Como parte del amplio proceso de modernización de sus capacidades de defensa, las Fuerzas Armadas de Egipto recibieron el primer lote de obuses autopropulsados K9A1 EGY Thunder de 155 mm, fabricados localmente en la denominada “Fábrica 200”, situada en las afueras de la ciudad de El Cairo. Este hito refleja el avance de la cooperación industrial y tecnológica entre Egipto y Corea del Sur, consolidando la transferencia de conocimientos y la producción nacional de sistemas de artillería de última generación, adaptados a las necesidades operativas del país norteafricano.

El K9 Thunder, desarrollado por la empresa surcoreana Hanwha Aerospace, se ha consolidado en las últimas décadas como uno de los obuses autopropulsados más avanzados y difundidos del mundo. Actualmente en servicio con las fuerzas armadas de Corea del Sur, India, Turquía, Polonia, Finlandia y Noruega, su éxito radica en la potencia de fuego, fiabilidad y capacidad de operar en múltiples entornos. Con un alcance de hasta 40 kilómetros y una cadencia de entre seis y ocho disparos por minuto, el sistema cuenta con un moderno control de fuego automatizado y cumple con los estándares de artillería de la OTAN.
El acuerdo firmado entre Egipto y Corea del Sur en 2022, valuado en 1.700 millones de dólares, prevé la adquisición de cientos de obuses autopropulsados K9 Thunder y contempla la producción local bajo licencia, junto con la entrega de vehículos amunicionadores K10 y de comando y control K11. Una de las particularidades del contrato es que gran parte de los sistemas estarán destinados a la Armada Egipcia, que los empleará en misiones de defensa costera y ataque a objetivos navales. Se trata, además, de la primera vez que Hanwha desarrolla una versión adaptada del K9 específicamente para una fuerza naval.
En el marco de esta cooperación, Hanwha Aerospace confirmó que los futuros K9A1 EGY estarán equipados con un motor de desarrollo local fabricado en Corea del Sur, fruto del trabajo conjunto con STX Engine. Este nuevo propulsor diésel de 1.000 caballos de fuerza reemplaza al tradicional MTU 881 Ka-500 de origen alemán, ofreciendo mayor rendimiento y autonomía tecnológica. Durante su proceso de validación, el motor fue sometido a exigentes pruebas en entornos desérticos y montañosos, completando más de 10.000 kilómetros de recorrido.

La incorporación del K9A1 EGY Thunder refuerza la capacidad artillera de las Fuerzas Armadas de Egipto y marca un paso decisivo hacia la independencia tecnológica en materia de defensa. Con la producción local de los nuevos obuses y la integración de tecnología surcoreana, el país consolida su posición como un actor clave en la industria militar regional, potenciando su capacidad de disuasión y proyectando a Egipto como un futuro centro de producción y mantenimiento de sistemas K9 en el norte de África y Medio Oriente.
*Imágenes empleadas en carácter ilustrativo.-
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