Englobado proceso de modernización de su aviación de ataque, arribaron a las instalaciones de la compañía portuguesa OGMA en Alverca do Ribatejo los primeros tres nuevos aviones A-29N Super Tucano de la Fuerza Aérea de Portugal. Estas aeronaves, recientemente trasladadas desde la planta de Embraer en Gavião Peixoto (Brasil), constituyen la primera entrega dentro del contrato firmado en diciembre de 2024, mediante el cual Portugal se convierte en cliente de lanzamiento de esta versión adaptada a los estándares de la OTAN.
La adquisición de los A-29N se inscribe en la Ley de Programación Militar de 2023 y forma parte del Programa de Apoyo Aéreo Cercano (OCMA). El acuerdo, valuado en 180,5 millones de euros, contempla un total de doce aeronaves que serán asignadas al Escuadrón 103 “Caracóis”, unidad que había perdido capacidades tras el retiro de los entrenadores Dassault/Dornier Alpha Jet en 2018. Con esta incorporación, Portugal recupera una plataforma clave para la instrucción avanzada de pilotos y para la ejecución de misiones tácticas en escenarios nacionales e internacionales.
Los tres primeros A-29N aterrizaron en Portugal apenas ocho meses después de la firma del contrato, lo que evidencia la celeridad y flexibilidad de Embraer en sus procesos de producción y entrega. Una vez en OGMA, las aeronaves serán sometidas a la integración de equipos y sistemas que les permitirán cumplir con los exigentes requisitos operativos de la OTAN, asegurando su plena interoperabilidad en operaciones conjuntas.
El A-29N Super Tucano es una evolución del exitoso modelo desarrollado por Embraer, con más de 600.000 horas de vuelo acumuladas y presencia en 22 fuerzas aéreas alrededor del mundo. Su nueva variante incorpora sistemas de comunicación V/UHF y SATCOM, enlace de datos Link 16, módulo DACAS, así como una suite de autodefensa con alertas electrónicas y contramedidas. También cuenta con un sensor electro-óptico avanzado que permite realizar misiones de inteligencia, vigilancia y reconocimiento (ISR), transmitiendo video en tiempo real a unidades terrestres.
Además de su probado rendimiento en apoyo aéreo cercano (CAS), interdicción aérea, patrullaje y entrenamiento avanzado, el A-29N destaca por su capacidad de operar desde pistas no preparadas y en entornos de infraestructura limitada. Esta flexibilidad, sumada a sus bajos costos de operación y mantenimiento, lo convierten en una opción altamente eficiente para fuerzas aéreas que requieren versatilidad en múltiples misiones con un mismo sistema.
OGMA, como socio industrial clave en el programa, no solo recibirá y adaptará los A-29N, sino que también desempeñará un papel fundamental en la integración de sistemas y en la expansión de la capacidad tecnológica en Europa. Embraer ya había anunciado una inversión de 90 millones de euros destinada a fortalecer las instalaciones portuguesas, con el objetivo de triplicar su capacidad productiva y consolidar a OGMA como centro de referencia para la aeronáutica de defensa en la región.
Cabe destacar que la compañía también participa en la adaptación del transporte táctico KC-390 Millennium a los estándares de la OTAN, aeronave que ya se encuentra en servicio en la Fuerza Aérea Portuguesa. Con la llegada de los primeros A-29N, la Fuerza Aérea de Portugal da un paso decisivo en la modernización de sus medios aéreos y en la recuperación de capacidades estratégicas perdidas.
*Créditos de las imágenes: Embraer.-
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