Tras publicarse una serie de imágenes satelitales de la Base Aérea de Ain Beida/Oum el Bouaghi, habrían sido confirmadas las especulaciones respecto de que Rusia transfirió a la Fuerza Aérea de Argelia los cazas Su-35 fabricados originalmente para Egipto, notándose la presencia de al menos uno de ellos al descubierto. La novedad fue publicada en un informe elaborado por el Instituto Internacional de Estudios Estratégicos (IISS), tomando como referencias las imágenes obtenidas por la empresa estadounidense Maxar Technologies, misma que se especializa en tareas de inteligencia geoespacial.
Cabe recordar en este punto, que si bien no existe una confirmación oficial de ninguna de las partes involucradas respecto de esta posible transferencia, no sería una noticia que sorprenda considerando el fuerte vínculo existente entre Argel y Moscú. Uno de los ejemplos más ilustrativos mas recientes se halla en la compra de cazas de quinta generación Su-57 por parte del primero, lo que lo convirtió en el primer cliente extranjero de la plataforma, a pesar de que aún no ha sido entregado ningún ejemplar.
No puede descartarse tampoco, que parte de los Su-35 que inicialmente tenían como destino la Fuerza Aérea Egipcia, hayan sido transferidos también a su par en Irán para que avance en el reemplazo de los antiguos cazas F-14 Tomcat de origen estadounidense; tratándose de otro de los países cercanos a Rusia en materia de defensa. En este caso, se carece de imágenes satelitales de fuentes abiertas que permitan dar cuenta de ello, aunque sí fue confirmado por uno de los Comandantes de la Guardia Revolucionaria durante una entrevista brindada a medios locales en el mes de enero.
A la hora de explicar el motivo por el cuál estos cazas habrían tenido destinos diferentes al originalmente previsto, resulta de utilidad mencionar que desde 2019, Washington amenazó con aplicar la Ley para Contrarrestar a los Adversarios de Estados Unidos a fines de que Egipto desista de llevar a cabo la compra que había cerrado el año anterior por unos 3.000 millones de dólares; enfrentándose a múltiples sanciones en caso de no hacerlo. Para aquel entonces, se estimaba que la planta de producción Yuri Gagarin de Komsomolsk del Amur ya tenía fabricadas una docena de aeronaves Su-35, las cuáles eran observables al aire libre en uno de los patios de la misma. Algunos analistas también destacan que, en caso de seguir su curso con normalidad, las entregas a El Cairo deberían haber comenzado en el año 2022. Nunca llegó a ocurrir, en tanto la compra se canceló en 2020.
Por otra parte, ha de mencionarse que además de este planteo indicador de la necesidad de encontrar nuevos compradores, existen reportes que también darían veracidad a la novedad, considerando las imágenes de una aeronave de las Fuerzas Aeroespaciales rusas An-124 Condor preparándose para cargar un supuesto fuselaje de Su-35 en la mencionada región de Amur. Posteriormente, nuevas imágenes denotaron la presencia de un avión de este tipo y con marcas similares arribando a la Base Aérea de Ain Beida/Oum el Bouaghi, tras lo cuál se observó al primer caza equipado con insignias argelinas. A la par que esto ocurría, cuatro unidades almacenadas en la planta Yuri Gagarin también recibían sus marcas del país africano.
*Créditos de las imágenes: Maxar Technologies
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