Las Fuerzas Armadas de España han dado inicio al ejercicio JFX/MDO-25, principal entrenamiento estratégico-operacional del Estado Mayor de la Defensa (EMAD), orientado a validar la capacidad nacional para planear y conducir operaciones conjuntas y multidominio. La actividad se desarrolla entre el 10 y el 28 de noviembre de 2025, con participación de todos los mandos componentes y una fase final en el Campo de Maniobras del Retín ubicado en la ciudad de Cadiz.
El JFX-25 (Joint Force Exercise / Multi-Domain Operations) se desarrolla en un momento de transformación profunda del entorno de seguridad europeo. La guerra en Ucrania, el rearme de la OTAN y el auge de amenazas multidominio obligan a los países aliados a revisar sus doctrinas operativas.
En esta línea, España como miembro activo de la OTAN y la UE, debe demostrar que su estructura de defensa puede operar de forma conjunta, flexible y adaptada a los nuevos desafíos. El JFX/MDO-25 no es solo un ejercicio: es una validación institucional de la capacidad nacional para responder a crisis complejas.
El JFX/MDO se realiza cada tres años para evaluar el funcionamiento real de la estructura operativa conjunta. A diferencia de maniobras tácticas o ejercicios de unidades específicas, el JFX pone a prueba el nivel estratégico del sistema. Desde su primera edición, el JFX ha evolucionado para incorporar nuevos dominios y capacidades. Por ejemplo, en 2019 se centró en la interoperabilidad OTAN y defensa colectiva. Y para 2022, se introdujeron simulaciones de crisis híbridas, ataques a infraestructuras críticas y escenarios de disuasión.
Ahora bien, la edición actual pone el foco en la integración multidominio, la experimentación tecnológica y la validación del mando conjunto en tiempo real. Además, se desarrolla en dos fases complementarias: la primera “Puesto de Mando”, activa los Cuarteles Generales de los mandos componentes, el Centro de Inteligencia de las Fuerzas Armadas (CIFAS) y el Puesto de Mando del JEMAD, simulando una operación conjunta en un entorno hostil.
La segunda “Fase de Vida Real” se ejecuta en el Retín con unidades reales, incluyendo ataques a tierra, transmisión de vídeo en tiempo real, evaluación de daños y despliegue de capacidades espaciales. Se integran tecnologías como burbujas 5G solapadas, sensores ISR y sistemas de mando y control interoperables.
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