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Mensaje: <blockquote data-quote="EFDV" data-source="post: 3713543" data-attributes="member: 15609">Lo que informa la parte francesa de la última conversación telefónica entre Macron y Putin, la primera llamada entre ambos mandatarios en más de dos años y por solicitud francesa, es que la posición rusa se mantiene firme en todo este tema.Nada hace pensar que este pronta a buscar otra solución.Dado que se trata de una guerra de desgaste. Ambas partes sufren desgaste, pero continúan porque ambos compiten en ver cuál aguanta más el desgaste y, obviamente, trabajan en desgastar más al rival de lo que te desgasta. ¿Quién aguanta más? ¿Quién se agota primero y tira primero la toalla? ¿quién levanta primero el teléfono? ya que no pueden evitar el desgaste, cada parte sueña con aguantar media hora más que su rival. Sólo necesita eso, sostenerse en pie un poco más que su rival.El tema de las guerras de desgaste es que no la definen los ejércitos en el campo de batalla, sino que lo definen las economías. La economía más grande aguanta más el desgaste que la economía más pequeña. Y con economía en este tema se abarca la capacidad industrial, la red de transporte, la red energética, la demografía (el que tiene más población en edad de combatir y trabajar, la moral y disciplina de la población en el esfuerzo que le toca y el apoyo a sus autoridades, etc.), el acceso a recursos estratégicos (petróleo, hierro, rutas vitales, etc.), etc.En una guerra corta la ventaja tecnológica cuenta. Tanto una ventaja tecnológica dura (como un arma avanzada de la que carece el rival) como una ventaja tecnológica blanda (como podría ser algún tipo de táctica o estrategia innovadora). Pero en una guerra de desgaste, la ventaja tecnológica de cualquier rival pierde relevancia. O, más correcto, las ventajas tecnológicas, duras y blandas, en la dimensión económica son más importantes que cualquier ventaja tecnológica, dura y blanda, en la dimensión militar.Todos los analistas del mundo coinciden en que Ucrania es la más débil para esta guerra de desgaste. Fácilmente verificable al comparar ambas economías, sus capacidades potenciales y reales y los desgastes que sufren. Es más, en algunas cosas se da un juego de suma cero, lo que pierde uno lo gana el otro (por ejemplo, territorios con sus minas, poblaciones y rutas).A medida que la guerra de desgaste se alarga, la que se agotará primero es Ucrania. Rusia lo sabe. Ucrania lo sabe.Ucrania parece depender de dos cosas. Primero, de algún tipo de golpe de efecto que atente contra la moral de la población y la legitimidad del gobierno de su rival y, gracias a ello, cambie su posición. Nada de lo cual parece haber sucedido hasta ahora. Quizás, lo más cerca de ello fue el motín del grupo Wagner. Pero en vista de la historia, parece una anécdota. El gobierno ruso se observa más sólido y estable que sus pares ucranianos.Lo segundo y más importante de lo que depende Ucrania es, ante todo, de sus benefactores. La economía combinada de todos esos benefactores es superior a la economía rusa, así que pueden aguantar más que esta última.Ucrania entiende este conflicto como vital. Rusia define este conflicto como vital. El que pierde en un conflicto vital... muere. Pero ¿es vital para los benefactores de Ucrania? El problema de Ucrania no parece estar en el campo de batalla, sino en la capacidad de mantener y acrecentar el compromiso de sus benefactores.Ayer, Francia levantó primero el teléfono.¿Qué piensa Rusia cada vez que escuchar sonar su teléfono? Да! ¿Qué responde a lo que le dicen por teléfono? нет.</blockquote>

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