En el marco de los esfuerzos orientados a fortalecer sus capacidades de transporte estratégico, la Fuerza Aérea de Ecuador completó recientemente las inspecciones del avión C-130H Hércules, matrícula FAE-898. Esta aeronave fue transferida por Estados Unidos en 2024 como parte de un acuerdo de cooperación bilateral anunciado por el Comando Sur, constituyéndose en un refuerzo clave para la flota de transporte pesado del país.

El Escuadrón de Transporte Pesado Nro. 1111 “Cóndor” tuvo a su cargo la inspección isocrónica de 35 días realizada sobre el FAE-898. Durante el proceso se llevaron a cabo tareas críticas como la revisión completa del tren de aterrizaje y la conversión del sistema de oxígeno líquido a gaseoso. De manera paralela, las tripulaciones mantuvieron un entrenamiento constante en simuladores, asegurando que tanto el avión como su personal estén plenamente preparados para afrontar misiones operativas, logísticas y humanitarias.

La vuelta al servicio del C-130H FAE-898 reviste especial importancia en el actual contexto de la Fuerza Aérea Ecuatoriana (FAE). Durante más de cuatro décadas, Ecuador llegó a operar una flota conformada por tres C-130H, cuatro C-130B y un L-100-30, todos ellos asignados al Ala de Transporte N.11 en la Base Aérea Cotopaxi. Sin embargo, con el paso de los años gran parte de estas aeronaves quedó fuera de servicio, manteniéndose operativo únicamente el Hércules L-100-30 hasta la llegada del nuevo aparato.

El FAE-898 cuenta con una extensa trayectoria previa. Originalmente voló en la Fuerza Aérea de Estados Unidos (USAF) bajo la matrícula 74-1689 y, posteriormente, fue transferido a la Fuerza Aérea Afgana, donde operó con la característica 1689 desde 2012. Su llegada a la Base Aérea de Latacunga fue anunciada en 2023 y concretada al año siguiente, en el marco de la cooperación militar con Washington. La transferencia se inscribe además en un gesto político y estratégico del gobierno estadounidense para respaldar los esfuerzos de seguridad en Ecuador.

Con el regreso al servicio del Hércules FAE-898, la Fuerza Aérea Ecuatoriana no solo amplía la disponibilidad de sus medios de transporte pesado, sino que también recupera una herramienta estratégica para el apoyo en emergencias humanitarias, la proyección de fuerzas y el cumplimiento de misiones logísticas de largo alcance. Se trata de un paso que reafirma el compromiso de la institución de mantener sus equipos en condiciones óptimas para responder con eficacia a las necesidades del país.

*Créditos de las imágenes: Fuerza Aérea Ecuatoriana.-

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