El gobierno de los Estados Unidos ha autorizado la posible venta de un paquete de soporte y mejoras para los futuros aviones de guerra electrónica e inteligencia de señales (EW/SIGINT) MC-55A Peregrin que equiparán a la Real Fuerza Aérea Australiana. Así se desprende de una de las más recientes notificaciones del Departamento de Estado al Congreso estadounidense, a fin de aprobar la operación, valuada en US$ 404 millones, por medio del Programa de Ventas Militares al Extranjero (FMS).
A fin de fortalecer sus capacidades de guerra electrónica e inteligencia de señales aerotransportadas, la Real Fuerza Aérea Australiana emprendió años atrás diversos esfuerzos englobados dentro del Programa AIR 555.

El programa inició formalmente en agosto de 2016, siendo seguido a través de diversas autorizaciones y aprobaciones por parte del gobierno de Estados Unidos, a fin de proveer diverso equipamiento específico. Siguiendo la tendencia a nivel global, la RAAF seleccionó a la aeronave de negocios Gulfstream G-550 como futura plataforma que daría origen al MC-55A Peregrin.
Siguiendo lo informado, el gobierno australiano ha avanzado en las gestiones para la adquisición de cuatro aeronaves, las cuales serían modificadas a fin de instalar e integrar diverso equipamiento específico, tales como un potente radar AESA, así como toda una serie de equipos enfocados en la interceptación, recolección y análisis de inteligencia de señales (COMINT/ELINT). A su vez, otros equipos estarían destinados a la realización de misiones de vigilancia, inteligencia y reconocimiento, con especial enfoque en el monitoreo de los espacios marítimos australianos.

Al día de la fecha, el programa está rodeado de gran secretismo, en vista de las funciones altamente especializadas y de inteligencia que realizarán los futuros MC-55A. No obstante, como da cuenta la comunidad de spotters, se vienen registrando diversos vuelos de pruebas y evaluaciones de uno de los aviones que serían entregados durante el corriente año 2025.
Con todos estos antecedentes, el 6 de agosto, la Agencia de Cooperación en Defensa y Seguridad (DSCA) confirmó que el gobierno australiano solicitó al de Estados Unidos la compra de un paquete de apoyo y equipamiento relacionado con la actualización Baseline 2 para las nuevas aeronaves. El valor de la operación, que alcanza los señalados US$ 404 millones, tiene como principal proveedor a L3 Harris, e incluye modificaciones menores para los aviones, consumibles y accesorios, así como apoyo técnico y logístico del fabricante para el sostenimiento de la flota de MC-55A.

Desde el Departamento de Estado han expresado que: “Esta venta propuesta respaldará los objetivos de política exterior y seguridad nacional de los Estados Unidos. Australia es uno de nuestros aliados más importantes en el Pacífico Occidental. La ubicación estratégica de esta potencia política y económica contribuye de manera significativa a garantizar la paz y la estabilidad económica en la región. Es vital para el interés nacional de EE.UU. ayudar a nuestro aliado a desarrollar y mantener una capacidad de autodefensa sólida y lista para el combate.”
Añadiendo: “La venta propuesta mejorará la capacidad de Australia para mantener su flota de aeronaves MC-55A, lo que reforzará su habilidad para llevar a cabo operaciones aéreas eficaces y respaldará las operaciones estadounidenses en la región. Australia no tendrá dificultades para incorporar estos artículos y servicios a sus Fuerzas Armadas.”
*Créditos fotografía de portada: @SR_Planespotter.
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