Haciendo uso de su red social Telegram, el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky confirmó que la Armada de su país ha logrado finalizar con éxito las pruebas en combate de la nueva versión de rango extendido de su misil anti-buque de defensa costera R-360 Neptune, denominada como “Long Neptune”. Acorde ha manifestado, se trata de una avanzada plataforma con un alcance estimado de mil kilómetros, lo que se traduce en nuevas capacidades de ataque a largo alcance para el país que lleva envuelto en la actual guerra con Rusia desde 2022.

Citando lo expresado por el mandatario ucraniano: “Hoy también hubo informes sobre nuestro programa de misiles. Tenemos resultados significativos. ‘Long Neptune’ ha sido probado y utilizado con éxito en combate. Es un nuevo misil ucraniano, de ataque preciso. La distancia que puede recorrer es de mil kilómetros. Gracias a nuestros desarrolladores, fabricantes y militares ucranianos. Seguimos trabajando para garantizar la seguridad de Ucrania.

Ampliando en algunos detalles del nuevo armamento, ha de mencionarse que la nueva versión del misil, denominada “Long Neptune”, se caracteriza por una mayor longitud y capacidad de almacenar combustible en relación a su antecesor. El Neptune original, conocido por su empleo en el hundimiento del buque insignia de la Flota del Mar Negro rusa, el Moskva, tan sólo lograba recorrer un quinto del alcance antes mencionado. Por otro lado, se especula con que ya contando con antecedentes exitosos en combate, el misil formaría parte de los planes de la industria ucraniana para producir y entregar más de 100.000 proyectiles de largo alcance en 2025.

En relación con lo dicho respecto de sus antecedentes, un informe elaborado por Forbes que fue publicado durante la semana pasada, recoge que las Fuerzas Armadas Ucranianas han desplegado a sus Long Neptune en un ataque a las refinerías de petróleo rusas en la región de Tuapsé; la cuál está situada a unos 480 kilómetros de la frontera que comparten ambos países y que sería el hito celebrado por Zelensky en su comunicado oficial. El ataque en cuestión, forma a su vez parte de una larga serie de ataques a las instalaciones petroleras rusas por parte de Kiev, lo que según estimaciones occidentales se tradujo en una merma del 10% de la producción durante el 2024.

Anterior a ello podemos encontrar posibles antecedentes del uso de estos misiles en el pasado mes de octubre, momento en el que el portavoz de la Armada de Ucrania, Dmytro Pletenchuk, deslizaba que se había empleado un nuevo misil de largo alcance en ataques contra un almacén de armas ruso situado en Kursk. En aquella ocasión, sus palabras fueron “(…) Sólo podemos confirmar la participación de las Fuerzas Navales sin revelar los detalles. Los casos que ocurrieron anteriormente, tanto en Yeisk como en el puerto de “Kavkaz”, insinúan que las capacidades de nuestras armas, que están en servicio con las unidades de la Armada, indican un radio de acción bastante grande de posible uso.”

Por lo pronto, la llegada de este nuevo armamento no es el único que recientemente han dado a conocer las Fuerzas Armadas ucranianas, incluyéndose entre ellos nuevos drones de ataque y sistemas de defensa aérea. Tal y como reportábamos este mismo mes, Kiev develó imágenes de sus nuevos sistemas no tripulados SETH siendo utilizados por sus unidades de infantería, destacándose su diseño similar al de un dron Shahed de origen iraní. Además, también se revelaron nuevas imágenes de su peculiar sistema de defensa aérea de corto alcance denominado “FrankenSAM”; mismo que toma como base las plataformas Buk-M1 de origen ruso e integra los misiles RIM-7 Sea Sparrow suministrados por EE.UU.

*Imágenes empleadas a modo ilustrativo

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