La Fuerza Aérea de Corea del Sur (ROKAF) dejó en firme la compra de cuatro nuevos aviones de alerta temprana y control aéreo AEW&C II “Phoenix”, tras concretarse el acuerdo con la empresa estadounidense L3Harris Technologies. El programa, impulsado por la Administración del Programa de Adquisiciones de Defensa (DAPA) desde el 2020, tendrá como base la plataforma Bombardier Global 6500, representando un salto cualitativo respecto a los actuales Peace Eye, basados en el Boeing 737.
El contrato valorado en U$S 2.260 mil millones, anunciado oficialmente por L3Harris en un comunicado del 18 de octubre, confirma que el programa Phoenix apunta dotar a la Fuerza Aérea de la República de Corea con una nueva generación de aeronaves AEW&C equipadas con tecnología avanzada en materia de sensores, comunicaciones seguras y gestión táctica de operaciones aéreas complejas.
Es importante traer a colación que la selección de L3Harris fue confirmada por DAPA a comienzos de octubre, tras un proceso de evaluación que valoró la propuesta estadounidense por su cumplimiento de los requerimientos tecnológicos y su capacidad de adaptación al ecosistema de defensa surcoreano. El fabricante canadiense Bombardier y socios industriales, como ELTA Systems (de Israel Aerospace Industries) y Korean Air, participarán en la integración y soporte logístico, fortaleciendo la transferencia tecnológica hacia la industria nacional.
El programa busca además reemplazar progresivamente a los E-737 “Peace Eye” —incorporados en 2011— con un sistema más liviano, eficiente y resistente a entornos altamente disputados. Según la compañía, el proyecto incluirá el desarrollo y producción de plataformas AEW&C II “Phoenix” que incorporarán un radar de vigilancia aérea de última generación, sistemas de misión integrados y una arquitectura abierta que facilitará futuras actualizaciones.
Por su parte, la elección del Global 6500 responde a su eficiencia operativa, alcance extendido y una altitud de vuelo superior, factores que lo hacen ideal para misiones de alerta temprana prolongadas. Además, las unidades estarán equipadas con capacidades avanzadas de enlace de datos, comunicaciones seguras y sistemas de autoprotección electrónica, garantizando la interoperabilidad con las fuerzas aliadas en el Indo-Pacífico. Por otro lado, el contrato contempla la entrega prevista de las cuatro aeronaves hacia finales de la década.
Por último, con esta decisión, Seúl avanza en su objetivo de reforzar la vigilancia y el control de su espacio aéreo en medio de crecientes tensiones regionales. En este marco, Christopher Kubasik, presidente y director ejecutivo de L3Harris, afirmó: “L3Harris está preparada para entregar una flota avanzada que reforzará la efectividad operativa de un aliado clave de Estados Unidos en el Indo-Pacífico.” Por su parte, Éric Martel, presidente y CEO de Bombardier, señaló: “En un contexto de crecientes tensiones geopolíticas, esta aeronave es la opción preferida por los gobiernos que buscan modernizar sus capacidades, gracias a su fiabilidad y rendimiento para las misiones más exigentes.”
*Fotografía empleadas a modo de ilustración.
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