En el marco de un amplio programa de modernización de sus Fuerzas Armadas, Grecia se encuentra analizando la posibilidad de concretar la compra de 30 helicópteros de ataque AH-64D Apache que serán dados de baja por el Ejército de EE.UU., mismos que forman parte de la flota de un centenar de ejemplares que aún opera la institución. Acorde es recogido por medios locales, se trata de una decisión que ya contaría con el visto bueno del Estado Mayor, aunque aún no se habría trasladado formalmente a la Oficina de Cooperación de Defensa (ODC) que Washington mantiene en Atenas.
Ampliando en detalles, desde el país europeo se informa que la intención de Atenas sería tantear el terreno para una potencial adquisición durante la feria AUSA 2025, especialmente considerando que el teniente general George Kostides (jefe del Estado Mayor del Ejército) sería uno de los asistentes al evento. Mas aún, se especula con que la potencial adquisición hasta ahora aludida se realice en un esquema de dos tramos de quince unidades cada uno, concretándose ello a través del programa Excess Defense Articles (EDA) que le permitiría a Grecia sumar dichos helicópteros sin costes mas allá del asociado al transporte. En función de esto último, se espera que el país enfrente competencia de sus aliados que busquen sumar sus propios AH-64D.
Por otro lado, resulta importante destacar que la decisión de avanzar con una propuesta como la antes descrita respondería a la poca disponibilidad que la flota actual de helicópteros Apache con la que cuenta el Ejército Helénico, la cuál estaría compuesta por unas 28 unidades en total; 19 pertenecen a la variante A y otros 9 a la variante D. Particularmente, se destaca que el grueso de la flota compuesta por modelos ya obsoletos no cuenta con los repuestos necesarios para mantenerse en funcionamiento, situación que se ha visto especialmente empeorada tras la inundación de la base aérea de Stefanovikeio que tuvo lugar en 2023.
En línea con esto último, cabe destacar que la intención de sumar una flota de 30 unidades no implicaría que Grecia busque tenerlas a todas operativas, sino que estaría previendo poder destinar algunas de ellas para ser desmanteladas y empleadas como stock de repuesto según sea necesario. Se trata de un dato no menor, teniendo en cuenta que está previsto que la flota de AH-64D deje de recibir soporte en el futuro cercano, en tanto los EE.UU. avanzan en la incorporación de sus reemplazantes.
Ampliando la lente sobre la antes mencionada modernización de las Fuerzas Armadas griegas, es menester mencionar también que el país tendría interés en otras plataformas excedentes de los EE.UU. para sumar a través del mecanismo EDA, siendo una de las principales apuntadas la necesidad de sumar nuevos vehículos blindados de combate. Sin embargo, se afirma que las conversaciones para avanzar en estas potenciales compras adicionales se han visto demoradas por la falta de un embajador estadounidense en Atenas por un largo período de tiempo, lo que debería poder comenzar a solucionarse con la llegada de Kimberly Guilfoyle; confirmada para dicho puesto el pasado 18 de septiembre.
*Imágenes empleadas a modo ilustrativo
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