Dentro de las actividades de la Feria Aeronáutica (F-AIR), celebrada durante el pasado mes de julio en Colombia, Zona Militar tuvo la posibilidad de entrevistar al coronel piloto Rubén Guillermo Mejía del Carmen, director de Asuntos Internacionales de la Fuerza Aérea Dominicana, para que nos diera a conocer de primera mano el TP-75 Dulus, avión que se viene construyendo en ese país y que se ha convertido en parte importante de dicha Fuerza Aérea en misiones de entrenamiento y vigilancia.
Del mismo modo, esta revista pudo entrevistar al capitán piloto José Antonio González Díaz, quien brindó detalles sobre la travesía desde la isla al continente a través del mar Caribe.
El P-75 Dulus es un avión de entrenamiento, vigilancia y reconocimiento de la compañía italiana Flying Legend, que se dedica a la fabricación de réplicas de aviones, destacándose el trabajo realizado junto a Embraer en el EMB 312 Tucano. En el caso de la Fuerza Aérea Dominicana, se trata de la réplica 915S, equipada con un motor turbo-cargado Rotax 915, que alcanza una velocidad máxima de 287 km/h y una autonomía de 1.166 km.
ZM: ¿Qué presenta en esta Feria F-Air 2025 la FARD y cuáles son sus objetivos con esta visita?
“Traemos a la aeronave P-75 Dulus. Es una aeronave que estamos ensamblando en nuestro país, en colaboración con la empresa Flying Legend de Italia. Es una aeronave multipropósito; básicamente sirve para patrullaje y entrenamiento. Tiene dos asientos en tándem, un motor Rotax Turbo y una serie de prestaciones que la hacen una aeronave deseable para cualquier Fuerza Aérea de América. Cuenta con piloto automático, paracaídas incorporado, tren retráctil, estructura metálica y aviónica Dynon de última generación.”
ZM: ¿Cuántos aviones tiene actualmente la Fuerza Aérea Dominicana de este modelo?
“Actualmente hemos ensamblado cinco. Este que está aquí en exhibición en la feria de Colombia ya ha ido a FIDAE en Chile, ha estado en FAMEX en México y ahora lo trajimos a exhibición a F-Air.”
ZM: ¿Qué capacidades específicas tiene el avión P-75 Dulus en cuanto a entrenamiento y posibilidad de ataque?
“Básicamente, como lo dije anteriormente, es acrobático y se presta para el entrenamiento básico de combate de un piloto que se perfila para un escuadrón de operaciones. La aeronave, por el momento, no dispone de armamento, ya que fue concebida inicialmente para entrenamiento y patrulla. Tiene una autonomía de alrededor de seis horas con los tanques subalares, lo cual le da una capacidad incomparable respecto a aeronaves de su tipo.”
ZM: La Fuerza Aérea Dominicana cuenta con A-29B Super Tucanos de la empresa brasileña Embraer. ¿Me puede informar algo acerca de esta capacidad en su fuerza?
“La capacidad data de 2009, pero es una aeronave que vino a responder a una necesidad importante que tenemos en la protección de nuestro espacio aéreo y actualmente ha hecho un servicio fabuloso para nuestra nación.”
La travesía desde República Dominicana hasta Rionegro fue también un hito en la aviación de ese país, por lo que Zona Militar quiso saber más de esta experiencia en palabras del capitán piloto José Antonio González Díaz.
ZM: ¿Puede informar a nuestros lectores cómo fue la travesía para asistir a esta feria?
“Realmente me siento emocionado porque para nosotros es una realidad. Esta aeronave ha atravesado océanos, como podemos comprobarlo, y para nosotros como pilotos de combate ha sido una experiencia incomparable. La aeronave respondió perfectamente en el vuelo cruzando el Mar Caribe, sin presentar ninguna incidencia o anormalidad. Todos los parámetros fueron normales y su procedimiento de aproximación excelente. Los sistemas respondieron —el sistema de combustible y el motor— de forma fenomenal, lo que nos hace sentir y garantizar como pilotos que esta aeronave responde a nuestras necesidades. El vuelo tuvo una duración de 5 horas 20 minutos. Aterrizamos inicialmente en Barranquilla, donde repostamos, y posteriormente viajamos hacia Rionegro.”
ZM: ¿Qué consejo le puede dar a otros pilotos sobre este avión?
“La verdad, yo le digo a las demás Fuerzas Aéreas y en especial a la Fuerza Aérea Colombiana que invertir en este tipo de aeronave es un privilegio, ya que les permitirá a sus pilotos experimentar aviónica de última generación a un costo operacional menor. Esta aeronave tiene un costo de operación de 70 dólares por hora y puede usar combustible Avgas de 95 octanos, así como de 100LL.”
En un país como Colombia, donde un presidente lanza mensajes optimistas pero irrealizables, conocer de cerca este proyecto demostró las graves incapacidades de mando de nuestras Fuerzas Militares. En este caso, una nación con solo el 10 % del presupuesto de Colombia triunfa y muestra al mundo sus avances: construye sus propios aviones y demuestra que, cuando se quiere, se puede, y que cuando no hay intereses particulares en la contratación se logran grandes adelantos. En Colombia, queda para el olvido la negativa de los mandos al proyecto Gavilan y el fracaso de los entrenadores Calima, siendo estos dos de los casos más graves de desidia de los generales de la FAC.
Tal vez te interesa Los F-16 de la Fuerza Aérea de EE.UU. dicen presente en Colombia para participar en una nueva edición del Ejercicio Relámpago de los Andes
