El presente informe “Estado de la Defensa en Argentina 2024/2025”, pretende tener una mirada asertiva sobre el estado actual, presupuesto, equipamiento y la política de defensa. La situación se considera de constante evolución, con un debate abierto sobre la necesidad de una reforma integral para dotar de más continuidad a las políticas de estado, mejorar la proyección estratégica del país y abrir el debate legislativo en la búsqueda de un consenso democrático que actualice el plexo normativo de la Seguridad Nacional.

¿Qué dice el Ministerio de Defensa?
“En el periodo 2024-2025, el estado de la defensa en Argentina se caracteriza por una modernización en curso que incluye la incorporación de nuevos aviones de combate F-16 y P-3 Orion, la modernización de blindados TAM 2C-A2 y la participación en operaciones de paz.
Paralelamente, el Ministerio de Defensa busca mejorar la calidad de vida del personal mediante programas de beneficios y aumentos salariales, aunque existen preocupaciones sobre la financiación de la obra social de las Fuerzas Armadas (IOFA)”.
Veamos entonces que estuvo y está pasando.
Aspectos claves del estado de la Defensa.
Presupuesto:
Los números planificados para el Ministerio de Defensa, y según los datos oficiales, muestran que el presupuesto no representa un crecimiento real de partidas a la propia luz de lo estimado tanto para números de inflación anual, como para variaciones en el precio del dólar. Este problema, que se viene acarreando desde gestiones de diferentes colores políticos, continúan afectando la operatividad y la posibilidad de avanzar en la capitalización del sector.
Del total del presupuesto de la jurisdicción 45, Defensa las mayores partidas corresponden a gastos en personal, (inciso 1) lo que implica que alrededor del 87% de los créditos se destina a cubrir erogaciones corrientes vinculadas con sueldos y cargas sociales, manteniendo un margen reducido para inversión y funcionamiento.
Dentro del proyecto de ley de presupuesto 2026 enviado al Congreso de la Nación, el Gobierno Nacional incluyó modificaciones sustanciales sobre el Fondo Nacional de la Defensa (FONDEF), instrumento aprobado en 2019 con un amplio consenso político y destinado a capitalizar a las Fuerzas Armadas argentinas mediante la incorporación de equipamiento, modernización de sistemas y desarrollos industriales.
Uno de los artículos del proyecto (19) establece que la totalidad de las asignaciones presupuestarias de capital y adelantos a proveedores y contratistas del Ministerio de Defensa integrarán el FONDEF. Sin embargo, se agrega una novedad que genera preocupación: se autoriza que hasta un 5% de estos fondos pueda destinarse a la adquisición de bienes de uso necesarios para el funcionamiento y soporte administrativo de la jurisdicción. En la práctica, esto abre la puerta a que partidas originalmente pensadas para inversión en capacidades militares terminen siendo utilizadas para cubrir gastos corrientes.
Al mismo tiempo, el proyecto deroga el inciso 1 del artículo 4° de la Ley N° 27.565, que fijaba la progresión de los recursos del FONDEF en base a porcentajes del presupuesto nacional: 0,35% en 2020, 0,5% en 2021, 0,65% en 2022 y 0,8% a partir de 2023 en adelante. Con esta eliminación, desaparece la garantía de financiamiento progresivo que le daba previsibilidad al instrumento y que buscaba asegurar un flujo constante de recursos para reequipamiento militar. (Ver Informe de análisis del Presupuesto 2026, Fundación Alem, noviembre 2025)
Desde su sanción, el FONDEF enfrentó críticas por la falta de una reglamentación efectiva. Ni la gestión anterior ni la actual avanzaron en establecer criterios claros de asignación y ejecución, lo que derivó en cuestionamientos sobre su verdadero impacto. En varias ocasiones, se denunció que los fondos terminaron utilizándose para “tapar baches” en el funcionamiento cotidiano del Ministerio de Defensa, desviándose de los fines para los que fue creado.
Con los cambios previstos en el proyecto de presupuesto 2026, el fondo corre el riesgo de perder definitivamente su razón de ser. Nacido como una herramienta estratégica para recuperar capacidades, modernizar sistemas de armas y apoyar a la industria para la defensa, el FONDEF se encamina ahora a convertirse en un recurso de disponibilidad discrecional para el sostenimiento de la Jurisdicción 45.
El Estado Mayor General del Ejército Argentino contará con un presupuesto total de 1.758.630 millones de pesos, de los cuales 1.489.766 millones estarán destinados a gastos en personal. Entre las metas operacionales se estipulan 13 días de adiestramiento en campaña y 18 en guarnición, además de dos ejercicios tácticos en el terreno para las Fuerzas de Operaciones Especiales.
En el caso de la Armada Argentina, el crédito total proyectado es de 888.215 millones de pesos, con 726.662 millones destinados a gastos de personal. Entre los objetivos previstos se incluyen 243 días de navegación para el adiestramiento técnico y táctico, 50 días de campaña para la Infantería de Marina, 2.760 horas de vuelo para el Aero adiestramiento y la conducción de 584 casos de búsqueda y rescate.
Por su parte, el Estado Mayor General de la Fuerza Aérea Argentina contará con 729.939 millones de pesos, con 550.491 millones destinados a gastos de personal. En el proyecto de ley se prevé para la fuerza 56 actividades a nivel táctico y una aspiración de llegar a las 156.080 horas de vuelo.
Capacidades militares:
En el mensaje que se propone como proyecto de ley, el punto sobre la Jurisdicción 45, Ministerio de Defensa, se repasan las adquisiciones realizadas durante la gestión, además de trazarse objetivos para el próximo año.
Se subraya la firma del contrato con el Reino de Dinamarca para la incorporación de 24 cazas multipropósito F-16AM/BM y la concreción de la adquisición de cuatro aviones de P-3C/N Orión de patrulla marítima, orientados al control del Atlántico Sur y la lucha contra la pesca ilegal.
También se destacó la recepción en 2025 de más aeronaves Beechcraft TC-12B Hurón para la Armada Argentina y de helicópteros Bell 407GXi para el Ejército Argentino, material que apunta a fortalecer la capacidad operativa de ambas fuerzas.
Política de Defensa: En este periodo, como en anteriores, se observa la falta y continuidad de las políticas de estado y la necesidad imperiosa de generar reformas que den más proyección estratégica al país.
Algunos expertos han señalado que la única política de Estado en Defensa en los últimos 40 años fue la de “desinversión auto infligida” en el Gasto Militar, es decir en la inversión necesaria para defender los intereses de La Nación.
Observamos, además en este sentido que a casi dos años de asumir este gobierno aún no ha producido uno de los documentos más importantes para la política de la Defensa y la planificación del Instrumento Militar, como es la DPDN Directivas de Política de Defensa Nacional. Documentos oficiales que establecen los lineamientos estratégicos y políticos que orientan la organización, funcionamiento y planificación del Sistema de Defensa Nacional en Argentina, necesarias para el Ciclo de Planeamiento de la Defensa Nacional, regulado por el Decreto 1729/2007.
Reforma integral: El gobierno habla de “la necesidad de una política que restaure la dignidad del personal militar y proyecte estratégicamente al país, especialmente en el Atlántico”.
Sobreactúa en este sentido ya que hace muchos años, tal como lo demuestran las principales encuestadoras del país, las FFAA son una de las instituciones con mejor imagen.

Zuban Córdoba, 16 de noviembre de 2025
Por otro lado, muchos expertos se preguntan si el gobierno no lleva adelante una política de desmalvinización, ante el silencio de políticas desarrolladas por los ingleses en nuestras Malvinas tales los casos de licitación y otorgamiento de zonas de exploración petrolera, permisos de pesca y los recientes ejercicios militares.
Empresas del Estado: Las empresas como la Fábrica Argentina de Aviones (FADEA), el astillero TANDANOR y Fabricaciones Militares Sociedad del Estado (SAC), que dependen del Ministerio de Defensa, atraviesan situaciones de crisis, déficit, falta de un máster plan, y las permanentes oscilaciones, que generan incertidumbre, sobre si serán privatizadas o no.
El caso más paradigmático es Fadea, que según su vicepresidente Magnaghi “atraviesa una crisis estructural sin precedentes, operativa y financiera” que podría anticipar un escenario de cierre.
Plan Nacional de Inversiones Públicas para el período 2026-2028. El detalle de estas planillas se puede apreciar en el Informe “Análisis del presupuesto 2026 de la Fundación Alem”
Ejército Argentino:
La institución quiere recuperar su parque de vehículos de campaña con la incorporación de nuevos camiones tácticos 4×4 habiendo seleccionado el Unimog U4000, en un número de hasta mil vehículos de esta clase y proyecta una inversión que llegaría durante el período 2026-2028 a los $175.056 millones.
También busca un Vehículo de Combate de Artillería (VCA) para lo cual se proyecta una inversión para el período que alcanzaría los $376.000 millones; vehículos de exploración, destinando una inversión de $3.360 millones; escopeta para unidades de Policía Militar, adquisición de equipamiento de protección, de sistemas de comando y control del tipo C4ISR, drones, morteros de 120 mm, recuperación y modernización de vehículos blindados de transporte de personal, modernizaciones de fusiles para unidades de infantería de montaña y monte, al igual que la recuperación de bateas para el programa de modernización TAM 2C-A2.
Armada Argentina:
Para el caso de la Armada Argentina y el Comando de Aviación Naval, destaca en primer lugar la mención a la adquisición de cuatro (4) helicópteros livianos Leonardo AW109M para operar desde los patrulleros oceánicos OPV, con un monto previsto de 39.000 millones de pesos.
Nada se habla en el presupuesto de la adquisición de nuevos submarinos a los fines de recuperar el arma, sólo en declaraciones públicas.
Fuerza Aérea Argentina:
Para el caso de la FAA, y comprendiendo que el mismo se encuentra amparado bajo el secreto militar, solo se mencionan cuestiones relacionadas con infraestructura y puesta en valor edilicia para el Programa F-16.
Entre otros aspectos, se listan los recursos destinados a completar la incorporación de los diez (10) TC-12B Hurón adquiridos a los Estados Unidos, y la recuperación de hasta treinta y cuatro (34) aeronaves de corto y mediano alcance de la II y IX Brigada Aérea.
Por último, destaca la adquisición de cinco (5) pod ISR, presumiblemente los desarrollados por INVAP, para equipar a los aviones IA-58 Pucará Fénix a los fines de “… incrementar la capacidad de exploración y reconocimiento de la III Brigada Aérea”, con un monto asignado para el período de $9.157 millones.
Operaciones y misiones
Operaciones de paz: Se reafirmó el compromiso con la paz con el envío de un nuevo contingente de cascos azules a Chipre en agosto de 2025. Sin embargo, el gobierno anterior 2019/2023 había duplicado la participación de Argentina en Operaciones de Paz de la ONU y en este período de gobierno volvimos a reducir esas operaciones.
Apoyo a la seguridad interior: Se ha prorrogado por noventa días el apoyo de las Fuerzas Armadas en las Operaciones de Apoyo al Sistema de Seguridad Interior en Rosario, Santa Fe. También participan en la Operación Roca en conjunto con las FFSSS en la Operación Güemes, en la frontera norte y noreste, mediante una disposición ministerial que salteó la Ley de Defensa y con Las Reglas de Empeñamiento definidas en la Resolución Ministerial 266/2024, que podrían poner en riesgo la acción de los efectivos desplegados.
Bienestar y recursos humanos
Programa “Familia Militar”: Se lanzó este programa para mejorar la calidad de vida de los miembros de las Fuerzas Armadas y del ámbito de la Defensa.
Docentes del Sistema Educativo de la Defensa Nacional: Se anunciaron aumentos salariales de hasta un 43% para los docentes de los institutos y liceos que dependen del Ministerio de Defensa.
Esta afirmación no cierta, se ha manipulado la información ya que el sistema educativo de la Defensa Nacional tiene 5.400 docentes bajo el régimen del personal civil de las FFAA y solo cobrarán ese aumento 1.400 docentes de nivel inicial, primario y secundario
Situación de la IOSFA: Se ha reportado una situación problemática relacionada con la violación de la regla de equiparación salarial y desmanejo financiero en la obra social, lo que ha generado pedidos de informe al Poder Ejecutivo por parte de diputados, senadores y de la propia Comisión de Defensa de la HCDN. El propio ministro Petri confirmó que están trabajando en la separación de obras sociales: trabaja en un decreto para dividir IOSFA en dos entidades: una para las Fuerzas Armadas y otra para las Fuerzas de Seguridad. Reconoció que el déficit operativo mensual ronda los $10.000 millones y la deuda supera los $200.000 millones. “Atribuyó la situación a la inflación en medicamentos (320% en 2023) frente a salarios que quedaron 85 puntos por debajo”, pero se olvidó decir que durante su gestión ya pasaron tres presidentes con sendos cambios de directorio; que tomó una deuda con el IAF de 40.000 millones de pesos y que además transfirió 15.000 millones de pesos para pagar deudas con droguerías Se recortaron partidas de capital en las Fuerzas Armadas (incluyendo programas como F-16) para transferir $10.296 millones a IOSFA, buscando sanear la obra social ante la presión social y sindical y evitar el corte total de prestaciones, en medio de reclamos por falta de medicamentos oncológicos y prácticas críticas.
También, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich en la Comisión de Presupuesto y Hacienda, adelantó que Prefectura y Gendarmería dejarán IOSFA para tener su propia obra social. Argumentó que “pagan burocracia y reciben menos servicios” y que la actual estructura es una “superestructura costosa” creada por el DNU 637/2013.
La gestión de Taiana entregó una IOSFA sin deudas, e increíblemente la gestión de Petri la llevó a tener en la actualidad un pasivo de casi 200.000 millones de pesos. En lo que va del año se dieron de baja más de 200 prestadores y hace 3 meses que no entregan medicación oncológica.
Salarios
Durante el tercer trimestre de 2025, los haberes del personal militar se mantuvieron por encima del Salario Mínimo Vital y Móvil (SMVM) en todos los grados, preservando la estructura jerárquica y las diferencias internas propias del régimen castrense.
Sin embargo, al comparar la evolución de los haberes nominales con la variación del IPC, se observa que el poder adquisitivo real de los salarios experimentó un leve deterioro. Esto se debe a que el incremento efectivo de los haberes fue inferior a la inflación acumulada del período (5,9 %), lo cual implicó una pérdida de entre 3 y 4 puntos porcentuales de poder de compra real.
Una tendencia general de estancamiento relativo del poder adquisitivo, producto de la combinación entre la inflación y la baja variación de los haberes nominales.
Comparando los haberes con la Canasta Básica Alimentaria, en el tercer trimestre de 2025, los salarios se mantuvieron estables nominalmente, con incrementos menores al 2 % promedio.
La Canasta Básica Alimentaria aumentó 2,4 %, y el IPC general 5,9 %, superando la evolución de los salarios.
En consecuencia, el poder adquisitivo real del personal militar se redujo levemente respecto del trimestre anterior.
La situación se muestra más comprometida en los grados subalternos y voluntarios, cuyos haberes apenas duplican el valor de la CBA, reflejando una vulnerabilidad creciente ante futuros aumentos de precios.
En síntesis, puede afirmarse que, durante el tercer trimestre de 2025, los salarios militares se mantuvieron nominalmente estables, pero empeoraron en términos reales, debido a que el incremento del costo de vida superó el ajuste de los haberes.
Si tenemos en cuenta la escala salarial de septiembre de 2025, deducimos que aproximadamente el 80% del personal (todo el personal subalterno y un porcentaje importante de suboficiales y oficiales) cobra menos de 1 millón de pesos. Estos salarios no alcanzan para cubrir la canasta básica de una familia tipo y se ubican por debajo de la línea de pobreza.
“Para cobrar un salario que supere la línea de pobreza, hoy un oficial del Ejército debe tener una carrera de 28 años de antigüedad y llegar al grado de teniente coronel. Entre los suboficiales, esa condición solo se alcanza con el grado máximo de suboficial mayor, con una trayectoria de 35 años”, citó un exjefe Militar
Por lo tanto, se debería revisar las escalas salariales de los grados más bajos y subalternos, a fin de evitar un mayor deterioro del poder adquisitivo y preservar condiciones adecuadas de bienestar y motivación del personal.
Bajas en las FFAA
Del informe 144 de agosto del corriente año, brindado por el JGM Francos ante la H. Cámara de Diputados se desprende que 647 oficiales, 2.450 suboficiales y 12.318 voluntarios, es decir 15.415 efectivos de la Armada, Ejército y Fuerza Aérea Argentina, solicitaron la baja voluntaria entre el 10 de diciembre de 2023 y agosto de 2025.
Si tenemos en cuenta que el número de militares en actividad es de 87.500 efectivos, nos damos cuenta de que la sangría que las FF.AA. sufrieron desde que asumió Milei equivale al 17,6% del total. Un número que asusta y preocupa.
Rearme: Mas Gasto Militar (GM) en el mundo, pero en ARGENTINA, NO
El informe del Instituto Internacional de Estudios para la Paz de Estocolmo (SIPRI), publicado a finales de abril, confirmó un aumento del Gasto Militar interanual en el mundo del 9,4%, el más alto desde el fin de la Guerra Fría.
En contraste con esta tendencia de rearme generalizado, Argentina continúa profundizando su deterioro presupuestario en materia de Defensa, con una inversión equivalente al 0,62 % de su PBI, marcando una tendencia decreciente y generando un obvio impacto negativo en las FF.AA.
Esta cifra nos sitúa como el país sudamericano con menor esfuerzo relativo en la materia, incluso por debajo de economías de mucha menor escala como Guyana o Bolivia.
Como dijo el Brigadier Valverde, actual jefe de la FAA, “La Defensa es disuasión”.
Conclusión
La dignidad de las FFAA pasa por mejorar sus salarios, restaurar el Servicio de Obra Social IOSFA, incrementar el presupuesto para funcionamiento y adiestramiento, continuar con el FONDEF para poder recuperar capacidades perdidas, tener una política clara hacia el mar, el sur, el Atlántico y la Antártida.
La Argentina debe tener hipótesis de conflicto, entendiendo que tiene parte de su territorio tomado por una potencia nuclear; que el conflicto es permanente. El cuerpo humano está en conflicto. Las relaciones humanas lo están. Las relaciones entre los países también. Establecer hipótesis de conflicto en términos de la Defensa, es una proposición o escenario hipotético ante una posible agresión armada que podría amenazar la seguridad del país
En definitiva, Argentina necesita una Defensa que se constituya como un verdadero aporte al desarrollo nacional desde el cumplimiento de las misiones principales y subsidiarias como en los procesos de investigación y desarrollo.
*Fotografías de portada empleada a modo de ilustración.
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Excelente análisis, muy completo y que abarca con exactitud cada rincon de la Defensa Nacional, en lo que hace al material, adiestramiento, recursos humanos y necesidades de todo tipo. Quiero creer que este Gobierno esta trabajando para sanear los temas más sensibles que hacen a la defensa que son su personal : sanear su obra social y recomponer salarialmente al cuadro de Suboficiales y Oficiales de grados más bajos.
Ademas tener en cuenta Principalmente
al Personal Militar Retirado, porq ese beneficio para familias Miliatares es solo accesible para personal en actividad y en Buenos Aires, en el interior no tenemos ningún beneficio y menos los retirados.