Dentro de las múltiples actividades que lleva adelante la Armada Argentina en cumplimiento de sus objetivos y misiones, la navegación a vela ocupa un lugar fundamental para afianzar valores como la camaradería y el trabajo en equipo. Recientemente, Zona Militar tuvo la oportunidad de embarcarse en una navegación a bordo del yate ARA Fortuna III (Q-76), fiel exponente del espíritu náutico y la excelencia deportiva. Sucesor de los legendarios Fortuna y Fortuna II, este yate versión crucero-regata promueve la integración, con una tripulación compuesta por personal de la Armada y navegantes de distintos clubes náuticos del país. Es decir, una dotación mixta que representa a la Argentina en su conjunto.
Su participación en importantes regatas internacionales exige a la tripulación el máximo rendimiento, lo que ha llevado al Fortuna III a posicionarse dentro de una élite de unidades. Sus características técnicas lo han consagrado con la cinta azul y el mejor tiempo en la Regata Internacional Buenos Aires – Río de Janeiro.
Construido en el Taller de Mantenimiento Buenos Aires (T.T.B.A), siguiendo los planos y especificaciones del prestigioso diseñador Germán Frers, el casco, la cubierta y los mamparos interiores del Fortuna III fueron realizados íntegramente en fibra de carbono. Este material le confiere una gran resistencia y rigidez, con un peso muy reducido, sin perder flexibilidad.
Con un diseño espartano optimizado para la competición, el velero tiene capacidad para hasta 18 tripulantes, dependiendo del tipo de regata. La dotación se organiza en guardias, permitiendo optimizar el tiempo y el desempeño técnico para alcanzar el máximo resultado. Durante la competición, una guardia permanece activa, otra en modo stand-by pero en cubierta, y una tercera se encuentra descansando en las literas ubicadas en el interior del buque.
El mástil del Fortuna III, también fabricado completamente en carbono, incorpora un sistema hidráulico que permite su ajuste en función de las condiciones meteorológicas. Esto facilita modificar la tensión del aparejo según el perfil alar deseado para la vela.
La unidad dispone de un sistema de navegación por ordenador que puede operarse tanto desde el interior como desde cubierta, mediante conexión inalámbrica con una tablet. A ello se suma un software de navegación especializado, que brinda información táctica procesada a partir de un conjunto de sensores e instrumentos, combinados con datos meteorológicos. Este sistema es un recurso esencial al momento de tomar decisiones en función de la derrota prevista.
Un deporte sin tribuna
En diálogo exclusivo con Zona Militar, su comandante, Capitán de Navío Gustavo Pablo Rúa, expresó que “El Fortuna III es un barco que en la sociedad náutica es altamente importante. No cualquiera está a la altura de todo lo que ya ganó el Fortuna III. Más considerando el tipo de construcción, que es una de las primeras del país.”
En cuanto a su rol como baluarte en la competición náutica y los valores que transmite, Rúa destacó: “En la parte de formación de oficiales, nosotros tratamos que los guardiamarinas o tenientes de corbeta, que empiecen a entrar en este tipo de barcos para que completen su formación a nivel vela. Es muy importante todo el tema de navegación instrumental, navegación oceánica. Es un velero que nos vamos a 150, casi 200 millas fuera en una regata, como lo es la regata Río, y estamos lejos, y es cuando uno se da cuenta de la inmensidad de las cosas. Lo efímero que somos. Y la competencia en sí. Porque la navegación en regata es un público sin tribuna. Esto es un deporte que no tiene tribuna. Vos no tenés a nadie. No tenés ni contrincantes que te estén retando, ni tribuna que te esté alentando. Entonces es como estar solo con tu equipo. Y tenés que estar continuamente peleando contra vos mismo, tratando de dar el máximo de vos y en el equipo.”
Desde Zona Militar agrademos al Capitán de Navío Luis Matias Arbini y Capitán de Navío Gustavo Pablo Rúa por su tiempo y predisposición.-
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