Buscando allanar el camino para lo que podría llegar a ser la incorporación de una importante flota de nuevos cazas Gripen, la Fuerza Aérea de Ucrania ha dado a conocer que se encuentra alistando a sus primeros pilotos para llevar a cabo misiones de entrenamiento en Suecia, esto junto a los técnicos que estarán a cargo de brindarle mantenimiento a las plataformas. La noticia en cuestión fue confirmada en redes sociales por el ministro de Defensa ucraniano, Denys Shmyhal, quién agradeció a Estocolmo los esfuerzos que se están realizando para contribuir a la defensa de Kiev frente a la invasión rusa.
En el contexto del mismo comunicado, el ministro Shmyhal también indicó que tuvo una llamada telefónica con su par sueco Pål Jonson, misma en la que se discutieron detalladamente los avances concretados en el suministro de los mencionados cazas para la Fuerza Aérea de Ucrania. Agregado a ello, ambos funcionarios tuvieron la oportunidad de intercambiar información sobre los ataques rusos del pasado martes, en los que fueron lanzados cerca de 35 misiles de crucero; que según el propio Shymhal fueron en su mayoría interceptados en conjunto por los cazas F-16 donados por los aliados occidentales y los sistemas de defensa aérea desplegados en tierra.
Siguiendo esta línea, resulta de utilidad recordar que Kiev mantiene la intención de sumar hasta 150 nuevos cazas Gripen de origen sueco para reforzar esta capacidad de respuesta, la cuál a día de hoy se apoya principalmente en los ya citados F-16 y en los Mirage 2000-5 enviados desde Francia. A fines de avanzar con este proceso de compra, Ucrania ya ha logrado dar el primer paso con la firma de la Carta de Intención correspondiente durante la visita del presidente Volodymyr Zelensky a territorio sueco, concretada durante el pasado mes de octubre.
Dicha decisión estuvo precedida por una extensa serie de evaluaciones previas, en las que quedó claro que el Gripen en su variante E representaría un salto de capacidades para la Fuerza Aérea ucraniana, destacándose entre otras cosas por su compatibilidad con la gran cantidad de armamentos europeos y estadounidenses disponibles. Se trata además de una aeronave conocida por el hecho de que es capaz de operar en condiciones austeras, como así también por requerir mantenimiento mínimo, lo que representa una considerable ventaja en materia logística para su selección por parte de Ucrania.
Por otra parte, desde el fabricante Saab, ya se ha indicado con anterioridad que las plantas ya están listas para comenzar con la producción de los nuevos ejemplares para satisfacer las demandas de Ucrania y de otros clientes de la plataforma. Acorde a lo dicho en aquel entonces por el director ejecutivo de la compañía, Micael Johansson, esta contaba con los medios para fabricar entre 20 y 30 cazas al año; dejando la puerta abierta a un aumento de dicho ritmo en caso de que Kiev optara por concretar la operación. Tal y como informamos oportunamente, esto podría deberse a la posibilidad de que Saab decida emplear capacidades productivas en Brasil gracias a los acuerdos ya existentes, como así también en Canadá; país en el que se busca situar al Gripen como candidato para la Real Fuerza Aérea canadiense.
*Imágenes empleadas a modo ilustrativo
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