Con miras al inicio del ejercicio Strong Lineage 25 durante el próximo mes de junio en Eslovaquia, el Ejército de Tierra Español ha iniciado sus preparativos para lo que será su participación en la actividad multinacional con el alistamiento de sus vehículos de combate 8×8 Centauro, desplegados previamente en la base de Lešť. Este entrenamiento reunirá a las fuerzas de los países de la OTAN que integran la Brigada Multinacional Task Force de Eslovaquia (MN BDE TF SVK) con el objetivo de fortalecer su capacidad operativa, la interoperabilidad y la respuesta coordinada en esta región estratégica.

Como se ha destacado en informes anteriores, esta brigada multinacional es una estructura permanente de la OTAN, diseñada para disuadir y contener posibles amenazas, particularmente de origen ruso, tras su activación en 2022 como respuesta a la invasión de Ucrania. España ejerce el liderazgo de la unidad, en colaboración con Eslovaquia, República Checa, Portugal, Rumanía y Eslovenia.

Hemos mencionado que la ubicación de Eslovaquia en el flanco este de la OTAN, entre Polonia, Hungría y Ucrania, la convierte en un punto vital para garantizar la estabilidad regional y el flujo de suministros militares y logísticos hacia Ucrania. Desde enero de 2024, las fuerzas españolas han llevado a cabo un despliegue progresivo en el país, asumiendo en julio el mando del grupo de combate multinacional y relevando a las tropas checas.

Este compromiso refleja la estrategia de la Alianza Atlántica para reforzar la disuasión y la defensa colectiva, incrementando la presencia militar y los ejercicios conjuntos en la región. El Strong Lineage 25, que dará inicio a principios de junio, es un claro ejemplo de estos esfuerzos. En febrero, ya habían iniciado las conferencias de planificación en España que dieron lugar a los preparativos que ya están en marcha, con el embarque de material desde la Base General Morillo —sede de la Brigada “Galicia” VII— en el puerto de Vigo, Pontevedra. El despliegue del personal se realizará en tres rotaciones a finales de mayo, con salidas desde los aeropuertos de Vigo y Asturias.

El ejercicio busca consolidar la estructura de las fuerzas aliadas en Eslovaquia, que bajo liderazgo español deben alcanzar el nivel de brigada operativa. Para ello, se reforzarán aspectos clave como el mando y control, la interoperabilidad y la capacidad de respuesta en el flanco este. La Brigada “Galicia” VII incrementará su presencia con unos 650 efectivos —la mitad pertenecientes a sus propias unidades—, junto con 40 contenedores de material, más de 175 vehículos (incluyendo blindados, equipos de comunicaciones, logística y sanidad), así como helicópteros, drones y sistemas de artillería antiaérea.

En la base de Lešť, los equipos técnicos españoles ya trabajan en la revisión y puesta a punto de los VCBR Centauro. Personal de la Unidad Logística de la Task Force y del Parque y Centro de Mantenimiento de Sistemas Acorazados nº 2 (Segovia) colaboran para garantizar la operatividad total de estos sistemas. Esta integración de capacidades —que abarca mantenimiento en escalones 2º, 3º y 4º— optimiza recursos y procedimientos, asegurando la preparación del material antes del inicio del ejercicio.

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