El pasado 4 de junio, la compañía francesa Naval Group dio a conocer a través de sus redes sociales que ya ha sido botada la tercera de las nuevas fragatas FDI construidas para equipar a la Armada de Grecia, lo cuál representa un importante hito en tanto que las tres naves originalmente encargadas por la institución ya están en el mar. Particularmente, se trata del buque HS Formion, mismo que estaba siendo construido en los astilleros de la mencionada empresa en la localidad francesa de Lorient y cuya fecha de entrega estimada esta prevista para el año 2026.

Ampliando en algunos detalles, la ceremonia de botadura correspondiente contó con la presencia del ministro de defensa griego, Nikolaos Dendias, como así también del subdirector general de la Dirección Nacional de Armamento (DGA) francesa; además autoridades navales de ambos países y de la propia compañía. La empresa a su vez aclaró que tras la botadura exitosa de la HS Formion, las tres fragatas FDI que serán incorporadas a la Armada Helénica se encuentran en el río Scorff, dando cuenta del avanzado estado del programa en cuestión. Se espera en ese sentido, que la HS Kimon (primera de la serie) culmine sus pruebas de mar en el futuro cercano, mientras que la HS Nearchos seguirá el mismo camino tras el fin del verano europeo.

Por otra parte, recogiendo algunas declaraciones oficiales de la compañía, el acontecimiento es considerado muestra de “la sólida cooperación industrial entre Francia y Grecia”, la cuál se refleja en la participación de socios industriales griegos en buena parte del proceso de la construcción de las fragatas que lidera una empresa francesa. Tal es así, que los astilleros Salamis han estado a cargo de la fabricación de parte de los bloques que posteriormente constituyen a la embarcación, a lo que ha de sumarse la participación de hasta 70 compañías griegas en la cadena de suministro que Naval Group ha configurado para llevar a cabo el programa.

Finalmente, repasando las características que hacen a estos modernos buques, podemos afirmar que se trata de naves con un desplazamiento de 4.500 toneladas contenidas dentro de una eslora de 122 metros y una manga de 18 metros; cuya proa tiene un diseño invertido para mejorar el desempeño del barco en altamar a la vez que reduce su señal de radar. Cada una de ellas dispone de espacio suficiente para albergar a una tripulación de unas 125 personas, a los que pueden sumarse otros 28 efectivos pertenecientes a grupos de operaciones especiales en caso de que se requiera, además de una cubierta en la popa que le permite recibir helicópteros o drones de reconocimiento.

En términos de armamento, la fragata también luce un variado abanico de posibilidades, entre las cuáles destaca la capacidad de contar con hasta 32 misiles Aster y 8 misiles Exocet MM40 B3c; ambos desarrollados por MBDA. En suma, los futuros buques griegos se valen de un cañón principal de 76 mm, misiles RAM, lanzadores de torpedos pesados MU90 y el sistema de contramedidas CANTO, lo que en conjunto le brinda capacidades para ejercer como embarcación polivalente según los requerimientos de la Armada Helénica.

*Créditos de las imágenes: Naval Group

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