de R$ 183,3 millones destinados por el Presupuesto a la construcción del submarino a propulsión nuclear, se habían utilizado $ 174,5 millones.
En la misma fecha, todos los recursos presupuestarios de R$ 100 millones destinados al desarrollo del carguero KC390, en asociación con Embraer, también se habían empleado. Lo mismo sucedió con el sistema de seguridad de vuelo y control del espacio aéreo, que tenía recursos por R$ 522,1 millones este año, y R$ 325,5 millones se habían utilizados.
En tanto, el proyecto de adquisición de helicópteros franceses EC 725, se colocó a "baño maría", porque el Presupuesto de este año preveía gastos por R$ 205 millones, y hasta el 6 de septiembre, Defensa había utilizado apenas R$ 46,7 millones. Lo mismo sucedió con el programa de modernización y revitalización de aeronaves, que contaba con un presupuesto de R$ 320,7 millones y solo R$ 56,5 millones se ejecutaron con esa finalidad.
Pero el corte de este año alcanzó con más fuerza otros proyectos, como es el caso de Calha Norte, con dotaciones de R$ 473,5 millones, de los cuales solo R$ 22,9 millones se ejecutaron hasta la fecha del informe.
En la propuesta presupuestaria para 2012, el ministerio de Defensa buscó, nuevamente, preservar los proyectos que considera estratégicos, y si los mismos no sufren recortes, tendrán un sustancial aumento de recursos.
El proyecto de la Marina para implantar un astillero y base naval para la construcción y mantenimiento de submarinos, por ejemplo, pasará de R$ 945 millones previstos en el presupuesto de este año (antes del recorte) a R$ 1.200 millones. La construcción de submarinos a propulsión nuclear tendrá R$ 192,7 millones, más o menos el mismo valor de este año. La Marina espera construir cuatro submarinos convencionales y, para eso, contará con R$ 738,9 millones.
El mayor presupuesto será el de la Aeronáutica, que contará con R$ 4.600 millones, sobre un total de R$ 8.020 millones para toda la cartera de Defensa. La Aeronáutica tendrá R$ 900 millones en 2012 para adquirir 50 helicópteros franceses, R$ 544 millones para desarrollar el carguera KC 390 junto a Embraer, R$ 975,7 millones para el sistema de control del espacio aéreo y R$ 901,4 millones para la compra y modernización de aeronaves.
La propuesta presupuestaria destinó también R$ 240 millones para misiones de paz, en especial para la misión en Haití.
- CRONISTA COMERCIAL
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