Mientras el foco de atención de la comunidad de especialistas se ha posado en los últimos avances alcanzados por China en la conformación de su futura aviación naval —con el desarrollo de nuevas variantes de aviones de combate y AEW&C embarcados—, también se están produciendo progresos en el área de formación y entrenamiento. Más en detalle, y según dan cuenta imágenes recientemente viralizadas, se estaría desarrollando una nueva aeronave de entrenamiento embarcada, presumiblemente compatible con los portaaviones de la Armada de China.
Actualmente, el Hongdu L-15 Falcon, denominado también JL-10, es el avión de entrenamiento avanzado más moderno en servicio con la Armada y la Fuerza Aérea del Ejército Popular de Liberación. Introducido en el año 2013, el modelo ya registra contratos de exportación con terceros países, como es el caso de los Emiratos Árabes Unidos.

Tal y como se aprecia en las imágenes divulgadas, el desarrollo de la nueva aeronave —la cual podría tratarse de una evolución derivada del L-15 con extensas modificaciones— está siendo llevado a cabo por la empresa Hongdu Aviation Industry Corporation. No obstante, y a pesar de que se conoce la existencia de una versión naval del L-15, designada como JL-10J, las imágenes también permiten presumir que se estaría ante una aeronave completamente nueva.

Si bien no se cuenta con mayores datos, el material captado días atrás indica que se trata de una aeronave de dimensiones similares al L-15, pero con diferencias notables. Además del tren de aterrizaje reforzado —que cuenta en su sección frontal con dos ruedas, una característica típica de las aeronaves diseñadas para operar desde portaaviones—, también destacaría la presencia de dos estabilizadores verticales.
Asimismo, se presume que, al igual que el Falcon, estaría equipada con dos motores, uno de los requisitos establecidos para operaciones en el ámbito naval.
Por último, en vista de los avances alcanzados por la industria aeroespacial china, así como del proceso de transición que atraviesa la aviación naval embarcada de la Armada del EPL, es razonable suponer que esta nueva aeronave estaría diseñada para operar desde la nueva generación de portaaviones chinos, que abandona la configuración STOBAR en favor de la CATOBAR, caracterizada por el uso de catapultas, tal como se observa en el portaaviones Fujian.


No obstante, también debe señalarse que, si bien en transición, las nuevas versiones de aeronaves embarcadas chinas —como el J-15T y el J-35— pueden ser empleadas en portaaviones de generaciones anteriores, como el Liaoning y el Shandong. Esto deja abierta la interrogante sobre las características que podría presentar, o no, esta nueva aeronave de entrenamiento avanzado desarrollada por China.
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