Como parte de los esfuerzos de modernización que buscan mantener operativa a la plataforma hacia el 2050, la Fuerza Aérea de EE.UU. ha recibido el primer bombardero B-52 equipado con el nuevo radar AESA APQ-188 para someterlo a pruebas y evaluaciones, esto en la Base Aérea Edwards situada en el estado de California. La novedad ya fue confirmada de forma oficial por la empresa estadounidense Boeing, misma que tuvo a su cargo la labor de instalar el mencionado sistema y ponerlo a disposición del Ala de Pruebas 412, cuyos pilotos son los que llevarán a cabo los testeos en el futuro cercano.
Al respecto de ello se refirió el vicepresidente de Boeing Bombers, Troy Dawson, afirmando: “El nuevo radar aumentará significativamente la efectividad de la misión del B-52 al mejorar la conciencia situacional, acelerar la localización de objetivos y mejorar la capacidad de supervivencia de la tripulación en entornos conflictivos. Esta fase del programa se centra en lograr un buen inicio para que podamos ejecutar el programa completo de modernización del radar.“
Resulta de utilidad mencionar en este punto, que el nuevo radar AESA APQ-188 ya superó una serie de pruebas iniciales en tierra, las cuáles tuvieron lugar en las instalaciones de la citada compañía en la ciudad de San Antonio, Texas. Una vez que se pueda concretar la evaluación de su desempeño en el aire, Boeing espera que los datos allí obtenidos faciliten el desarrollo posterior y abran el camino para avanzar en la modernización de un total de 76 bombarderos B-52.
Pasando revista brevemente de lo que este aspecto de la modernización implica para las aeronaves, Boeing detalla que se sumarán nuevos sensores y procesadores asociados al uso del radar AESA APQ-188, además de nuevas pantallas táctiles de 8×20 pulgadas de alta definición para reemplazar a actualmente instaladas en las estaciones de navegación y radar. Por otra parte, se indica que el B-52 ahora también contará con un sistema de refrigeración líquida de mayor eficiencia para el radar, complementado este con un sistema de calefacción que aprovecha el aire purgado por el motor para aquellas misiones que se realicen en condiciones de frío extremo.
Si ampliamos la lente sobre el proceso de modernización mas allá de los propios radares, es posible mencionar también que los B-52 también verán renovados sus sistemas de propulsión, lo que es gracias a la instalación de nuevos motores Rolls-Royce F130 en reemplazo de los actuales modelos Pratt & Whitney TF33-P-3/103 que hacen a la variante B-52H. En este caso, se trata de una parte del proceso que ha sufrido problemas y retrasos en función de los cronogramas originales, con una revisión crítica de diseño (CDR) que fue pospuesta hacia el año próximo por fallas detectadas en el diseño del sistema de entrada de aire (inlet).
Aún con dicha problemática en mente, la Fuerza Aérea estadounidense prevé poder sostener la meta de alcanzar la capacidad operativa inicial (IOC) de cara al año 2033, siendo los planes actuales poder autorizar la producción inicial durante el año 2028; para cuando se espera contar con dos aeronaves de prueba ya terminadas. Otro de los aspectos críticos a señalar, al entender de la Oficina de Responsabilidad Gubernamental (GAO), ha sido la implementación de modelos digitales en el programa para lograr una fuente de datos en tiempo real accesible a fabricantes y supervisores del desarrollo; tarea que Boeing admite como un desafío dada la antigüedad de las aeronaves.
*Imagen de portada: Boeing
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