Chile acaba de marcar un antes y un después en su desarrollo científico y tecnológico. Este lunes 22 de diciembre, el Presidente de la República encabezó la inauguración del Centro Espacial Nacional (CEN), una infraestructura inédita en el país que consolida, por primera vez, capacidades integradas para el desarrollo de tecnología espacial desde territorio nacional.

Ubicado en la base aérea de la Fuerza Aérea de Chile (FACH), en la comuna de Cerrillos, el recinto —de 5.800 metros cuadrados— no solo representa una nueva obra pública, sino una señal política y estratégica de largo plazo: Chile decidió entrar de lleno a la carrera espacial con autonomía, cooperación regional y visión de futuro.

Centro Espacial Nacional (CEN)

La inauguración reunió a buena parte del gabinete: Defensa, Relaciones Exteriores, Educación y Ciencia, además del alto mando de la FACH. La escena no fue casual. El CEN es resultado de un trabajo interministerial y de un modelo de colaboración que integra al sector público, las Fuerzas Armadas, la academia, el mundo científico y el sector privado.

El conocimiento de frontera que alberga este centro está llamado a generar beneficios concretos para Chile”, señaló Boric, subrayando que este tipo de iniciativas suelen rendir frutos a largo plazo, más allá de los ciclos políticos. En ese sentido, el Mandatario hizo un llamado explícito a las futuras autoridades a dar continuidad al proyecto, destacando que la inversión en ciencia, tecnología e innovación es una condición básica para que los países no queden rezagados.

De usuarios a constructores de satélites

Uno de los anuncios más relevantes fue la proyección de nueve nuevos satélites chilenos en el corto plazo: ocho de ellos serán construidos directamente en el CEN y uno en el extranjero. Actualmente, Chile cuenta con un solo satélite operativo, por lo que el salto es significativo.

Estas nuevas capacidades permitirán aplicaciones concretas en áreas estratégicas para el país: monitoreo de la pesca y el océano, detección de derrames de petróleo, apoyo en temporadas de incendios forestales, agricultura de precisión, minería, educación y gestión territorial. En términos simples, el espacio deja de ser una aspiración lejana y pasa a convertirse en una herramienta directa para el desarrollo productivo, ambiental y social.

El CEN está diseñado para cubrir todo el ciclo de la actividad espacial. Cuenta con un Centro de Control de Misión, desde donde se operarán los satélites del Sistema Nacional Satelital, un Laboratorio para el Desarrollo de Tecnología Espacial, destinado al ensamblaje, integración y testeo de satélites; un Laboratorio de Ciencia de Datos, con data centers y una supercomputadora para procesar la información obtenida desde el espacio y un Laboratorio de Investigación, Innovación, Emprendimiento y Promoción del Talento, enfocado en la formación de capital humano avanzado y la vinculación entre academia e industria.

Esta infraestructura permite acortar los tiempos de transferencia tecnológica y aumentar la autonomía del país en un ámbito tradicionalmente dominado por potencias extranjeras.

Desde el Ministerio de Ciencia, el CEN fue definido como un “hito histórico” que refuerza la soberanía tecnológica de Chile. Los proyectos científicos que se desarrollen en el centro serán evaluados y priorizados por una Comisión Científico-Técnica, asegurando impacto y excelencia.

Pero la mirada no es solo nacional. El centro nace con vocación regional. El gobierno ha enfatizado que el CEN será un espacio de encuentro para Sudamérica, promoviendo programas espaciales binacionales, misiones conjuntas y cooperación multilateral. En un contexto global marcado por tensiones geopolíticas, Chile apuesta por un enfoque basado en la paz, el desarrollo sostenible y la colaboración científica.

Por su parte, la ministra de Defensa, Adriana Delpiano, destacó que el CEN fortalece las capacidades de defensa e investigación de las Fuerzas Armadas, pero también simboliza una nueva forma de entender la seguridad nacional: ligada al conocimiento, la innovación y el desarrollo tecnológico.

En el fondo, el Centro Espacial Nacional es más que un conjunto de laboratorios y antenas. Es una apuesta estratégica por el futuro, una señal de que Chile quiere dejar de mirar el espacio como espectador y empezar a construir desde ahí soluciones para sus propios desafíos.

Como señaló Gabriel Boric, este proyecto encarna una idea simple pero poderosa: el desarrollo de Chile no se juega solo en la contingencia diaria, sino en la capacidad de pensar —y construir— el país de las próximas décadas.

Tal vez te interese Más allá de la certificación: oficiales chilenos refuerzan la proyección internacional de la Armada en el corazón del estándar naval británico

Rodolfo Neira Gachelin
Periodista bilingüe, Magíster en Comunicación y Diplomado en Seguridad y Defensa de las academias de Guerra del Ejército y de la Fuerza Aérea de Chile.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor deje su comentario
Ingrese su nombre aquí

This site uses Akismet to reduce spam. Learn how your comment data is processed.