En lo que sería una decisión que estaría en contradicción con la postura reportada el pasado mes de julio, reportes de medios locales indican que Alemania estaría evaluando expandir su futura flota de F-35A con la compra de nuevos cazas furtivos adicionales a los EE.UU., para lo cuál el país invertiría cerca de 2.500 millones de euros. Particularmente, la operación con la que se viene especulando en Berlín incluiría un total de 15 aeronaves fabricadas por Lockheed Martin, lo que llevaría el número de aeronaves de dicho tipo en manos teutonas a unas 50.
Ampliando en detalles, el medio Der Spiegel fue el que informó la novedad antes mencionada, afirmando que documentos clasificados presentados ante la Comisión de Presupuesto del Bundestag solicitan la adquisición de aviones F-35A adicionales. Cabe recordar en ese sentido, que los planes de la Fuerza Aérea de Alemania cara al futuro prevén la sustitución de su flota de aeronaves Panavia Tornado ya obsoletas por los ejemplares de origen estadounidense, convirtiendo a la adquisición en una de las mas relevantes para la institución en los últimos años. Mas aún, considerando que estas plataformas tendrían a su cargo la labor de desplegar armamento nuclear en caso de potencial conflicto; tratándose específicamente de bombas que pertenecen a los EE.UU. pero que están almacenadas en territorio alemán.

Por otra parte, la Fuerza Aérea de Alemania considera que ampliar el número de cazas F-35A con el que contará de cara al futuro será vital para cumplir con los requisitos establecidos recientemente por la OTAN, misma que ha aumentado la exigencia a sus miembros para hacer frente a lo que considera una latente amenaza por parte de Rusia. En dicha línea, tal y como reportamos el pasado 16 de octubre, es importante destacar que Berlín también dejó en firme la adquisición de un nuevo lote de 20 cazas Eurofighter Tranche 5 adicionales que permitan engrosar sus flotas de combate.
Es importante hacer mención, para ambos casos, que Alemania anteriormente no consideraba viable la compra de aeronaves adicionales por razones que principalmente se hallaban en las limitaciones presupuestarias. Sin embargo, la cartera de defensa se ha visto favorecida con la exención para inversiones que apunten a robustecer la seguridad del país en medio del entorno de elevadas tensiones en el que se encuentra, brindando al ministro Boris Pistorius un mayor margen de maniobra para nuevas adquisiciones. A su vez, la operación sería también vista como una nueva muestra política de buena voluntad con los EE.UU., cuyo presidente Donald Trump ha instado a los países europeos a invertir mas en su defensa a través de pedidos a la industria de su país.

Además, la cuestión aludida en el párrafo anterior respecto de la cuestión presupuestaria, tiene un impacto de gran relevancia no sólo en la compra de las propias aeronaves, sino que también en la infraestructura necesaria para albergarlos junto a su armamento. Hasta el momento, los cazas F-35A encargados por Alemania tendrían su asiento principal en la Base Aérea de Büchel, elegida entre otras cosas por ser uno de los puntos donde se encuentran las antes mencionadas bombas nucleares estadounidenses. En detalle, los informes recogen que los trabajos para adecuar dichas instalaciones para la llegada de los futuros cazas furtivos alemanes requirieron aumentar el financiamiento hasta los 2.000 millones de euros, cuando originalmente se preveía la inversión de 700 millones.
Finalmente, es menester plantear que al entender de los analistas germanos, la llegada de nuevos cazas F-35A sería una preocupante señal para el programa FCAS emprendido por el país junto a Francia y España. Hablamos de un programa que está enfrentando serios problemas para mantenerse en curso, en tanto la empresa Airbus que representa a Berlín en el proyecto está acusando a su par francesa Dassault de buscar hacerse con un porcentaje mayor al acordado en términos del desarrollo y fabricación del nuevo diseño de sexta generación. Con un antecedente similar en el caso del programa Eurofighter, el director ejecutivo Eric Trappier incluso deslizó que Dassault podría encarar el proyecto por su cuenta ante las reiteradas quejas alemanas; se espera que una decisión final al respecto sea tomada antes de fin de año.
*Imágenes empleadas a modo ilustrativo
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Alemania otrora potencia tecnologica que fabricaba sus propios aviones, ahora debe suplicarle a Francia, Inglaterra y Estados Unidos para comprarles aviones 🤦 Ojalá despierten del letargo en que los dejó la derrota mundial de 1945.