El Ministerio de Defensa del Reino Unido confirmó oficialmente la transferencia a Ucrania de todos los obuses autopropulsados AS-90 que permanecían en servicio, sumando un total de 99 unidades. La información fue publicada en un documento difundido tras una solicitud bajo la Ley de Libertad de Información (FOIA), compartido en la red social X por el usuario NedSnow2019.
El informe precisa que los sistemas transferidos coinciden con los datos del Registro de Armas Convencionales de las Naciones Unidas (UN ROCA) correspondientes a 2021, en los cuales se registraban 99 unidades AS-90 en el inventario británico. Aún se desconoce el destino de los 37 obuses que en aquel momento se encontraban en proceso de desecho, aunque se presume que fueron utilizados como fuente de repuestos para el mantenimiento de los sistemas principales.
La respuesta del Ministerio de Defensa también confirmó la transferencia de 28 obuses autopropulsados M109A4BE desde el Reino Unido hacia Ucrania, junto con la entrega de 54 piezas de artillería remolcada L119 de 105 mm, actualmente en servicio con las fuerzas ucranianas.
Todos estos equipos forman parte de paquetes de asistencia militar previamente anunciados, cuya transferencia completa ha sido ahora oficialmente reconocida por las autoridades británicas. La respuesta a la solicitud FOIA constituye la primera documentación pública que acredita el envío total de los obuses AS-90 a Ucrania.
Además de los sistemas de artillería, el Reino Unido ha reforzado su apoyo militar mediante la entrega de un nuevo lote de misiles de crucero Storm Shadow. De acuerdo con un informe de Bloomberg, la cesión de un número no especificado de estos misiles “…se realizó para garantizar que Ucrania contara con el armamento necesario antes de los meses de invierno, durante los cuales el Reino Unido teme que el Kremlin intensifique los ataques contra civiles ucranianos…”, según detallaron fuentes consultadas por el medio.
Los misiles Storm Shadow, empleados por la Fuerza Aérea Ucraniana para atacar objetivos en territorio ruso, representan una de las principales capacidades de ataque de largo alcance provistas por Londres. Si bien las autoridades británicas no precisaron la cantidad exacta entregada, se estima que el lote sería reducido debido al limitado stock disponible.
El gobierno británico considera que el suministro de este tipo de armamento contribuye a mantener el equilibrio en el frente, ante los ataques continuos de las fuerzas rusas con misiles y drones. Paralelamente, Ucrania ha intensificado su propia campaña contra infraestructura estratégica en territorio ruso, apoyada en el desarrollo nacional de misiles y vehículos aéreos no tripulados.
En cuanto a las negociaciones recientes sobre la entrega de misiles de crucero Tomahawk por parte de Estados Unidos, las tratativas entre Kyiv y Washington no han prosperado, debido a las reservas expresadas por la administración Trump.
Imagen de portada ilustrativa. Créditos: MoD UK
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