En una nueva muestra de madurez y continuidad del Programa de Desarrollo de Submarinos (PROSUB), la Marina de Brasil se prepara para alcanzar otro hito dentro de su proceso de modernización naval. Mañana, 26 de noviembre, la fuerza llevará a cabo la ceremonia de puesta a flote del Almirante Karam (S-43), el cuarto submarino de ataque de propulsión convencional de la clase Riachuelo. Este acontecimiento representa un paso decisivo en la consolidación de la capacidad submarina del país y marca el cierre del ciclo de construcción de unidades convencionales previsto por el programa.
El anuncio llega en paralelo con otro hecho de relevancia: la incorporación al servicio del Tonelero (S-42), tercera unidad de la clase Riachuelo, cuyo ingreso al sector operativo también está previsto para la misma jornada. De este modo, la Marina de Brasil celebra dos hitos en un solo día, reflejo del avance sostenido de un programa que ha requerido años de planificación, inversión y cooperación industrial con el Naval Group de Francia, consolidando una alianza clave para el desarrollo de la industria naval brasileña.
El Almirante Karam, anteriormente designado como Angostura, representa la culminación del tramo convencional del PROSUB antes de avanzar hacia la fase nuclear con el futuro Álvaro Alberto. Su construcción, al igual que la de sus predecesores Riachuelo (S-40), Humaitá (S-41) y Tonelero (S-42), se llevó a cabo en el Complejo Naval de Itaguaí, epicentro de la modernización tecnológica y productiva del sector naval brasileño. Esta infraestructura permitió a Brasil desarrollar capacidades propias en diseño, ingeniería y fabricación de submarinos, consolidando un salto cualitativo en términos de soberanía industrial y defensa nacional.
La puesta a flote del Almirante Karam marca el cierre de una etapa esencial del PROSUB, un programa que no solo busca dotar a la Marina de Brasil de modernos medios submarinos, sino también fortalecer la base tecnológica e industrial necesaria para sostener futuros proyectos de alta complejidad, como el desarrollo de la propulsión nuclear. Una vez en el agua, la unidad será sometida a un extenso proceso de pruebas en puerto y navegación destinadas a certificar el rendimiento de sus sistemas de combate, propulsión, generación eléctrica y comunicaciones, entre otros.
De acuerdo con los cronogramas establecidos en unidades anteriores, se prevé que el Almirante Karam sea oficialmente entregado a la Marina de Brasil durante el transcurso de 2026, una vez completadas satisfactoriamente sus pruebas de mar. Su incorporación al servicio operativo representará la culminación de más de una década de esfuerzos sostenidos en el ámbito industrial y estratégico, consolidando a Brasil como el país con la flota de submarinos más moderna y avanzada de América del Sur.
Con el Tonelero operativo y el Almirante Karam ya a flote, el PROSUB entra en su fase final antes de enfrentar su desafío más ambicioso: la construcción del submarino de propulsión nuclear Álvaro Alberto. Este proyecto, que combina tecnología nacional con cooperación internacional, posicionará a Brasil dentro de un selecto grupo de naciones con capacidad para operar submarinos de propulsión nuclear, reafirmando su liderazgo regional y su compromiso con la defensa de los intereses estratégicos del Atlántico Sur.
*Imágenes empleadas en carácter ilustrativo.-
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