Con el corte de la primera plancha en los astilleros de ASMAR Talcahuano, se dio inicio oficial a la construcción del segundo buque multipropósito del proyecto Escotillón IV, iniciativa clave dentro del Plan Nacional Continuo de Construcción Naval impulsado por la Armada de Chile y el Ministerio de Defensa.

Este nuevo paso reafirma el compromiso del país con la consolidación de capacidades navales propias, incorporando tecnología de punta y colaboración entre el Estado, la academia y el sector privado. La ceremonia fue encabezada por la Ministra de Defensa Nacional, Adriana Delpiano, acompañada por el Comandante en Jefe de la Armada, Almirante Fernando Cabrera, y el Director de ASMAR, Contraalmirante José Miguel Hernández, además de otras autoridades civiles y militares.
Estas unidades están diseñadas para cumplir múltiples funciones: transporte de tropas y carga para operaciones anfibias, apoyo logístico y humanitario ante catástrofes, conectividad con zonas aisladas y operaciones en aguas antárticas. Además, serán capaces de transportar combustible y material hacia el continente blanco, consolidando la presencia nacional en esa estratégica región.

Durante su intervención, el Vicealmirante Leonardo Chávez, Director General de los Servicios de la Armada, enfatizó que “la construcción naval no es una opción, es una necesidad. Somos un país esencialmente marítimo. A través del mar fluye nuestro comercio, se conecta nuestra gente, se resguarda nuestra soberanía y se abren oportunidades productivas y científicas”.
El corte de plancha se realizó mediante una moderna máquina de plasma de alta precisión, que permite cortes biselados y optimiza los procesos de soldadura posteriores. En la misma instancia se develó una placa recordatoria que acompañará al buque durante toda su vida útil.
Finalizada la ceremonia, las autoridades recorrieron la primera unidad del proyecto, cuya estructura presenta un 90% de avance y que se encuentra en etapa final de construcción en la grada de ASMAR. Su lanzamiento al mar está programado para enero de 2026, con entrega a la Armada prevista para el primer trimestre de 2028.
La ministra Delpiano destacó el alcance del proyecto: “Estamos viendo un gran buque construido íntegramente en nuestro país. Esta política busca renovar una flota que ya es antigua y que demanda un alto costo de mantención. Nuestro objetivo es construir la mayor cantidad de unidades posibles, con ASMAR como eje, pero incorporando a astilleros privados y universidades como la Austral, para sumar ciencia, tecnología y conocimiento chileno al servicio del país”.
Por su parte, el Almirante Cabrera valoró el avance del programa: “Ni la lluvia ni el viento nos detienen. Estamos cumpliendo un sueño: construir los buques que necesita nuestra Armada para servir a Chile. Este sueño se mueve con hélice, con tres palas: el Estado, la academia y los privados”.
El segundo buque seguirá su construcción con el armado de bloques estructurales, una vez que la primera unidad sea lanzada al mar en enero próximo
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