En el marco de la Operación Highmast, y como parte del despliegue del Carrier Strike Group 25 (CSG25) en la región del Indo-Pacífico, el portaaviones británico HMS Prince of Wales completó una serie de ejercitaciones con el portahelicópteros JS Kaga de la Fuerza Marítima de Autodefensa, previo a iniciar su visita a Japón. Durante nueve días de operaciones en el mar de Filipinas, unidades navales y aéreas del Reino Unido, Japón, Estados Unidos y otros países aliados realizaron entrenamientos combinados que incluyeron ejercicios de cubierta cruzada protagonizados cazas furtivos F-35B, además de una compleja maniobra de reaprovisionamiento en alta mar, reforzando la interoperabilidad y la cooperación multinacional.
El HMS Prince of Wales, uno de los buques insignia de la Royal Navy, lideró las actividades junto a tres grupos de combate aliados: el Carrier Strike Group V del USS George Washington, el Amphibious Ready Group centrado en el buque de asalto anfibio Tipo LHD USS America y el grupo de tareas del portahelicópteros clase Izumo JS Kaga. En total, once buques y veintitrés aeronaves de seis países participaron de las actividades, incluyendo medios navales de las Armadas de Australia, España y Noruega. Las operaciones abarcaron maniobras tácticas, combates aéreos simulados, operaciones antisubmarinas y vuelos en formación, culminando con un sobrevuelo conjunto sobre el portaaviones británico.
Uno de los momentos más destacados fue el aterrizaje de un caza furtivo F-35B británico en el JS Kaga, el primero de su tipo en la historia de la relación naval entre el Reino Unido y Japón. También participaron aeronaves F-35B del Cuerpo de Marines de Estados Unidos, lo que amplió la experiencia de operaciones multinacionales con aviones de quinta generación. Este logro fue posible tras meses de preparación y estrecha coordinación entre las fuerzas participantes, consolidando las capacidades de proyección de poder de ambas armadas en la región.
Este hito tiene antecedentes recientes. En 2023, oficiales de la Fuerza Marítima de Autodefensa de Japón visitaron el HMS Prince of Wales para conocer de primera mano sus procedimientos de operación con F-35B, y en 2024 inspeccionaron el portaaviones italiano ITS Cavour durante su estadía en Yokosuka. Mientras tanto, Japón avanza en la incorporación de cuarenta y dos F-35B destinados a la clase Izumo, actualmente en proceso de conversión para operar aeronaves STOVL (Short Take Off and Vertical Landing), con el JS Izumo previsto para iniciar operaciones con estos cazas en 2027 y el JS Kaga en 2028.
Las modificaciones en estos buques incluyen refuerzos estructurales, rediseños de cubierta y sistemas adaptados para soportar las altas temperaturas generadas por los motores de los F-35B. Aunque Japón ya había permitido operaciones con aeronaves extranjeras sobre el JS Izumo en 2021 y sobre el JS Kaga en fechas recientes, la participación de aviones británicos constituye un paso adicional hacia la integración operativa plena entre las fuerzas aliadas.
Durante su tránsito hacia Japón, el HMS Prince of Wales llevó a cabo una operación de Replenishment at Sea con la Armada de Estados Unidos, recibiendo combustible, municiones y provisiones sólidas. El reabastecimiento se realizó en combinación con el buque tanque RFA Tidespring y el buque logístico estadounidense USNS Wally Schirra, marcando la primera ocasión en que una unidad de la clase T-AKE realizaba este tipo de transferencia a un portaaviones británico. Este hito logístico refleja la estrecha colaboración entre ambas marinas en operaciones de larga distancia.
El HMS Prince of Wales permanecerá tres semanas en Japón, con actividades programadas en Yokosuka y Tokio entre finales de agosto y principios de septiembre. Su agenda incluye el Pacific Future Forum, que reunirá a líderes de defensa, seguridad e industria para abordar desafíos estratégicos y tecnológicos, así como una jornada dedicada a la industria británica de defensa. Paralelamente, la fragata HMS Richmond y el buque logístico RFA Tidespring visitarán Busan, en la República de Corea, reforzando la presencia británica en el Indo-Pacífico y el compromiso con la seguridad regional.
*Créditos de las imágenes: Ministerio de Defensa del Reino Unido.-
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