Con motivo de la conmemoración de su 80° aniversario, la Armada de Corea del Sur (ROKN) llevó a cabo su primer ejercicio naval a nivel flota en los mares del Sur y del Este, un hecho sin precedentes que refleja el creciente grado de preparación militar del país ante un entorno regional cada vez más tensionado.
De acuerdo con la información oficial, las maniobras comenzaron el 9 de noviembre y se extendieron hasta la jornada de hoy, bajo la dirección del nuevo Comando de la Flota de Tarea, creado a principios de este año con el objetivo de contrarrestar las amenazas de Corea del Norte. “Mediante este primer ejercicio de maniobras marítimas a nivel de flota, hemos podido verificar la capacidad operativa del comando para llevar a cabo las misiones asignadas en cualquier momento y lugar”, declaró el contralmirante Kim In-ho, comandante de la Flota de Tarea de la Armada surcoreana.
Hasta ahora, los ejercicios navales surcoreanos se habían realizado únicamente a nivel de flotilla o escuadrón, por lo que esta edición marcó un salto cualitativo en el nivel de complejidad y coordinación. En esta oportunidad, es importante mencionar que participaron los tres nuevos destructores equipados con el sistema de combate Aegis de origen estadounidense, conocidos como el ROKS Jeongjo the Great (DDG-995), el ROKS Yulgok Yi I (DDG-992) y el ROKS Seoae Ryu Seong–ryong (DDG-993).
Particularmente, el primero de ellos mencionado pertenece a la nueva clase de buques, de un total de tres, de misiles guiados de la nueva case clase Sejong el Grande, también designados como “KDK-III Batch II”, que totalizan seis unidades englobadas en los buques del Batch I y del más moderno Batch II. Estos, a comparación del primer lote, son de mayor tamaño y cuentan con sistemas mejorados. Además, en términos de armamento se destaca un sistema de lanzamiento vertical de misiles de desarrollo local (KVLS), permitiendo el empleo de los misiles SM-3; de los cuales el Departamento de Estado ha autorizado la venta de nuevo lote en favor de Corea del Sur. Más allá de esto, durante el ejercicio también se contó con la participación de otros cuatro buques de guerra y tres aeronaves de apoyo.
Según detalló la Armada surcoreana, el ejercicio se centró en la respuesta ante “situaciones complejas en el campo de batalla”, abarcando simulacros de detección y seguimiento de misiles balísticos dentro del denominado “sistema de tres ejes”. Esta doctrina, que refleja el corazón de la doctrina de defensa de Corea del Sur, contempla el refuerzo de las capacidades de ataque (Kill Chain), defensa aérea (KAMD) y de represalias de las Fuerzas Armadas de la República de Corea (KMPR).
Detalladamente, durante las jornadas de ejercicios, los buques realizaron ejercicios de guerra antisuperficie antisubmarina y antiaérea, junto con prácticas de coordinación en formaciones navales y defensa aérea. Por su parte, el ROKS Seoae Ryu Seong-ryong ejecutó un ejercicio de intercepción de aeronaves y misiles guiados en condiciones simuladas de combate en el Mar del Este, demostrando la capacidad de la flota para operar en escenarios de alta intensidad.
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