El pasado viernes 31 de enero, la Real Armada Británica comunicó a través de sus redes sociales que han finalizado los trabajos de extensión de vida útil y modernización de la última fragata Tipo 23, a saber, la HMS Sutherland. Particularmente, las labores realizadas sobre el mencionado buque estuvieron a cargo de la compañía británica Babcock, la cuál detalló que gracias a ello la fragata será capaz de seguir en el servicio activo hasta mediados de la próxima década.
Ampliando en detalles de los trabajos realizados, la Royal Navy detalló que la HMS Sutherland recibió en el astillero una revisión completa de su estructura, derivando ello en más de 11.500 reparaciones de soldaduras y más de 800 insertos de acero en el casco. Agregado a esto, se han reconstruido las áreas de motores y generadores a fines de mejorar la distribución en la nave, estando también ligado a ello la instalación de un importante número de nuevas tuberías (que se estiman en hasta 600 metros) y cableados (cerca de 8 km).
Por otra parte, el período de reparaciones y modernización del buque en cuestión también destaca por la incorporación del avanzado sistema de sonar 2150 mejorado en la proa del mismo, para lo cuál fue necesaria la remoción de la cúpula instalada previamente y por consiguiente un complejo trabajo en las alturas que requirió equipo especializado. En suma, también se reemplazó el sistema de misiles Sea Wolf que equipaba a la nave previamente con el nuevo sistema Sea Ceptor, el cuál ya demostró su valía en las operaciones llevadas a cabo por su buque hermano, el HMS Richmond, desplegado en Oriente Medio. En su conjunto, las labores tomaron un total de 49 meses, siendo el segundo proceso LIFEX emprendido por la Real Armada Británica.
Refiriéndose a las labores de reparación y modernización el director ejecutivo del sector marino de Babcock, Sir Nick Hine, manifestó: “Después de un importante programa de mantenimiento, es fantástico ver al HMS Sutherland iniciando pruebas en el mar y en camino de lograr su capacidad total antes de reincorporarse a la flota. Nuestro equipo ha brindado conocimientos confiables, aprovechando nuestra dilatada experiencia en soporte durante toda su vida útil para preparar el barco antes de que reanude su viaje para apoyar la defensa de la nación. Estamos orgullosos de apoyar estos importantes activos navales y de trabajar junto con nuestros colegas del Ministerio de Defensa y de la Marina Real.“
Finalmente, cabe mencionarse que si bien la finalización de los trabajos a los que se sometió a la HMS Sutherland representan el final del programa LIFEX de la Royal Navy para sus fragatas Tipo 23, la empresa Babcock se sostiene como responsable de brindar mantenimiento a las mismas hasta su retiro; tal es el caso del buque HMS Kent, que se encuentra actualmente en el Centro de Apoyo a Fragatas para recibir trabajos de mantenimiento posteriores a su propio proceso de reparaciones y modernización. De cara al futuro, la institución se prepara incorporar a las nuevas fragatas Tipo 26 como su reemplazantes definitivos, mismas que actualmente están siendo producidas por BAE Systems.
*Créditos de las imagenes: Real Armada Británica.
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