A través de un breve comunicado que fue publicado en redes sociales el pasado 12 de diciembre, la empresa Fincantieri dio a conocer que ha iniciado la construcción del cuarto de los nuevos submarinos Tipo 212 NFS que equiparán a la Armada Italiana, mismos que están destinados a reemplazar a la antigua clase Sauro que la institución retirará en el futuro cercano. Según se ha informado, la ceremonia del primer corte de acero fue realizada en el astillero de Muggiano, contando con la presencia de importantes autoridades de la compañía, la Marina Militare y la OCCAR (Organización Conjunta de Cooperación en Materia de Armamento).
Al respecto de este hito, Fincantieri expresó a través de canales oficiales: “Este evento marca la producción simultánea de cuatro submarinos, lo que refleja nuestro papel como autoridad de diseño y contratista principal, y confirma nuestro compromiso con el desarrollo y la implementación de soluciones tecnológicas de vanguardia, en línea con los requisitos de la Armada italiana.” Cabe recordar, en ese sentido, que Roma está a la espera de sumar sus primeros dos ejemplares en los años 2027 y 2029 para así comenzar a constituir su nueva flota de submarinos.
Particularmente, el fabricante destaca que se trata de una clase que destacará por incorporar diversas actualizaciones fabricadas en Italia sobre la base tomada para diseñarla, es decir, los submarinos alemanes U212A. Entre sus diferentes virtudes, se destaca la instalación de un nuevo sistema de propulsión independiente del aire (AIP), como así mejoras en sus capacidades furtivas y en la autonomía para permanecer sumergido durante las operaciones gracias a las nuevas baterías de ion de litio; cuyas pruebas fueron culminadas en diciembre del año pasado. Sumado a ello, se resalta la integración de un nuevo Centro de Información de Combate (CIC), como así también la capacidad de desplegar torpedos Leonardo National Black Shark Advanced y misiles de crucero.
De esta manera, se espera que la plataforma pueda ser capaz de desempeñarse en un amplio abanico de misiones y escenarios, mismos que van desde la vigilancia de aguas territoriales y el comercio marítimo hasta misiones que demuestren la capacidad de disuasión contra potenciales amenazas. Al entender de la compañía italiana: “El programa aborda también la necesidad de garantizar una vigilancia y un control eficaces del ámbito submarino, en vista de la creciente complejidad de los futuros escenarios operativos (…) proporcionando plataformas capaces de apoyar la vigilancia de las rutas de comunicación marítima y la dimensión submarina en general, incluso en el marco de la OTAN y la UE.”
Por otra parte, en el caso particular de este cuarto submarino Tipo 212 NFS, ha de recordarse que se trata de un ejemplar por el cuál la antes mencionada OCCAR ha entregado la orden de compra a Fincantieri en el mes de junio de este año. Con dicho fin, incluyendo además un amplio paquete de repuestos y apoyo técnico para la flota de cuatro submarinos que arribarán a manos italianas, fue invertido un monto cercano a los 500 millones de euros.
Finalmente, no puede dejar de mencionarse que la construcción de estos submarinos no sólo constituye un importante programa para la Armada Italiana, sino que a su vez busca ser una muestra de las capacidades del astillero para exportar el modelo hacia clientes internacionales. En detalle, es menester considerar que el Tipo 212 NFS está en carrera para equipar a la Armada de Filipinas, siendo impulsado en conjunto por la propia Fincantieri y la empresa teutona TKMS. De dicho proceso también participan los modelos KSS-III surcoreanos fabricados por Hanwha Ocean, al igual que los Scorpéne de origen francés y los S-80 impulsados desde España.
*Imágenes empleadas a modo ilustrativo
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