Teniendo como marco una entrevista realizada por medios surcoreanos, el Jefe de la Inteligencia de Defensa de Ucrania (DIU), teniente general Kyrylo Budanov, afirmó que Rusia ha introducido mejoras en los misiles balísticos KN-23 de las Fuerzas Armadas de Corea del Norte que están participando de la guerra en Ucrania desde el año pasado con envíos de personal y material militar. Acorde a su mirada, se trata de una noticia que implica importantes peligros no sólo para sus fuerzas en el continente europeo, sino que también afectará el escenario regional en Asia, en tanto Pyongyang podría aplicar las modificaciones en su propio arsenal.
Particularmente, en lo que refiere a las mejoras observables en los mencionados misiles balísticos KN-23, las palabras del teniente general Budanov apuntan a que Rusia habría logrado mejorar considerablemente su precisión; lo que se resaltaba como el principal eslabón débil del sistema. En términos concretos, el diseño base de estos misiles norcoreanos contaba con un margen de error situado entre los 500 y 1500 metros según afirma el jefe de la DIU, algo que habría sido modificado por los técnicos rusos para aumentar su efectividad.

Refiriéndose a estas cuestiones, Budanov expresó: “Corea del Norte está utilizando esta guerra para ganar experiencia en combate y modernizar su tecnología militar. Esto tendrá consecuencias a largo plazo para el sistema de seguridad de la región Asia-Pacífico (…) Ahora el misil (NdE: refiriéndose a los KN-23) se ha vuelto mucho más preciso y representa una amenaza mucho más seria.“
En relación con esto último, resulta de utilidad recordar que Corea del Norte ha enviado a Ucrania un contingente de tropas estimado en los 12.000 hombres para apoyar el esfuerzo bélico ruso, junto a diversos lotes de sistemas de artillería, municiones y misiles. A pesar de que cerca de un tercio de esta fuerza ya ha resultado herida de gravedad o muerta en combate, Budanov ha indicado que implica la ganancia de experiencia en combate directo, lo que le permitirá al país renovar su doctrina militar completamente a fines de evitar un mal desempeño como el hasta ahora mostrado en Europa.

Por otra parte, mientras que las tropas norcoreanas adquieren esta experiencia en combate lejos de casa, en Pyongyang se trabaja en iniciar la producción a gran escala de nuevos drones con asistencia de Moscú para renovar las capacidades de sus Fuerzas Armadas. Agregado a ello, se estaría negociando el arribo de nuevos cazas MiG-29 y Su-27 para su Fuerza Aérea, la cuál cuenta con un inventario de plataformas ya obsoletas para los estándares modernos, estando compuesta la misma por aeronaves MiG-17, MiG-19 y MiG-21. Ambas cuestiones son tomadas por analistas occidentales como clara muestra de la intención rusa de retribuir el apoyo norcoreano en Ucrania.
*Imágenes empleadas a modo ilustrativo
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Esos combatientes norcoreanos están entre nosotros?