Comandante de MB Habla sobre el sub nuclear

paulo

Forista Sancionado o Expulsado
Submarino nuclear brasileño: la palabra del Comandante de la MB


“La importancia de la construcción del submarino de propulsión nuclear brasileño”

La grandeza y la abarcamiento de esa construcción obligan que su análisis sea desdoblada según, al menos, tres vertientes principales: la estratégica, que establece su razón de ser; la tecnológica, que significa un cambio de nivel para Brasil; y su contribución al desarrollo de una industria nacional de defensa, que llevará el País a la autosuficiencia en el proyecto y en la fabricación de su propio material militar.

I. ASPECTOS ESTRATÉGICOS
En el contexto de la guerra naval, el submarino es el medio que, de entre todos, presenta la mejor razón coste / beneficio. Su ventaja determinante resulta de la capacidad de ocultación, lo que, en términos bélicos, significa sorpresa, uno de los grandes factores de fuerza en cualquier enfrentamiento. Radares nada detectan abajo d'agua y, de las formas conocidas de energía, la única que consigue propagarse significativamente en la masa líquida es la energía acústica. Así, solamente las olas sonoras emitidas por sónares pueden, en tesis, permitir la detección del submarino. Sin embargo, por fuerza de las propias leyes de la física, la propagación acústica, en el mar, no se da en línea recta, pero según determinados patrones, en función de parámetros mensurables, generando grandes “zonas de sombra”, donde el sonido no penetra con intensidad apreciable. La diligente explotación del fenómeno permite al submarino confundirse con el medioambiente en que opera, preservando la ocultación y desequilibrando la contienda a su favor, de tal suerte que es necesario un conjunto de medios navales de superficie y aeronavales para contraponerse, con alguna oportunidad, el un único submarino.

Es por causa de esa superioridad intrínseca, resultante de la capacidad de ocultación, que el submarino se volvió, históricamente, el arma de quien tenía que enfrentar uno oponente que dominaba los mares, como bien ejemplifica la opción alemana, en dos guerras mundiales, y la de la Unión Soviética, durante la Guerra Fría. Releva notar, sin embargo, que, se por un lado, el submarino puede neutralizar fuerzas navales mucho superiores, no puede sustituirlas en sus respectivos misteres.

Submarinos convencionales y submarinos nucleares
Cuando se habla en submarinos, hay que separarlos en dos grandes categorías: la de los convencionales y la de los nucleares.

Para los convencionales, la fuente de energía es el aceite diesel, combustible que hace funcionar los conjuntos de motores diesel y generadores eléctricos. La energía por ellos generada es, entonces, almacenada en grandes baterías, que, en total, pesan 250 toneladas. Además de atender a todas las demandas de la vida a bordo, esa energía Es aplicada en un Motor Eléctrico de Propulsión, garantizando el desplazamiento del submarino.

En el caso de los convencionales, la capacidad de ocultación tiene que ser periódicamente rota, una vez que necesitan, a intervalos, recargar sus baterías. Para tanto, deben se posicione próximo a la superficie del mar y, mediante equipamiento especial, denominado esnorquel, aspirar el aire atmosférico, para permitir la puesta en marcha de los motores diesel y la renovación del aire ambiente. En esas horas, en función de las partes expuestas arriba d'agua, se vuelven vulnerables, podiendo ser detectados por radares de aeronaves o barcos. Para limitar tal exposición, deben ahorrar energía a máximo, lo que les limita la movilidad. Por ello, son empleados según una estrategia de posición, esto Es, son posicionados en un área limitada, donde permanecen en patrulla, la baja velocidad. En razón de eso y gracias la sus reducidas dimensiones, que les permiten maniobrar en aguas mucho rasas, son normalmente empleados en áreas costeras. La dependencia del aire atmosférico y la baja movilidad son las grandes limitaciones de los submarinos convencionales.

Para los nucleares, la fuente de energía es un reactor nuclear, cuyo calor generado vaporiza agua, posibilitando el empleo de ese vapor en turbinas. Dependiendo del arreglo peculiar de cada submarino, las turbinas pueden accionar generadores eléctricos o el propio eje propulsor. Naturalmente, en cualquier caso, producen toda la energía necesaria a la vida a bordo.

Diferentemente de los submarinos convencionales, los nucleares disponen de elevada movilidad. Son fundamentales para la defensa distante de las aguas oceánicas (aguas profundas). Por posean fuente virtualmente inagotable de energía y puedan desarrollar altas velocidades, por tiempo ilimitado, cubriendo rápidamente áreas geográficas considerables, son empleados según una estrategia de movimiento. Delante de esas características, pueden llegar a cualquier lugar en poco tiempo, lo que, en la ecuación del oponente, significa poder estar en todos los sitios a la vez. El submarino nuclear es sencillamente el “señor de los mares”.

Submarinos en la estrategia naval brasileña
Rápido temprano, la Marina de Brasil (MB) entendió la importancia de esos medios, tanto que posee sumergibles en su inventario desde 1914, lo que pone nuestra Fuerza de Submarinos entre las más antiguas del mundo. A lo largo de los primeros 75 años, nuestras unidades eran construidas en otros países: inicialmente, en Italia, del principio hasta los años 1950, cuando pasamos a operar submarinos americanos. A partir de la década de 1970, teniendo Estados Unidos descontinuado la producción de convencionales, pasamos a adquirirlos de Gran Bretaña; y, desde el final de los años 1980, operamos submarinos de modelo alemán, uno de ellos, fabricado en Alemania y cuatro, en Brasil.

Considerando la vastidão del Atlántico Sur, natural teatro de nuestras operaciones navales y la magnitud de nuestros intereses en el mar, la Marina constató, desde entonces, que, en lo que tañía a submarinos, la posesión de convencionales no era el bastante. Para el cumplimiento de su misión constitucional de defender la soberanía, la integridad territorial y los intereses marítimos del País, se volvía menester disponer, también, de submarinos nucleares. Aquellos, delante de sus peculiaridades, para empleo preponderante en áreas costeras, en zonas de patrulla limitadas. Estos, gracias a la excepcional movilidad, para la garantía de la defensa avanzada de la frontera marítima más distante.

Delante de la necesidad estratégica, por un lado y, por otro, del “apartheid” tecnológico que siempre negó a países periféricos el desarrollo de las tecnologías asociadas al dominio del átomo, la MB decidió desarrollar, de manera autóctona, la tecnología de construcción de submarinos nucleares.

Así, desde el final de la década de 1970, conduce, en las dependencias de su Centro Tecnológico de Marina en São Paulo, un programa de desarrollo de tecnología nuclear, visando, por un lado, el dominio del ciclo del combustible nuclear, que logró éxito en 1982; por otro, la construcción de uno prototipo de reactor nuclear capaz de generar energía para hacer funcionar la planta de propulsión de un submarino nuclear, lo que todavía no está listo, con operación prevista para 2013.

Paralelamente, para capacitarse a construir submarinos, en la misma época cuidó de obtener, en Alemania, el traspaso de tecnología de construcción de submarinos, empleando, para tanto, el proyecto del submarino IKL-209, a la época el modelo más vendido en el mundo. Fueron, así, construidos uno sumergible en los astilleros de la HDW, en Kiel, y cuatro de ellos en el Arsenal de Marina de Rio de Janeiro (AMRJ), poniendo la MB en el limitado rol de los países constructores de esos ingenios.

Sin embargo tener logrado éxito en la construcción, falta a Marina la capacidad de desarrollar proyectos de submarinos. El camino seguido por las potencias que producen submarinos nucleares fue el de, a partir del pleno dominio del proyecto de convencionales, evolucionar, por etapas, para un submarino nuclear, cuyos requisitos, en términos de tecnología y control de calidad, superan en mucho aquellos de uno convencional. Así, el camino natural para Brasil sería, de la misma forma, lo de desarrollar sucesivos prototipos, hasta que se llegase a un proyecto adecuado, para abrigar una planta nuclear. Como no se dispone del tiempo ni de los recursos necesarios para tanto, la solución delineada por la MB, en el objetivo de, con seguridad, saltar etapas, fue la de buscar sociedades estratégicas con países detentadores de tais tecnologías y que estuviesen dispuestos a transferirlas. En nuestro caso, teniendo en vista el proceso evolutivo indispensable, la sociedad tendría que ser buscada junto a países que produjesen, simultáneamente, submarinos convencionales y nucleares. Después de largo y acurado proceso de elección, Francia fue el país seleccionado.

El significado de la posesión del submarino nuclear
Desde la divulgación de las noticias referentes al petróleo existente en el pre-sal, es común que se pregunte se tais descubiertas influyeron en la reanudada de la inversión en el submarino nuclear.

Pues, releva notar que, desde el inicio, el programa jamás fue interrumpido por Marina. Mismo entre los años de 1994 a 2006, cuando se constató la insuficiencia de recursos de otras fuentes gubernamentales, la MB cuidó de mantenerlo vivo, aunque en estado casi vegetativo, con el sacrificio exclusivo del presupuesto de la Fuerza. Si hubiese sido descontinuado, el coste de la reanudada sería sencillamente impagable. La mudanza habida, a partir de 2007, fue el aporte de más recursos gubernamentales, fruto de nueva visión política de la actual administración de más alto nivel del País.

Aun así, la mencionada alteración en el “status quo” es anterior a la revelación de las descubiertas del pre-sal que, sin embargo, sólo hacen enfatizar, todavía más, su necesidad. Más de 90% de nuestro petróleo - dos millones de barriles por día - son extraídos del mar. De la misma forma, más de 95% de nuestro comercio exterior - cerca de US$ 300 mil millones, entre exportaciones e importaciones - son transportados por vía marítima. También, nuestras aguas jurisdiccionales, que acostumbramos llamar de Amazonia Azul, contiene, en la imensidão de la masa líquida y del vasto territorio sumergido, de millones de kilómetros cuadrados, riquezas biológicas y minerales, largamente amenazadas por las explotación predatoria y codicia internacional.

Como si ve, los intereses marítimos de Brasil son de tal magnitud, que exigen quedar confiados a la protección de Marina . La falta de medios de defensa, para tanta riqueza, puede acabar se constituyendo en invitación la determinadas acciones lesivas a la soberanía nacional. De ahí, la necesidad de una Fuerza Naval capaz de desencorajá-las.

En el caso del submarino nuclear, es evidente que su acción específica no deberá ser la de permanecer como “centinela” alrededor de los campos, como eventualmente se especula. En verdad, el relevante no es ni lo que él va a hacer, pero lo que puede hacer. Y puede tanto, que su simple existencia es suficiente para producir buena parte de los efectos deseados con su posesión. Como dicho, nuestra Zona Económica Exclusiva cubre cerca de 4,4 millones de kilómetros cuadrados. Es para estar, la tiempo y la hora, regalo en cualquier punto de esa vastidão oceánica, que se necesita de un submarino nuclear. Todavía más, los intereses de Brasil, en el mar, no terminan en los límites de la Amazonia Azul. Ellos se extienden a cualquier lugar donde un barco navegue bajo nuestra bandera, cuya protección es deber inalienable del Estado Brasileño.

Esa, la importancia estratégica de la construcción del submarino nuclear.

II. EL SALTO TECNOLÓGICO
Uno de los aspectos más notables del programa de construcción del submarino de propulsión nuclear dice respeto al salto tecnológico a ser vivido por el País, en función del traspaso de tecnología, que garantizará a Brasil la capacidad de desarrollar y construir sus propios proyectos en el futuro.

Para facilidad de entendimiento, el proyecto, en líneas generales, seguirá el siguiente esquema básico:

1) Traspaso de Tecnología de Proyecto de Submarinos

a) Al entrar en eficacia el contrato, serán enviados, para Francia, algunos proyectistas navales brasileños que, juntamente con los franceses, a lo largo de un año, introducirán ajustes en el proyecto del submarino convencional brasileño (S-BR) (versión nacional del modelo “Scorpène” francés), para que este venga a atender determinados requisitos operacionales de la MB, relativamente mayor autonomía y el mayores intervalos entre los períodos de manutención. Eso volverá sus características más compatibles con las vastidões del Atlántico Sur;

b) A partir de seis meses después de la fecha de eficacia del contrato, serán enviados a Francia otros ingenieros navales brasileños, que harán cursos de 18 meses de proyecto, culminando con un trabajo constituido de un proyecto real de submarino convencional, después de retornen a Brasil;

c) Un pequeño grupo de ingenieros hará prácticas de tres años en la Empresa “Thales”, fabricante del sistema de combate del submarino (sónares, dirección de tiro, etc ), donde recibirán toda la tecnología necesaria al desarrollo y manutención del sistema;

d) De la misma forma, tendremos ingenieros que permanecerán dos años en la fábrica de torpedos, para absorción de tecnología de proyecto; y

e) Después del retorno del segundo grupo (apartado b), ingenieros y técnicos franceses permanecerán en Brasil por cinco años, participando del desarrollo del proyecto del primer submarino nuclear brasileño. Observación: la parte referente al reactor nuclear y su compartimiento será de responsabilidad de Brasil.
2) Traspaso de Tecnología de Construcción de Submarinos

a) El submarino es construido en 4 secciones. La primera sección del primer submarino será construida en el astillero de Cherbourg, en Francia, con la participación del equipo de construcción de submarinos del AMRJ, que absorberá los métodos, normas y procesos franceses de construcción, algo diferente del sistema alemán, la que ya están acostumbrados;

b) De vuelta a Brasil, ese grupo constituirá el núcleo de traspaso de tecnología para la Sociedad de Propósito Específico (SPE), que será constituida para operar el nuevo astillero para la fabricación de los nuevos submarinos; y

c) Después de esa fase, el grupo actuará, por la MB, como fiscales de las obras y garantizadores del control de calidad.
3) Traspaso de Tecnología Mediante la Nacionalización

a) Cerca de 20 por ciento de todo el material a ser empleado en los submarinos serán producidos en Brasil, inclusive sistemas complejos. Son cerca de 36.000 ítems sean fabricados aquí;

b) En el curso de las negociaciones, quedó acertado que todo lo que pudiese ser producido en Brasil, a coste equivalente o inferior al de Francia, sería fabricado aquí. Caso el producto ya fuese comercializado, sería sencillamente adquirido e incorporado al conjunto de materiales. Caso contrario, la tecnología de producción sería transferida a la empresa seleccionada, que, entonces, el fabricaría; y

c) En ese proceso, desde el inicio, la MB adoptó la postura de no indicar cualquier empresa. Cabría a los franceses seleccionarlas, de acuerdo con criterios propios, calificarlas y homologá-las. La MB no privilegiaría o rechazaría cualquier empresa, evitando interminables controversias futuras. De otra forma, cabría abrir una licitación pública, para el proceso selectivo que, por lo menos, tardaría demasiado, dada la cantidad de recursos y embargos legalmente posibles de ser interpuestos por empresas descalificadas o perdedoras.

El resultado fue tan bueno que, de un universo inicial de más de doscientas empresas, Francia ya seleccionó y está negociando con más de treinta, y hay otras decenas de candidatas.

En líneas bastante generales, ese será el proceso de traspaso de tecnología. Sin embargo, lo que va aquí descrito en pocas líneas, ocupa más de 300 páginas de un anexo específico del contrato firmado entre las partes.

III. EL DESARROLLO DE UNA INDUSTRIA NACIONAL DE DEFENSA
En todos los países desarrollados, existe una industria de defensa, responsable por el desarrollo y construcción del material bélico, atendiendo a los requisitos establecidos por los Ministerios de la Defensa y Estados-Mayores de las respectivas Fuerzas Armadas. Las propias Fuerzas desarrollan, en algunos casos, prototipos de aquello que desean, pero la producción cabe siempre a la industria.

Países que no poseen tal parque industrial específico, veem-se en la contingencia de importar material fabricado por otros, según especificaciones que podrán atender en el todo o en parte sus necesidades y, en lugar del coste, pagarán el precio, muchas veces, político, del producto.

Brasil vive una situación intermediaria, según la cuál adquiere medios usados, en compras de oportunidad, o construye medios nuevos, mediante adquisición del derecho de uso del proyecto, como aconteció en el Arsenal de Marina en Rio de Janeiro (AMRJ), en el caso de las Fragatas Clase Niterói (modelo Vosper MK-10, británico) y de Los Submarinos Clase Tupí y Tikuna (modelo IKL-209, alemán).

En el caso de los nuevos submarinos, inclusive nucleares, en lugar de la construcción darse en el AMRJ, ocurrirá en un nuevo astillero dedicado, atendiendo a todos los requisitos ambientales y de control de calidad para la construcción de uno submarino nuclear, como es práctica entre los pocos países que los fabrican. La operación de ese astillero quedará a cargo de una Sociedad de Propósito Específico (SPE), formada por el Consorcio Constructor, esto es, las Empresas “Direction des Constructions Navales Services” (DCNS) y ODEBRECHT (compañera seleccionada por la DCNS) y el Gobierno Federal, representado por Marina, que poseerá una acción, en el valor simbólico de 1% que, sin embargo, constituirá una “Golden Share”, le confiriendo el poder de veto sobre eventuales decisiones con las cuales no esté de acuerdo. Quedan, entonces, creadas las condiciones necesarias para el desarrollo de una industria nacional de defensa, particularmente con el elevado y creciente índice de nacionalización pretendido.

IV. CONCLUSIÓN
No hay duda de que, como País, Brasil está en umbral de una nueva era.
Durante la Guerra Fría, con su característica bipolaridad, la importancia estratégica de un país periférico estaba directamente asociada a las posibles consequências de su adhesión al otro bloque, lo que sólo tendría real significado en función de su localización geográfica en áreas estratégicas o de la disponibilidad de determinadas materias primas. No era el caso de Brasil que, durante la segunda mitad del siglo XX, se encontraba fuera del eje estratégico del mundo. En la década que se siguió a la bipolaridad, hubo un periodo de transformaciones, indefiniciones, globalización, que poco alteraron nuestra situación.
Sin embargo, en este inicio de siglo XXI, inaugurado con la delantera a las torres del World Trade Center y con la presente crisis financiera internacional, cuyos desdoblamientos todavía no están suficientemente claros, parece haber un cambio en el eje estratégico del mundo, de modo a envolver más profundamente Brasil. Aunque, al final de esa crisis, reste sólo una superpotencia militar, Estados Unidos de América (EE UU) como de resto, parece cierto, en otras dimensiones deberá haber alguna redistribución de poder, particularmente en el área financiera, con la entrada en cena de actores que ganaron peso y habían pasado a influenciar la economía, las finanzas y lo comercio mundiales, como Brasil, Rusia, India, China (conocidos como BRIC) y Corea del Sur, por ejemplo. Con eso, Brasil adquiere mayor importancia, se desplazando de la periferia para más cercano del centro.

Hay otros factores, relacionados a la escasez de determinadas materias primas y productos, que parecen acentuar todavía más esa fuerza gravitacional que nos arrastra para el centro, puesto que, en ancha medida, las soluciones envuelven significativamente Brasil.
La primera de ellas es el agua dulce, que viene se volviendo uno de los bienes más escasos del mundo, con reflejos en la producción de alimentos y ensejando conflictos entre naciones. En determinadas áreas, como el Oriente Medio y áfrica, ya es motivo de contiendas. A todo esto, Brasil concentra, en ríos, alrededor de 12% del agua dulce del mundo (sin contar sábanas freáticos), además de abrigar el mayor río en extensión y volumen del planeta, Amazonas.

Directamente ligago al problema del agua, hay la cuestión de la escasez de alimentos. Pues, más de 90% del territorio brasileño recibe lluvias abundantes, durante el año, y las condiciones climáticas y geológicas propician la formación de una extensa y densa red de ríos, lo que, asociado a la abundancia del sol tropical, contribuye para una agricultura de producción en gran escala, realmente capaz de volver Brasil uno de los grandes realizadores mundiales.
Otra crisis que ya se hace aguda es la energética. A despecho de la momentánea caída del precio del petróleo, su escasez, pronto, deberá restablecer el cuadro anterior al actual. Durante el siglo XX, fuimos importadores, con graves consequências en nuestra balanza de pagos y de la economía nacional. Hoy, además de vivamos relativa autosuficiencia, creamos una nueva realidad en el cómputo de las reservas mundiales, con el descubrimiento del aceite existente en el pre-sal.

Todavía en el contexto energético, de unos años para aquí, la energía nuclear pasó a ser considerada “una forma de energía limpia”, por no contribuir a el efecto invernadero. Y Brasil posee considerables reservas de uranio y domina su proceso de enriquecimiento.
Como si no bastase, somos detentadores de tecnología punta, tenemos suelo, clima y sol en abundancia, para la producción de biocombustibles.
Por último, pero no por último, tenemos la Amazonia, permanentemente en foco, quiere por su biodiversidad, quiere por su influencia sobre el clima mundial y, sobre la que, la soberanía brasileña no acepta objeciones y que representa un enorme compromiso nacional en preservarla, cohibiendo cualquier devastación.
Como si observa, Brasil periférico de la segunda mitad del siglo XX no existe más. Brasil del siglo XXI ocupa una posición más cercana de los polos estratégicos del mundo, lo que significa que, cada vez más, independientemente de sus ganas, verse-a la, con alguna frequência, envuelto por turbulencias mundiales.

Delante de eso, será indispensable disponer de medios suficientes, capaces de volver la vía diplomática más atractivo, para la solución de controversias, del que lo camino de la presión inaceptable, de la amenaza o de la imposición.
En ese particular, la posesión de submarinos nucleares es sólo un primer paso. El dimensionamiento de las Fuerzas Armadas no podrá quedar en descompasso con la grandeza y lo significado económico del País en el concierto de las naciones, so pena de privemos las generaciones futuras de un porvenir a la altura de la Historia de la Nación.
En resumen, ese análisis presenta, en la visión de Marina, la importancia de la construcción del submarino de propulsión nuclear brasileño.

Almirante-de-Escuadra Julio Soares de Moura Nieto
Comandante de Marina de Brasil

Obs.: Texto traduzido
 

Buitreaux

Forista Sancionado o Expulsado
Es casi un calco de las necesidades de Argentina. No trabajar juntos en estos proyectos, es una verdadera lastima.

Es la hora, Es la hora....
Es la hora... de ponerse los pantalones largos!
 
Es casi un calco de las necesidades de Argentina. No trabajar juntos en estos proyectos, es una verdadera lastima.

Es la hora, Es la hora....
Es la hora... de ponerse los pantalones largos!

Estimado, comparto con Usted que Argentina deberia asociarse con Brasil a su Proyecto de SSN pero todavia estamos muchos millones de U$D atrazados en terminos de inversión. No hablo en terminos de años ya que con un presupuesto miserable se esta haciendo muy mucho. En cuanto al reactor Argentino CAREM diria que estamos mas avanzados que Brazil ya que va a estar funcionando en 2012/3. Tengamos en cuenta que el concepto CAREM nacio de las necesidades de la ARA para ulitizarlo sobre el casco del TR-1700 (este tema esta mas que desarrollado en el foro)

La visión estrategica de Brasil sobre la ZEE es muy parecida a la nuestra. En una nota de Gustavo Sibilla en el diario La Nación y en la nota de Deyseg que le hacen a la Ministra contemplan que la proyección de Fuerzas en el mar va a ser a traves de Submarinos. Esto lo vamos a ver cuando se termine de definir el Ciclo de Planeamiento de la Defensa por parte del Min Def.

Esperar la ver...
 

Derruido

Colaborador
Es casi un calco de las necesidades de Argentina. No trabajar juntos en estos proyectos, es una verdadera lastima.

Es la hora, Es la hora....
Es la hora... de ponerse los pantalones largos!

Yo creía que iba a decir ésto::icon_bs:



Es la hora, Es la hora....
Es la hora... de llorar.:(

Bien por Brasil, se pusieron una meta, no importa el tiempo que tarden ni los recursos que el proyecto consuma. El objetivo es dominar la construcción de los Subs Nucleares. Ni tampoco les intersa el que dirán.

Tanto nos cuesta a los Argentos imitar al Brasil en cuanto a emprendimientos tecnológicos y a Chile, en cuanto al trazado de planes y su posterior cumplimiento.:icon_bs:



Salute
Derru
 
Arriba