Como parte de un nuevo paquete de asistencia militar, el Reino Unido ha dado a conocer que utilizará los intereses obtenidos de fondos rusos congelados por las sanciones impuestas a Moscú desde el inicio de su invasión para financiar la transferencia de hasta 300 nuevos misiles ASRAAM a las Fuerzas Armadas de Ucrania, representando un nuevo impulso para su exigida red de defensa aérea. Particularmente, el monto de la operación alcanzaría las 70 millones de libras esterlinas provenientes del programa gubernamental de aceleración de ingresos extraordinarios (ERA), marcando la primera vez que estos se utilizan para enviar apoyo militar a Kiev.
La noticia ya fue confirmada por el primer ministro británico, el laborista Keir Starmer, quién en el marco de la reciente Cumbre de la OTAN manifestaba: “Rusia, no Ucrania, debería pagar el precio de la guerra bárbara e ilegal de Putin. Es justo que utilicemos los activos rusos confiscados para reforzar las defensas aéreas de Ucrania. La seguridad de Ucrania es vital para la nuestra.” Por su parte, el secretario de defensa John Healey afirmó que estos misiles salvarían vidas frente a lo que considera continuos ataques indiscriminados por parte de las fuerzas rusas, culminando con la aseveración “Putin no se toma en serio la paz“.
Resulta útil destacar que los misiles ASRAAM en cuestión, fueron originalmente diseñados como misiles aire-aire, pero que han sido sometidos a trabajos de readecuación por parte de ingenieros de la Real Fuerza Aérea y la filial británica de la empresa MBDA para su uso desde lanzadores terrestres montados en un camión 6×6 Supacat HMT; lo cuál se llevó a cabo en tan sólo tres meses. En detalle, el armamento estaría destinado a equipar a los ocho lanzadores Raven que Londres ya ha suministrado a su aliado, y que según recogen medios locales, se encuentra en proceso de transferir otros cinco.
Por otra parte, es menester mencionar que la decisión hasta el momento descrita se enmarca dentro de un compromiso de ayuda mucho mas amplio tomado por el Reino Unido para con Ucrania en el año, el cuál se traduce en la transferencia de hasta 4.500 millones de libras en asistencia militar. A su vez, se trata de un acuerdo que sigue la línea de aquel firmado en marzo por 1.600 millones de libras que representó más de 5.000 misiles antiaéreos para Kiev, y que se produce al poco tiempo de la decisión de invertir 350 millones de libras adicionales en el fortalecimiento de la estructura productiva de drones empleados por las fuerzas ucranianas en combate.
*Imágenes empleadas a modo ilustrativo
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