En un emotiva jornada realizada el pasado 22 de agosto en la Escuela de Aviación del Ejército “Coronel Arenales Uriburu”, un curso integrado por oficiales del Ejército Argentino, la Fuerza Aérea Argentina y de la Fuerza Aérea Uruguaya, celebró una nueva ceremonia de Vuelo Solo en el marco del Curso Básico Conjunto de Pilotos de Helicópteros (CBCPHEL). El evento contó con la presencia del Jefe del Ejército, Teniente General Carlos Presti; el Jefe de la Fuerza Aérea, Brigadier Gustavo Valverde; y el Jefe del Estado Mayor Conjunto, Brigadier General Xavier Isaac. También concurrieron autoridades de las demás fuerzas, instructores, y representantes institucionales.
El Vuelo solo es una de las etapas más decisivas en la carrera de un aviador militar que forma parte del Curso Básico Conjunto de Pilotos de Helicópteros (CBCPHEL). Tras una rigurosa formación teórica, práctica, y habiendo aprobado las inspecciones del patrón básico y de emergencias, los cursantes enfrentaron el desafío de volar solos por primera vez al mando de una aeronave Bell 206 B-3. Una vez alcanzada esta instancia, y siguiendo el protocolo tradicional, los efectivos recibieron sus pañuelos y distinciones por parte de sus instructores y jefes de las fuerzas.
Este logro representa no solo un logro formativo y símbolo de vocación, sino que también reafirma el carácter conjunto de la formación de aviadores militares en la Argentina. En tal sentido, el Jefe del Estado Mayor Conjunto, Brigadier General Xavier Isaac, expresó “Detrás de una ceremonia hay muchísimo esfuerzo detrás (…) no solo de recursos, sino también de personal, de días y horas de trabajo, como los técnicos que silenciosamente son quienes hacen que cada día tengamos las máquinas en servicio y que podamos volar de manera segura (…) Todos los sistemas de armas que vuelan en las Fuerzas Armadas constituyen un solo poder aéreo”
En detalle, el Curso Básico Conjunto de Pilotos de Helicópteros (CBCPHEL) es una formación intensiva que dura un año, y que agrupa a oficiales del Ejército, la Fuerza Aérea Argentina y también de la Armada, y ocasionalmente de fuerzas extranjeras. Originalmente establecido en 2009, al día de la fecha los cursantes acumulan 80 horas de vuelo, utilizando aeronaves Bell 206B‑3, y AB 206 B1. Luego de superar múltiples fases de su formación, y alcanzar las 40 horas de vuelo, cada cursante afronta el emblemático Vuelo Solo, instancia en la que demuestra que adquirió las destrezas necesarias para operar la aeronave de manera segura, sin el acompañamiento del instructor en cabina. Tradicionalmente, durante la ceremonia se entregan los pañuelos y diplomas, símbolos que reflejan la culminación de una etapa crítica en la formación como aviador.
Por último, cabe mencionar que la instrucción también se apoya en sistemas de simulación. En tal sentido, los cursantes se entrenan actualmente con el simulador Frasca y con el adiestrador tácticos en red, un sistema que permite operar varias aeronaves al mismo tiempo, en un entorno simulado de gran realismo, para los patrones de vuelo táctico y formación.
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Es lindo ver a una chica entre los nuevos palas. La mujer argentina, presente en la noble profesión de las armas en defensa de la Patria.