La Fuerza Aérea de Finlandia ha confirmado que retirará definitivamente la esvástica como símbolo oficial en las banderas de sus unidades, cerrando así un capítulo histórico que se remonta al año 1918. El emblema, que ha generado controversia durante décadas por su asociación con el régimen Nazi, será reemplazado por nuevos diseños que reflejen la identidad moderna de la Institución.
La esvástica fue adoptada por la Fuerza Aérea finlandesa tras la independencia del país, como parte de un gesto simbólico del noble sueco Eric von Rosen, quien donó el primer avión militar a Finlandia. El emblema azul sobre fondo blanco fue considerado originalmente un amuleto de buena suerte, sin relación alguna con el nazismo, que aún no existía en ese momento.
Sin embargo, la coincidencia histórica y los vínculos familiares entre von Rosen y Hermann Göring —líder de la Luftwaffe nazi— han mantenido viva la polémica. Aunque Finlandia retiró la esvástica de sus aviones tras la Segunda Guerra Mundial, el símbolo permaneció en algunas banderas de unidades y en insignias institucionales.
La decisión de eliminar por completo la esvástica se aceleró tras el ingreso de Finlandia a la OTAN en 2023. Según un comunicado oficial, el plan de renovación de banderas comenzó ese mismo año, con el objetivo de “actualizar los símbolos y emblemas para reflejar mejor la identidad actual de la Fuerza Aérea”. Al día de hoy, hay cuatro escuadrones de la fuerza que usan la esvástica.
Las nuevas banderas, que incorporarán un águila como símbolo principal, serán presentadas oficialmente en eventos militares como desfiles y ceremonias locales. Este cambio se suma a reformas anteriores, en las que la esvástica ya había sido retirada de otros emblemas institucionales, como el de la Academia de la Fuerza Aérea.
En 2020, Zona Militar ya había reportado que la Fuerza Aérea finlandesa había eliminado discretamente la esvástica de su bandera principal, sin anuncio oficial ni ceremonia pública. El gesto fue interpretado como una medida preventiva para evitar tensiones con Rusia y mejorar la imagen internacional del país.
La retirada definitiva de la esvástica marca un punto de inflexión en la historia militar de Finlandia. Más allá del simbolismo, representa un esfuerzo por modernizar la identidad visual de sus fuerzas armadas y alinearse con los valores compartidos por sus nuevos aliados occidentales. En tiempos de redefinición estratégica, los símbolos también cuentan.
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