Mientras la Fuerza Aérea de Polonia avanza en el proceso de incorporación de sus nuevos cazas furtivos F-35A “Husarz”, el gobierno de los Estados Unidos ha autorizado la posible venta de un importante paquete de apoyo y sostén logístico para la futura flota de aviones de quinta generación polaca. Así se desprende de una de las más recientes notificaciones elevadas por el Departamento de Estado al Congreso estadounidense, a fin de autorizar la operación valuada en US$ 1.850 millones a través del Programa FMS.
Desde la firma de la Carta de Aceptación de Oferta el 31 de enero de 2020, el gobierno y la Fuerza Aérea de Polonia, junto a Lockheed Martin en calidad de proveedor principal y con la venia de Estados Unidos, han venido avanzando en el proceso de incorporación de una flota de 32 cazas F-35A. Con su adquisición de los “Husarz” –denominación local de los Lightning II– el país europeo concreta finalmente el reemplazo de sus actuales aviones de combate MiG-29 y Sukhoi Su-22, los cuales han cumplido su ciclo de servicio custodiando los cielos polacos.
Entre las últimas novedades del proceso de incorporación, precedidas por los avances en la producción de los aviones furtivos y la presentación oficial del primer ejemplar en 2024, puede destacarse el primer vuelo realizado en un F-35 a los mandos de un piloto polaco, el cual tuvo lugar durante el pasado mes de febrero en la Base Aérea Eglin, donde efectivos de la Fuerza Aérea de Polonia están adiestrándose con la nueva plataforma.
Regresando a lo reportado por la Agencia de Cooperación en Defensa y Seguridad (DSCA) el 27 de agosto, el gobierno polaco solicitó al de Estados Unidos la provisión de un paquete de apoyo y sostén logístico para la nueva flota de F-35. Valuado en US$ 1.850 millones, este comprende la venta de componentes, repuestos y rotables, actualizaciones de software para las aeronaves y apoyo del fabricante.
Con motivo de la operación, desde el Departamento de Estado han señalado que: “Esta venta propuesta apoyará los objetivos de política exterior y de seguridad nacional de los Estados Unidos al mejorar la seguridad de un aliado de la OTAN que constituye una fuerza de estabilidad política y económica en Europa”.
Añadiendo que: “La venta propuesta mejorará la capacidad de Polonia para hacer frente a amenazas actuales y futuras al aumentar la fiabilidad de su flota de F-35. Polonia no tendrá dificultades para incorporar estos artículos y servicios en sus Fuerzas Armadas”.
Por último, y mientras avanza la formación de pilotos, personal de apoyo y técnicos en los Estados Unidos, se espera que los primeros F-35A arriben a suelo polaco durante el próximo año 2026, siendo recibidos presumiblemente en la Base Aérea Lask, iniciando así el siguiente paso del cronograma de entregas que se extenderá hasta el año 2030, cuando el último de los 32 aviones furtivos sea incorporado por la Fuerza Aérea de Polonia.
*Fotografías empleadas a modo de ilustración.
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