Rusia envia mas cascos azules a Sudan

Guitro01

Forista Sancionado o Expulsado
RUSIA ENVIARÁ SEGUNDO GRUPO DE CASCOS AZULES A SUDÁN EL 3 DE MAYO

Moscú, 2 de mayo, RIA Novosti. Una decena de militares rusos, que deberán formar parte del contingente de cascos azules de la ONU en Sudán, saldrán el miércoles en un vuelo especial con destino a Juba, en un Iliushin-76 que llevará también casi 30 toneladas de equipos técnicos.

Estos efectivos se sumarán al primer grupo que permanece en el territorio sudanés desde principios de abril, a cargo del coronel Mikhail Petrovichev, y cuya misión es instalar un campamento base para acoger a los demás. Para el viernes, 5 de mayo, está prevista la salida de otros dos Iliushin-76, con una veintena de personas y una carga de casi 60 toneladas a bordo.
 
Solamente una decena de soldados? Dudo que consigan mucho con ayuda de tal calibre, pero en tal caso es mejor que nada.

SALUDOS
 

joseph

Colaborador
Colaborador
Lo importante es que vayan porque al parecer la situacion es bastante critica, lo que hay que recalcar que EEUU al parecer no tiene mucha predispocion de enviar gente en este casos.
 
M

MIGUEL

joseph dijo:
Lo importante es que vayan porque al parecer la situacion es bastante critica, lo que hay que recalcar que EEUU al parecer no tiene mucha predispocion de enviar gente en este casos.


No hay que saquear...

Atte.-

Miguel
 

joseph

Colaborador
Colaborador
Miguel estan demasiado ocupados reuniendo tropas en Irak y Afganistan por si la cosas con Iran estalla.
 

Guitro01

Forista Sancionado o Expulsado
En Irak hay mucho petroleo, en Afganistan gracias a la deposicion del regimen taliban lograron trazar el famoso oleoducto ... otra vez, en Sudan no hay nada para robar
 

Iconoclasta

Colaborador
Perdon por lo extenso, pero creo que vale la pena y sirve para comprender tal vez, la situacion actual en darfur

D
esde hace unos meses el dramático sufrimiento de los pueblos de la provincia de Darfur (occidente de Sudán) ha recibido una gran atención por parte de los gobiernos, políticos, periodistas y comentaristas occidentales. Las imágenes y los artículos muestran el hambre, la enfermedad y la muerte impuestas sobre el darfouri, las actividades asesinas de las milicias janjawid armadas por el régimen de Jartum y los cientos de miles de hombres, mujeres y niños desesperados que han tenido que abandonar sus hogares y tierras en busca de refugio en el vecino Chad o en los improvisados campos “humanitarios”.
Desgraciadamente, no hay nada excepcional en la situación de Darfur. A través de todo el mundo subdesarrollado, y particularmente en África, el desplazamiento en masa de la población, la tortura, la violación, el pillaje y las masacres son algo común. Y sólo en muy raras ocasiones llaman la atención del público occidental. El tipo de cobertura y “tratamiento” recibidos por la crisis de Darfur es realmente algo excepcional.
La crisis en Darfur lleva desarrollándose desde hace mucho tiempo. Y desde un punto de vista puramente práctico, las necesidades más inmediatas de la población local se podrían satisfacer con relativa facilidad. Cientos de miles de personas están pasando hambre. Los recién nacidos, los niños y los ancianos están muriendo a un ritmo alarmante. Algunos informes dan cifras de aproximadamente 2.000 muertes diarias. ¿Por qué no llega la comida? La excusa de los “malos caminos” y las acciones de “bandas armadas” que supuestamente impiden la llegada de comida y suministros a los campos realmente no son convincentes. La realidad es que la comida, el agua, el abrigo y el cuidado médico podrían llegar fácilmente a los campos de refugiados en aviones y helicópteros. El año pasado, en sólo unas cuantas semanas, los gobiernos norteamericano y británico trasportaron a más de 250.000 soldados, con tanques, vehículos, aviones y toda una “industria militar de apoyo” para poder llevar a cabo la invasión de Iraq. ¿Entonces no es posible llevar toneladas de comida a Darfur? La verdad es que la administración estadounidense no quiere aliviar el sufrimiento de las tribus de Darfur, precisamente porque están siendo utilizadas como excusa para el bloqueo del país. A pesar del escándalo de la limpieza étnica y el genocidio, los gobiernos occidentales han donado muy poco dinero y la mayor parte no se está utilizando para aliviar el hambre y la violencia.
Toda esta preocupación humanitaria por parte de Bush y Blair que nunca han vacilado, como en Iraq, en infligir sufrimiento y muerte cuando estaban en juego los intereses de “sus” empresas en realidad oculta la avaricia imperialista de petróleo y beneficios. El imperialismo estadounidense en particular está intentado utilizar el sufrimiento de los pueblos de Darfur para conseguir un embargo comercial contra Sudán, para que sus principales rivales no puedan acceder a los pozos de petróleo sudaneses. La amenaza de embargo va dirigida principalmente contra China, Francia, India y Malasia, que tienen intereses petroleros en Sudán. Al mismo tiempo, está siendo utilizado como una forma de aumentar la presión sobre el gobierno sudanés y fortalecer la posición militar y estratégica de EEUU en esta parte del mundo. Al noreste de Sudán está el Mar Rojo con sus vitales terminales petroleras en la costa occidental de Arabia Saudí.
La presión tan intensa que se está haciendo para imponer un embargo internacional contra Sudán es una prueba suficiente del carácter totalmente hipócrita de la propaganda humanitaria de la Administración estadounidense. Las consecuencias de este embargo supondrían hundir a toda la población de Sudán en una situación similar a la que existe en Darfur. Sudán es un país muy atrasado e incluso sin la consecuencias devastadoras del embargo, la gran mayoría de la población es extremadamente pobre. Un embargo internacional sólo supondría hambre para las masas.
Otro argumento utilizado por la Administración estadounidense a favor de las sanciones económicas es la acusación contra el gobierno de Sudán de perpetrar un “genocidio” en Darfur. En la reunión del Consejo de Seguridad de la ONU celebrada a principios de septiembre, el debate sobre la situación de Sudán estuvo dominado por este argumento. Nadie mencionó el petróleo, pero todas las partes interesadas conocen perfectamente que está realmente en juego, incluida por supuesto la delegación china que se opuso vehementemente a la imposición del embargo. La delegación norteamericana insistió en el uso del término “genocidio” para reforzar su propuesta de bloqueo económico y abrir así la posibilidad de una intervención militar directa. El término “genocidio” fue utilizado también con relación a los albaneses para justificar la guerra contra Serbia en 1997, mientras que en Ruanda un país de escasa importancia para EEUU la administración Clinton se negó a calificar de “genocidio” los asesinatos de masas cuando fueron masacrados más de un millón de tutsis. Las personas sin hogar y hambrientas de Darfur son sólo otro instrumento en el juego por el control de los beneficios y el petróleo.

La lucha por el control
del petróleo sudanés

En 1980 Francia adquirió los derechos de explotación y producción de petróleo en el sector “Bloque B” (ahora “Bloque 5”) que abarca una zona de 120.000 kilómetros cuadrados, desde el norte al sur entre Malakal y Bor y al este, en dirección a la frontera etiope. Las pruebas geológicas realizadas por los ingenieros franceses revelaron que el Bloque tenía un potencial considerable para la producción de petróleo. En el momento actual se cree que Sudán cuenta con los recursos petroleros sin explotar más importantes de África, incluso mayores que los del Golfo de Guinea. Las exportaciones de petróleo equivalen al 70 por ciento del PIB sudanés. Sin embargo, en 1985, Francia tuvo que suspender las operaciones en la región debido a una guerra entre las fuerzas armadas sudanesas y el Ejército de Liberación de los Pueblos Sudaneses (ELPS). En las últimas décadas el imperialismo francés ha sido el principal apoyo internacional del régimen sudanés, le ha proporcionado armas, tanques, aviones e inteligencia militar para su guerra contra las fuerzas rebeldes del sur.
EEUU, por otro lado, utilizando organizaciones mercenarias y a través de estados africanos intermediarios, ha dado apoyo militar a los rebeldes entrenados en Uganda, Etiopía y Eritrea para intentar debilitar la posición del gobierno sudanés y para impedir que Total-Final-Elf reiniciaran sus operaciones en el Bloque 5, además de intentar conseguir los contratos de producción y explotación del petróleo. Mientras mantiene la presión militar y anima la desestabilización del país, la Administración estadounidense está decidida a impedir que las otras potencias consoliden su posición con relación al petróleo sudanés. Como hemos visto, Francia, a pesar de haber conseguido hace veinticuatro años los contratos de explotación y producción, no ha podido ponerlos en práctica debido a la guerra en el sur. La compañía canadiense Talismán Energy también ha sufrido una intensa presión de EEEU y ahora se enfrenta en un tribunal norteamericano por las acusaciones de “complicidad en el genocidio y crímenes de guerra” con relación a sus operaciones pasadas en Sudán.
La exploración petrolera en Sudán se remonta a los años sesenta, pero las exportaciones de crudo no empezaron hasta 1993. La empresa estadounidense Chevron se marchó de Sudán en 1985 después de haber invertido 1.500 millones de dólares. Chevron descubrió petróleo en varios lugares, pero a una escala demasiado pequeña como para poder mantener su concesión en una zona de guerra. En el momento que la verdadera escala de las reservas de petróleo fueron evidentes, las petroleras norteamericanas ya estaban fuera del país. En 1997, EEUU impuso sanciones económicas y se prohibieron las inversiones estadounidenses en Sudán. Desde entonces, la producción petrolera sudanesa alcanzó los 500.000 barriles diarios, comparados con los 270.000 de 2003 y podría llegar a los 750.000 barriles a finales de 2006. Los beneficios y los recursos petroleros están yendo a las manos de los rivales de EEUU, sobre todo de China.
El surgimiento de China como una potencia importante en la escena mundial representa una amenaza directa a los intereses del imperialismo occidental en general, y del estadounidense en particular. En 2003 las importaciones chinas de petróleo subieron un 40% con relación al año anterior. En la actualidad, China tiene aproximadamente 50 proyectos petroleros y petroquímicos en todo el mundo. China necesita garantizar sus propias reservas de petróleo. Esta necesidad vital sólo puede satisfacerla desafiando la posición dominante de EEUU.
Ahora las importaciones petroleras de Sudán suponen un 6% de todas las importaciones petroleras de China. Este porcentaje puede crecer muy rápidamente si tenemos en cuenta las masivas inversiones que ha hecho China en la industria petrolera sudanesa desde los años noventa. La empresa petrolera estatal china, China National Petroleum Corporation (CNPC), posee un 40% de Greater Nile Petroleum Operating Company (GNPOC), que controla dos de los campos petroleros más importantes de la provincia del Alto Nilo de Sudán. A mediados de 2005 CNPC comenzará a producir petróleo en Melut Basin, al este del Nilo. Otras empresas chinas también están participando en la construcción de un oleoducto de 1.400 kilómetros que iría desde Melut Basin hasta el Port Sudan, donde China está construyendo una terminal petrolera para exportar el crudo. China se ha convertido en el socio comercial más importante de Sudán. Resulta significativo que el único petróleo que está saliendo de Darfur sea el explotado por CNPC.
Geográficamente, Sudán ocupa una posición estratégica importante. China está en proceso de consolidar su poder en Sudán, que será después utilizado como una plataforma para el comercio y transporte de petróleo entre África central, Oriente Medio y la propia China. Esta situación es inaceptable para Washington que incluso está dispuesto a dividir el país en dos o más entidades y de este modo impedir el acceso a los pozos de petróleo. Entre los diferentes grupos implicados en las milicias del sur, la Administración norteamericana ha estado promoviendo a aquellos que defienden la secesión del norte del país, y varias “misiones cristianas” particularmente reaccionarias con poderosos apoyos financieros en EEUU que llevan años fomentando el odio racial contra los “árabes”. Pero la Administración estadounidense no permite que las consideraciones religiosas interfieran en los asuntos reales. El gobierno norteamericano no sólo ha entrenado militarmente, ha entregado armas y dinero al ELPS, también está apoyando al Movimiento Justicia e Igualdad (MJI) que está vinculado al fundamentalista islámico Al Turabi, que ayudó en 1989 a Al Bachir a llegar al poder. Al Turabi fue desposeído por Al Bachir en 2000 y firmó un acuerdo con el ELPS en 2001. Actualmente está detenido por las autoridades de Jartum.
 

Guitro01

Forista Sancionado o Expulsado
Chupate esa mandarina Guitro!!!! Muy buen informe Hernan y gracias Bushmaster por la correcion
 

joseph

Colaborador
Colaborador
No nos extrañemos que Rusia o China envie ayuda "humanitaria" para Sudan. Lo qui si EEUU con tal de que no se les escape el negocio apoya a cualquiera sea musulman, judio o induista.
 
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