En el marco de los preparativos para la próxima Cumbre de Jefes de Estado del BRICS, que se celebrará durante los 6 y 7 de julio en la ciudad de Río de Janeiro, la Marina de Brasil ha puesto en marcha un amplio operativo de seguridad marítima y costera. Como parte de la Operación de Garantía de la Ley y el Orden (GLO), se desplegarán cerca de 2.000 efectivos y más de un centenar de medios navales, aeronavales y terrestres para asegurar los alrededores de la Marina da Glória, epicentro del evento, y otras zonas críticas del litoral carioca.
La Fuerza Componente Naval (FNC), activada para esta operación, operará del 2 al 9 de julio con la misión de proteger un área marítima de más de 270 km², que abarca playas emblemáticas como Copacabana, Ipanema, Leblon, São Conrado y Recreio, así como puntos estratégicos como la Bahía de Guanabara, la Marina da Glória, el Museo de Arte Moderno y diversas infraestructuras críticas, incluidos cables submarinos y oleoductos. La labor se desarrolla en estrecha coordinación con otras agencias de seguridad y bajo la conducción del Comando Operacional Conjunto Redentor.
Entre los principales medios desplegados por la Marina de Brasil para la Cumbre BRICS se destacan las fragatas clase Niteroi, junto a los patrulleros oceánicos clase Amazonas, diseñados específicamente para misiones de vigilancia y protección marítima, y embarcaciones de menor porte. A ellos se suman unidades de desembarco, fundamentales para el traslado de tropas, vehículos y equipos del mar a tierra, proporcionando movilidad y capacidad de proyección a las fuerzas del Cuerpo de Fusileros Navales (CFN).
En el componente aeronaval, destacan los helicópteros UH-15 Super Cougar, empleados en apoyo a operaciones especiales y navales terrestres, así como en tareas de evacuación aeromédica, búsqueda y rescate, transporte logístico y extinción de incendios. Complementan este despliegue los AH-11B Lynx, integrados a los sistemas de armas de los buques de superficie, que amplían la capacidad de detección y respuesta de la Flota, además de ser empleados en tareas de apoyo a operaciones especiales y misiones de rescate (SAR).
En cuanto al componente terrestre, se desplegarán vehículos blindados como el CLAnf (vehículo anfibio a orugas), el Piranha III-C (blindado 8×8 de alta movilidad) y los JLTV (vehículos tácticos ligeros), todos ellos fundamentales para operaciones de reconocimiento, patrullaje urbano y transporte seguro de tropas en diversos terrenos.
El despliegue contempla operaciones de patrullaje naval, control e interdicción de áreas marítimas próximas al evento, así como protección de infraestructuras críticas. La Armada también se encuentra preparada para evacuar autoridades mediante helicópteros o embarcaciones, y para transportar tropas del Cuerpo de Fusileros Navales (CFN) ante cualquier incidente que requiera intervención inmediata. Las acciones también incluyen actividades de buceo defensivo en áreas sensibles.
En el ámbito terrestre, las tropas del CFN serán responsables de la vigilancia perimetral, la seguridad de instalaciones clave, el patrullaje de vías de acceso y la ejecución de operaciones contra amenazas nucleares, biológicas, químicas y radiológicas (NBQR). Estas tareas se complementan con una capacidad de respuesta táctica ante incidentes, asegurando entornos seguros tanto para las delegaciones como para la población y los visitantes.
Entre las unidades de élite involucradas se encuentran los Comandos Anfíbios (COMANF) y los Mergulhadores de Combate (GRUMEC), que ya han iniciado ejercicios tácticos orientados a la protección de dignatarios y la neutralización de amenazas asimétricas en zonas urbanas y espacios confinados. Dichas maniobras incluyen prácticas con helicópteros, francotiradores y vehículos tácticos, con énfasis en entornos urbanos como hoteles y centros de convenciones.
Al respecto, el comandante de la Fuerza Componente Naval, contralmirante Robledo de Lemos Costa e Sá, destacó el carácter cooperativo del operativo, desatacando que “el esfuerzo sinérgico de las Fuerzas Armadas y otras instituciones para la seguridad de la Cumbre de Líderes BRICS refleja la preocupación por la seguridad de la población, visitantes y líderes mundiales durante el evento”.
La MB cuanta con una vasta experiencia en la cobertura de eventos internacionales de gran magnitud. Desde la ECO-92, la fuerza naval ha intervenido en la seguridad de eventos de gran magnitud como los Juegos Mundiales Militares, Río+20, la Copa Mundial de fútbol 2014, los Juegos Olímpicos 2016 y, más recientemente, la Cumbre del G20 en 2024.
*Créditos de las imágenes: Marina de Brasil. –
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