¿Ah...? ¿Pero no se le ocurre ninguna respuesta?...
Es muy fácil: lanzamos a Zapatero en paracaídas sobre Tokio enarbolando las baderas gay y de la paz. Posteriormente desembarcaría una columna de soldados regalando magdalenas y disparando rosas con sus fusiles. Y como colofón: Zapatero...