Durante la semana del 14 al 24 de junio, el equipo de Zona Militar, encabezado por Sofia Celiz y Victoria Pierucci, se embarcó en el rompehielos ARA “Almirante Irizar” para documentar las actividades de la Armada Argentina en una Nueva Etapa de Mar. Este adiestramiento, realizado en escenarios reales, congregó a múltiples unidades cuyas operaciones destacan por su coordinación y planificación. Gracias a la colaboración del personal naval, pudimos presenciar de cerca el despliegue de la Segunda Escuadrilla Aeronaval de Helicópteros , equipada con helicópteros Sea King.
A continuación, la entrevista al Capitán de Corbeta Andrés Urquiza, jefe de operaciones de la escuadrilla, sobre los ejercicios de flota y anfibios a bordo del ARA Almirante Irizar:
Zona Militar (ZM): A grandes rasgos, ¿Cuál fue el objetivo de este despliegue y el rol de la Segunda Escuadrilla Aeronaval de Helicópteros?
“Este ejercicio abarcó la tercera etapa de flota y la etapa básica anfibia. Nuestra escuadrilla se desplegó de manera orgánica en el rompehielos, operando con dos helicópteros. El Grupo Aéreo Embarcado (GAE) se encuentra formado por personal de oficiales y suboficiales, que cumplen funciones de tripulación y de mantenimiento. La doctrina aeronaval nos permite ser autónomos una vez embarcados, sin depender del apoyo cotidiano con el que cuenta la escuadrilla en tierra, es decir, podemos realizar mantenimientos básicos a bordo sin necesidad de personal en tierra”.
ZM: ¿Cómo se prepararon para la operación?
“El proceso fue similar al de la Campaña Antártica. Recibimos la orden de operaciones y preparamos el despliegue en el rompehielos: repuestos, herramientas específicas y todo el material necesario para cada tipo de vuelo. La logística es clave, ya que debemos estar preparados para realizar tanto mantenimientos preventivos como correctivos en caso de novedades con las aeronaves”.
ZM: ¿Qué actividades destacaría durante la etapa de mar?
“Tras la incorporación al rompehielos, las primeras actividades fueron las prácticas PAyD (Práctica de Aterrizaje y Despegue en unidades de superficie), realizadas tanto en el rompehielos “Almirante Irizar” como en el destructor MEKO 360 “Sarandí”, adiestrándonos en diferentes cubiertas. También ejecutamos VERTREP (Vertical Replenishment): que es la práctica de traspaso de cargas/suministros entre buques por vía aérea, preparando a las tripulaciones aéreas y al personal de cubierta en el manejo de dicha maniobra con el buque navegando; y finalmente RECOVU (Reaprovisionamiento de combustible en vuelo): una maniobra compleja donde la aeronave, en formación con el buque, recibe combustible mediante una manguera presurizada”.
“También se efectuó el adiestramiento de los nadadores de rescate, que consiste en el salto (o sembrado) de los mismos desde la puerta de carga de la aeronave y a continuación, el izado, mediante el guinche de rescate. Esta actividad en particular, está apuntada a mantener la capacidad de Búsqueda y Rescate que cumple la Armada mediante uno de los medios de la Aviación Naval”.
“Estos ejercicios también sirven para adiestrar a los controladores aéreos embarcados, que es personal especializado de la dotación del buque, quienes realizan las comunicaciones y el seguimiento de las operaciones aéreas”.
ZM: ¿Y en la etapa anfibia?
“Además del desembarco general, podemos destacar la inserción de tropas especiales tierra adentro mediante Fast Rope, una capacidad para la que estas tropas primero se adiestran en tierra, en torres fijas y luego en la aeronave, ya que, al descender con todo el equipo, deben tomarse todas las medidas de seguridad correspondientes. La Primera Escuadrilla Aeronaval de Helicópteros, también formó parte del desembarco realizando previamente tareas de exploración y adiestrando sus tripulaciones para ejecutar una escolta aérea armada en apoyo a las unidades participantes”.
ZM: ¿Cómo se coordina esta etapa anfibia?
“Aquí la coordinación fue multidisciplinaria. Los infantes de marina se proyectaron mediante medios aéreos (helicópteros) y medios de superficie, (embarcaciones menores y Vehículos anfibios a rueda), simulando una operación real de desembarco. Esta fase es una de las más complejas a nivel doctrinal, ya que integra medios aéreos, navales y terrestres. La Armada, al contar con los tres componentes (aviación naval, buques e infantería), pudo ejecutarla eficazmente, según lo planificado. Es un ejercicio que puede coordinarse también a escala conjunta y requeriría la participación del Ejército y la Fuerza Aérea”.
ZM: De allí la importancia del poder naval integrado, ¿no?
“Exacto. La Armada puede realizar este adiestramiento gracias a su estructura integrada, pero en operaciones conjuntas con las otras fuerzas, la coordinación debe ser más precisa. La complejidad radica en sincronizar medios aéreos, navales y terrestres en un mismo espacio operativo”.
ZM: ¿Cómo gestionan la seguridad y la planificación durante los vuelos?
“Cada misión es única. La tripulación que realizará el evento, lleva a cabo un prevuelo con el comando del buque, los controladores, personal de meteorología y de cubierta para definir frecuencias, procedimientos de emergencia y detalles operativos. Paralelamente, los técnicos ejecutan mantenimientos programados en el hangar del buque, asegurando que las aeronaves estén siempre alistadas. A medida que los helicópteros acumulan horas de vuelo, se efectúan inspecciones específicas”.
ZM: ¿Qué valor tiene este tipo de ejercicios para la Armada?
“Refuerzan nuestra capacidad de proyección y trabajo conjunto. Tanto la escuadrilla, como los diferentes componentes lograron adiestrarse con las unidades de la flota de mar, operando de forma integral desde el rompehielos, reforzando las prácticas de actividades específicas en el marco de un ejercicio anfibio. Además, dichas actividades son vitales para estandarizar procedimientos en misiones reales, que pueden ponerse en práctica tanto en los despliegues en la Antártida o en la Salvaguarda de la vida en el mar, como en misiones de Búsqueda y Rescate (SAR)”.
Finalmente, durante los días en terreno pudimos ver a la Segunda Escuadrilla Aeronaval de Helicópteros en acción, reafirmando su rol clave en la defensa nacional, combinando preparación técnica y operativa en escenarios complejos. Desde Zona Militar seguiremos cubriendo sus despliegues en futuras ejercitaciones.
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Excelente cobertura, funciones cruciales tiene la ARA, COAN, e IMARA. Esperemos que se la reequipe con material acorde a cada función y se incrementen todas las etapas de preparación y prácticas. Felicitaciones Sofia.