Avanzando en la modernización de sus capacidades de defensa antiaérea, el Pentágono ha ordenado la adquisición de nuevos sistemas antidrones Vampire a la compañía L3Harris para equipar a las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos. Así lo confirmó la firma estadounidense el 9 de junio, tras recibir un nuevo contrato del Departamento de Defensa, aunque sin revelar detalles adicionales sobre el monto o el plazo de entrega de los sistemas.
Este nuevo pedido se suma al adjudicado en el año 2023, valorado en 40 millones de dólares, destinado a reforzar las operaciones en Europa mediante la fabricación de 14 sistemas para Ucrania. En aquel momento, el objetivo era fortalecer las capacidades defensivas de las fuerzas ucranianas frente a las amenazas aéreas caracterizas por el uso masivo de drones de diverso tipo.
El Vampire es un sistema de defensa antidrones que integra un sistema de puntería y sensores WESCAM MX™-10D RSTA, también fabricado por L3Harris, y la capacidad de disparo de cohetes APKWS (Advanced Precision Kill Weapons System), dotados con espoleta de proximidad, y el software de gestión misión Widow, lo que le confiere una alta tasa de letalidad contra blancos terrestres y aéreos. Además, proporciona capacidades avanzadas de reconocimiento y ataque de precisión contra drones y aeronaves no tripuladas, permitiendo a las fuerzas aliadas proteger infraestructuras críticas de ataques enemigos.
Sobre el nuevo contrato, Tom Kirkland, vicepresidente y director general de Sistemas de Objetivos y Sensores de L3Harris, declaró “El sistema VAMPIRE ha demostrado ser una solución confiable y rentable frente a la creciente amenaza de drones en el campo de batalla global”. Además, añadió “Seguiremos trabajando en estrecha colaboración con el Departamento de Defensa y nuestros aliados para desplegar esta tecnología antidrones a nivel nacional e internacional”.
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