Carta abierta a la Ministro de Defensa de la Nación

HAWKEYE

Colaborador
Colaborador
Las Heras Santa Cruz, 11 de Julio de 2010

A la Señora Ministro de Defensa de La Nación

Doña Nilda Garré y Asesores

Su despacho

De mi mayor consideración:

Me dirijo respetuosamente a ustedes, en mi carácter de ciudadana de la localidad de Las Heras, provincia de Santa Cruz, pequeña empresaria y madre de una niña liceísta del Liceo Militar General Roca, sito en la localidad de Comodoro Rivadavia, provincia del Chubut.

La presente misiva dirigida a usted en su carácter de Ministro de Defensa y a su equipo de asesores, es a los efectos de poder entablar un diálogo imaginario donde podamos suponer que usted respetuosamente atiende mi punto de vista y expresiones.

El tema sobre el que le estoy proponiendo el dialogo es la resolución 228/10, posterior 516/10 y las modificaciones a los planes de estudio, formación militar y religiosa impulsan desde la cartera a su cargo, de un modelos educativo que ni usted ni sus asesores han podido demostrar lo contrario a un modelo de excelencia educativa.

Podría dirigirme a usted en carácter de contribuyente, una de los miles de este país que generan sus ingresos, y el de sus asesores, tendría que recordarle su carácter de empleada pública, con un cargo político, temporal, cuya obligación primaria e indelegable es estar al servicio de los ciudadanos. Todos, sin excepciones ideológicas, credos, razas, condición, esto detallado en la Declaración Mundial sobre los Derechos Humanos y a los que la República Argentina ha adherido en todos sus términos, seguramente de su conocimiento.

Pero elijo dirigirme a usted como una funcionaria que esta obligada a escuchar a los ciudadanos contribuyentes a los que afectan sus decisiones.

También elijo dirigirme a usted como madre, en eso somos iguales, porque estoy segura que usted a procurado para sus hijos la mejor educación que usted creería adecuada, y seguramente se fastidiaría si un decreto ministerial pretendiese modificar la educación, por usted elegida, para sus hijos sin una consulta previa.

Cuando hablamos de dialogo debemos entender usted y yo que respetamos el punto de vista de la otra, que estamos abiertas a escucharnos y debatir respetuosamente para lograr un consenso. Ninguna acción de un funcionario de la democracia como lo son usted y los asesores a su disposición deberían olvidar la imprescindible condición del consenso y la permanente ratificación del acto democrático de gobernar para las minorías.

Un dialogo implica sinceridad, y es mi obligación comunicarle que usted en su condición de Ministro de Defensa como funcionaria no es respetada por sus subordinados, entiéndase los miembros de las fuerzas armadas bajo su orden. Es temida, como toda aquella persona de la que presuponemos goza de la impunidad que su cargo de superioridad le otorga sobre otras personas.

También permítame, respetuosamente, decirle que cuando usted y su equipo de asesores respaldo la polémica resolución 228/10, cuya autora es la doctora Sabina Frederick, lo hizo de manera inconsulta, autoritaria, amañada, desinteresada por las consecuencias que tendría en la vida nuestra y en la de nuestros hijos.

Ahora vengo a decirle que asuma las consecuencias de sus actos.

Una funcionaria que no es respetada y es temida por la presunción de impunidad de la que goza se priva de algo invalorable, que es escuchar la sana opinión de todos. Los que opinan a favor y los que opinan en contra.

Generalmente, un funcionario de su jerarquía, esta más expuesta a las adulaciones que a las sinceras palabras, que desde el dicenso seguramente ampliarían su horizonte de opinión.

Quería informarle que en carácter de directa perjudicada por la puesta en vigencia de la resolución 228/10 y posteriores, también ha afectado a la menor a mi cargo, ya que ella como miles de liceístas en todo el país han sido puestos en situación de angustia y perplejidad, de la que la hago absoluta responsable junto a su equipo de asesores.

Estuve presente en la reunión de la Comisión de Defensa de la Cámara de Diputados de La Nación, llevada a cabo en el mes de abril pasado, donde me explayé al respecto sobre mi situación de gente común que pedía explicaciones.

Estas explicaciones no pueden ser pedidas a usted, por la mayoría de los padres de liceístas, porque muchos de ellos están como miembros activos de la fuerzas armadas, y aunque prefiero abstenerme de opinar de cuestiones que no conozco ya que no soy militar ni hija de militares, hay un viejo entripado que fundamenta mi teoría de la falta de respeto y el temor por parte de este personal a su cargo.

Aparentemente, por le que he escuchado y leído, se la vincula a su persona, actos e ideologías a un grupo de guerrilleros urbanos llamados “Montoneros”, que operaron durante la década del setenta, en el gobierno democrático y popular del General Perón. Estas guerrillas asesinaron niños, militares y mayormente civiles, secuestraron, torturaron, cuyos delitos, todos aberrantes, estarían abstenidos del alcance de la justicia, porque no han sido declarados de “lesa humanidad”.

Estos comentarios le estaría mostrando a los jóvenes de nuestro país que un niño asesinado por un “Montonero” es distinto ante la ley que un niño asesinado por la “Dictadura”.

Doy por descontado que en su carácter de Ministro de Defensa no cometerá la bajeza de ideologizar sus actos a expensas del futuro de nuestros hijos, liceístas de todo el país.

Sus asesores han invocado genuino interés en el bienestar de nuestros hijos al generar esas resoluciones ministeriales que pretenden modificar la formación liceístas.

Ahora, y esta es la pregunta que no puedo responderme, ¿Porqué la cartera a su cargo, y sus asesores, entre ellos la doctora Sabina Frederick y sus asesores, todos empleados públicos al servicio de los ciudadanos, no sé preocupan por el decadente estado de la educación pública en nuestro país? Yo puedo hablarle únicamente de lo que conozco, que es la educación pública en la provincia de Santa Cruz. Los maestros santacruceños hoy están aquejados por varias circunstancias de los cuales le pido se interiorice en interacción con el Ministerio de Educación de la Nación, a los fines de poder volcar tamaña sabiduría que la acompaña a usted y asesores a favor de la mayoría de los alumnos de este país que concurren a escuelas públicas.

¿Por qué no manda a la doctora Frederic, empleada pública, funcionaria, al servicio de los ciudadanos, a que se reúna con los docentes de mi localidad? Estoy segura que encontrará mucho más que hacer con los gravísimos problemas que hoy tiene la educación pública en mi provincia y supongo que en todo el país, que en la formación académica y militar de los liceos, cuya efectividad educativa esta fuera de discusión para los padres que podemos mandar a nuestros hijos a esas instituciones, haciendo un gran sacrificio, también quería informarle que la educación “elitista”, con la que pretenden confundir a la opinión pública, se imparte en los Liceos Militares, es un mito. Infórmese debidamente al respecto.

Señora Ministro, cada vez que yo escucho que estas son modificaciones basadas en ideologías setentistas, que como único fin buscan castigar a los militares a través de los niños, me llena de espanto.

Estoy segura que usted, sus asesores, los asesores de sus asesores y el Gobierno que usted representa, democrático y popular, es incapaz de tamaña bajeza.

No le quito más su tiempo, solicito también que esta sea remitida a la doctora Sabina Frederick, ya que descuento el respeto por la opinión de las minorías que el Gobierno por usted representado argumentan permanentemente.

Sin otro particular, saludo a Usted atte.

Susana Cristina Barrera
Ciudadana de Las Heras-Santa Cruz



Fuerte:
http://www.opisantacruz.com.ar/home...ta-a-la-ministro-de-defensa-de-la-nacion/9545
 
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