A poco más de una semana de confirmarse que la Armada de China ha desplegado a sus portaaviones Liaoning y Shandong en el Pacífico, adentrándose aún mas allá de la Primera Cadena de Islas delineada por EE.UU. como parte de su estrategia de contención, las Fuerzas de Autodefensa de Japón (JSDF) continúan monitoreando y vigilando de cerca el despliegue de dicha fuerza. Alertados por el paso de los buques chinos por aguas cercanas a sus costas, los elementos japoneses confirmaron la presencia de buques chinos desde el día 8 de junio, a los cuáles aún siguen mientras se dirigen de regreso a sus respectivos puertos.

Cabe recordar en este punto, que ya en reportes previos elaborados por la JSDF se dió a conocer que China desplegó a sus portaaviones junto a una importante escolta que conforman sus Grupos de Ataque. En el caso del Liaoning, la fuerza indicó que fue visto acompañado por el crucero CNS Wuxi (104), el destructor CNS Tangshen (122) y el petrolero de flota CNS Hulunhu (901). Mientras que en el caso del portaaviones Shandong, se denotó la presencia del destructor Tipo 055 Zunyi, las fragatas Tipo 054A Yuncheng y Hengshui, complementados por un buque de reabastecimiento Tipo 905.
Ambos portaaviones cuentan además con sus alas embarcadas compuestas principalmente por los cazas J-15, mismos que han sido vistos en un amplio número de despegues que también han sido monitoreados de cerca por Japón, dando cuenta de la escala del despliegue chino. Justamente en el marco de estas misiones, los J-15 del Gigante Asiático y una aeronave P-3C Orión de la JSDF, protagonizaron dos incidentes en los que los primeros realizaron maniobras de intercepción peligrosas sobre el segundo mientras realizaba su seguimiento.

Particularmente, dichos incidentes tuvieron lugar durante los días 7 y 8 del mes en curso según los reportes oficiales de Tokio, lo que indica que se produjeron en las etapas iniciales del despliegue de los portaaviones chinos. En detalle, el primer incidente fue descrito por la JSDF como un seguimiento de 40 minutos en el que los J-15 se mantuvieron a una distancia de tan sólo 50 metros de la aeronave de vigilancia P-3C Orión, derivando en un latente riesgo de colisión entre ambos. Al día siguiente, fue realizada una maniobra de intercepción similar, con la diferencia de que en este caso el seguimiento duró 80 minutos e incluyó un cruce del caza chino frente al avión japonés a unos 900 metros de su trompa, aumentando aún mas los riesgos de la situación.
Finalmente, haciendo alusión a lo mencionado en las primeras líneas sobre la importancia del despliegue chino, cabe recordar que esta es la primera ocasión en la que la Armada del Ejército Popular de Liberación envía a dos de sus tres portaaviones mas allá de la Primera Cadena de Islas. Se trata de un desafiante mensaje respecto de las crecientes capacidades navales chinas que parece estar dirigido hacia los EE.UU., país que definió dicha línea simbólica desde el extremo sur del territorio japonés hasta las aguas que separan a Malasia de Vietnam; existiendo a su vez una Segunda Cadena que tiene sus puntos extremos en Japón y Nueva Guinea.
*Imágenes empleadas a modo ilustrativo
Te puede interesar: La Armada de China estaría finalizando los preparativos para la incorporación al servicio operativo del nuevo portaaviones Fujian a finales de 2025






