Con una ceremonia realizada en la Base Naval del Callao, la fragata BAP Aguirre (FM-55) de la Marina de Guerra del Perú (MGP) oficializó su regreso al país tras completar con éxito su participación en el ejercicio multinacional UNITAS 2025, luego de más de sesenta días de operaciones en aguas de los EE.UU. Este retorno simboliza el cierre de un despliegue internacional de gran relevancia para la institución, enmarcado en su permanente esfuerzo por fortalecer las capacidades operativas y profundizar la cooperación con armadas aliadas del continente y de otras regiones del mundo.
La fragata BAP Aguirre, perteneciente a la clase Lupo, había zarpado a principios de septiembre pasado desde la Base Naval del Callao con destino a Estados Unidos, representando al Perú en una de las maniobras navales más antiguas y prestigiosas del mundo. Durante la ceremonia de despedida, encabezada por el Comandante General de la Marina, almirante Javier Bravo de Rueda Delgado, se destacó la importancia de este despliegue como parte del compromiso institucional con la interoperabilidad y la preparación del personal ante escenarios marítimos complejos.
La 66.ª edición del Ejercicio UNITAS se desarrolló entre el 15 de septiembre y el 6 de octubre en la costa este de Estados Unidos, teniendo como sedes principales la Estación Naval de Mayport, la Base de Infantería Naval Camp Lejeune (Carolina del Norte) y la Estación Naval de Norfolk (Virginia). En coincidencia con el 250.º aniversario de la Marina de los Estados Unidos, el programa incluyó operaciones anfibias, ejercicios combinados de guerra antisubmarina, defensa aérea, guerra electrónica y un ejercicio Sinkex (Sinking Exercise) con tiro real, donde las tripulaciones pusieron a prueba su precisión y coordinación táctica.
Previo a este despliegue internacional, la Marina de Guerra del Perú realizó el Operativo Vulcano en el Mar de Grau, entrenamiento que involucró buques de superficie, submarinos, aeronaves y unidades de Infantería de Marina. En ese contexto, la Aguirre cumplió un rol protagónico en maniobras aeronavales y ejercicios de guerra antisubmarina, consolidando su capacidad de operar junto a medios navales y aéreos de distintas fuerzas. Dicho operativo sirvió como instancia preparatoria para la exigente agenda de ejercicios que luego desarrollaría en el marco de UNITAS.
Asimismo, el despliegue internacional de la MGP peruano incluyó la participación del submarino BAP Pisagua (SS-33), que zarpó desde el Callao el 18 de agosto para intervenir tanto en UNITAS 2025 como en el ejercicio SUBDIEX 2025, parte del Programa de Submarinos Diésel-Eléctricos (DESI) de la Armada de los Estados Unidos. Esta unidad, perteneciente a la clase 209/1200, ejecutó maniobras de alta complejidad destinadas a mejorar las tácticas de guerra antisubmarina y fortalecer la interoperabilidad con fuerzas navales extranjeras.
La llegada de la fragata Aguirre al Callao simboliza no solo el cierre exitoso de una misión internacional, sino también el compromiso sostenido de la Marina de Guerra del Perú con la profesionalización de sus tripulaciones y la proyección de sus capacidades en escenarios multinacionales. Su participación, junto con la del submarino Pisagua, reafirma el rol activo del Perú en ejercicios de cooperación marítima y defensa hemisférica, contribuyendo a la seguridad y estabilidad en el ámbito regional e internacional.
*Créditos de las imágenes: Marina de Guerra del Perú.-
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