Como parte de la consolidación del Programa Espacial Brasileño e ingreso del país al mercado mundial de lanzamiento de cargas al espacio, la Fuerza Aérea Brasileña (FAB) y la empresa surcoreana Innospace avanzan en las etapas finales de preparación para el lanzamiento del cohete orbital HANBIT-Nano. La misión, prevista para el 22 de noviembre desde el Centro de Lanzamiento de Alcântara (CLA), en Maranhão (Brasil), forma parte de la Operación Spaceward, y representa el primer lanzamiento comercial realizado desde territorio brasileño.
La integración de las cargas útiles comenzó el pasado 10 de noviembre, marcando una de las fases más críticas antes del lanzamiento. Durante esta etapa se llevaron a cabo diferentes pruebas con el objetivo de asegurar la compatibilidad eléctrica, mecánica y funcional entre los satélites y el vector. El objetivo fue garantizar que todos los equipos se encuentren correctamente enlazados con el sistema del cohete propulsor, manteniendo los más altos estándares de seguridad y confiabilidad. Según explicó el coronel ingeniero Rogério Moreira Cazo, coordinador general de la operación, la FAB brinda soporte técnico y supervisa el proceso desde el edificio de Preparación de Propulsores del CLA.
La misión Spaceward transportará cinco satélites y tres prototipos experimentales desarrollados por universidades, empresas y organismos espaciales de Brasil, Corea del Sur e India. Entre ellos se encuentran unidades desarrolladas por la Universidad Federal de Maranhão (UFMA), la Agencia Espacial Brasileña (AEB), la Universidad Federal de Santa Catarina (UFSC), la empresa Castro Leite Consultoria (CLC) y la startup india Grahaa Space. Los equipos cumplirán funciones científicas y tecnológicas, incluyendo la recolección de datos climáticos, validaciones de sistemas de navegación y experimentos en microgravedad.
Para la ejecución de esta operación, la FAB movilizó aproximadamente 400 efectivos (300 militares y 100 civiles) especializados en ingeniería, telemetría, logística, seguridad, comunicaciones y medicina aeroespacial. A ellos se sumaron 60 técnicos y representantes de la empresa surcoreana, en una acción conjunta que simboliza el alto nivel de cooperación internacional alcanzado en el ámbito espacial. El Centro de Lanzamiento de Alcântara, con más de cuatro décadas de experiencia y más de 500 operaciones ejecutadas, se consolida así como una de las bases más estratégicas del mundo por su cercanía a la línea del Ecuador, lo que reduce costos de lanzamiento y aumenta la eficiencia energética.
El cohete HANBIT-Nano, desarrollado por Innospace, es un vehículo orbital de dos etapas y propulsión híbrida, capaz de colocar hasta 90 kilogramos de carga útil en órbita a 500 kilómetros de altura. Con 21,8 metros de longitud y 1,4 metro de diámetro, pertenece a una nueva generación de lanzadores de pequeño porte, diseñados para misiones más ágiles, económicas y ecológicas. Su motor híbrido, con empuje de 25 toneladas, combina combustible sólido parafínico y oxidante líquido, garantizando bajo costo operativo, simplicidad estructural y seguridad.
La empresa Innospace, con sede en Corea del Sur, se especializa en el diseño y fabricación de vehículos de lanzamiento orbital y suborbital, motores híbridos y componentes aeroespaciales. Reconocida como la segunda compañía a nivel mundial en tecnología de propulsión híbrida, busca ofrecer servicios de lanzamiento accesibles, confiables y sostenibles para el creciente mercado de pequeños satélites. En octubre, la firma recibió de la Agencia Aeroespacial de Corea (KASA) la primera autorización comercial de lanzamiento otorgada a una empresa privada surcoreana, un hito que confirma el cumplimiento de los más rigurosos estándares técnicos, ambientales y de seguridad.
La cooperación entre la FAB y Innospace comenzó a consolidarse tras el exitoso vuelo experimental del cohete HANBIT-TLV en marzo de 2023, durante la Operación Astrolábio. Aquella prueba validó el desempeño del motor híbrido y estableció las bases tecnológicas para el desarrollo del HANBIT-Nano, además de otros modelos más potentes como el HANBIT-Micro y el HANBIT-Mini, actualmente en desarrollo. A su vez, la Operación Falcão I, ejecutada en marzo de 2025 por la FAB, reforzó la capacitación de sus operadores mediante el lanzamiento de un cohete de entrenamiento, sentando las bases operativas para las misiones comerciales que ahora se concretan.
El proceso de integración y calificación del HANBIT-Nano abarcó nueve hitos técnicos entre 2024 y 2025, incluyendo pruebas de separación de etapas y ensayos de motores. Cada fase demostró la madurez y confiabilidad del sistema, resultado de un trabajo conjunto entre 247 profesionales, de los cuales más de un centenar participaron en investigación y desarrollo. Tras recibir la doble autorización de lanzamiento de KASA y la Agencia Espacial Brasileña, el programa alcanzó su fase culminante, con Brasil posicionado como nuevo actor en el mercado global de servicios de lanzamiento orbital.
El próximo vuelo del HANBIT-Nano no solo marcará el primer lanzamiento comercial desde Alcântara, sino también el ingreso formal de Brasil al selecto grupo de países capaces de ofrecer servicios de transporte espacial. Para la Fuerza Aérea Brasileña, el éxito de la misión consolidará la madurez tecnológica alcanzada por el Centro de Lanzamiento y su capacidad para atraer inversiones, impulsar la innovación y fomentar el desarrollo científico e industrial del país.
*Créditos de las imágenes: Fuerza Aérea Brasileña.-
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