A través de un comunicado publicado a través de canales oficiales, el gobierno del Reino Unido dio a conocer que adjudicó a la empresa MBDA un importante contrato por hasta 316 millones de libras con el fin de avanzar en la instalación del nuevo sistema láser DragonFire en buques de la Real Armada británica, mas específicamente en destructores Tipo 45. Acorde ha sido revelado, la meta es poder comenzar con las entregas del armamento en cuestión a partir del año 2027, en línea con las estimaciones reportadas en el mes de abril del 2024.
Profundizando en algunos detalles de relevancia, cabe mencionar que la decisión de avanzar con este contrato se produce tras completarse una serie de pruebas recientes llevadas a cabo en el Campo de Tiro de Hebrides, donde el Ministerio de Defensa empleó con éxito al sistema DragonFire en el derribo de drones capaces de volar a velocidades de hasta 650 km/h. Como ya era conocido a partir de los informes sobre las características pretendidas para el mismo, el sistema validó su capacidad de efectuar disparos con un costo de tan sólo 10 libras cada uno, a la vez que mantiene un alto grado de precisión al hacerlo.
La cuestión no es menor en absoluto, considerando que de esta manera los destructores de la Royal Navy podrán contar con un sistema que les permitirá participar de misiones de defensa aérea, sin embargo, reduciendo enormemente los costes asociados a ello. Tal y como expresa el propio comunicado oficial de la cartera de defensa británica, el método resulta mucho mas rentable que las soluciones actuales basadas en misiles, cuyo coste requiere “cientos de miles de libra por disparo”. El impacto económico también se ve reflejado en la creación de nuevos puestos de trabajo en la industria local, con estimaciones que giran en torno a los 590 empleos repartidos entre Escocia e Inglaterra.
Al respecto de estas cuestiones se refirió el ministro de Adquisiciones de Defensa del Reino Unido, Luke Pollard, afirmando que: “Este láser de alta potencia colocará a nuestra Marina Real a la vanguardia de la innovación en la OTAN, proporcionando una capacidad de vanguardia para ayudar a defender al Reino Unido y a nuestros aliados en esta nueva era de amenazas. Estamos cumpliendo nuestra Revisión Estratégica de Defensa respaldando a la industria británica y creando cientos de puestos de trabajo adicionales, convirtiendo la defensa en un motor de crecimiento en todo el Reino Unido.“
Por su parte el director general de MBDA Reino Unido, Chris Allam, indicaba: “Este último contrato para DragonFire representa otro hito significativo. Nos permite continuar con la siguiente fase del programa y reafirma la intención del Reino Unido de estar a la vanguardia de las armas de energía dirigida por láser. El éxito de las recientes pruebas de DragonFire demuestra que nuestro equipo del Ministerio de Defensa y de Industria ha puesto a disposición de la Marina Real Británica un sistema de armas verdaderamente revolucionario.“
Finalmente, resulta importante destacar que el Reino Unido no sólo se encuentra avanzando en el desarrollo e incorporación del sistema DragonFire para actualizar su arsenal a los nuevos requerimientos de las operaciones de defensa aérea, donde se denota cada vez mas el uso de sistemas no tripulados. En ese sentido, ha de resaltarse que el Ejército Británico se encuentra trabajando en un sistema de energía dirigida por radiofrecuencia (RFDEW), mismo que fue probado por primera vez en diciembre del año pasado y que sería especialmente útil contra enjambres de drones.
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