El gobierno de Australia ha formalizado la compra de nuevos misiles aire-aire AMRAAM a los Estados Unidos, con una inversión que supera los 1.000 millones de dólares. Esta compra tiene como objetivo equipar los cazas F/A-18 Super Hornet y F-35A Lightning II de la Real Fuerza Aérea Australiana, como también a los sistemas de defensa aérea NASAMS, reforzando así las reservas y disponibilidad de este armamento aire-aire y superficie-aire, enmarcándose también en la Estrategia Nacional de Defensa 2024.

La compra se produce en un contexto de crecientes tensiones en la región del Indo-Pacífico, marcado por el aumento de las capacidades militares chinas y la inestabilidad regional. Australia viene invirtiendo significativamente en la modernización de sus sistemas de defensa, siendo esta adquisición una de las más recientes en este esfuerzo por fortalecer sus capacidades aéreas.

El paquete incluye 200 unidades del misil AIM-120D-3, la variante más avanzada del AMRAAM con un alcance estimado de 180-200 km y capacidades mejoradas de guiado, junto con 200 misiles AIM-120C-8 adaptados para el sistema NASAMS (National Advanced Surface-to-Air Missile System). Todos los misiles son fabricados por Raytheon Technologies, ahora parte de RTX Corporation. Previo a esta compra, el gobierno estadounidense había autorizado en abril de 2025 la posible venta de estos 400 misiles aire-aire de largo alcance para equipar a la aviación australiana.

El AIM-120D-3 está diseñado para ser lanzado desde los cazas F/A-18F Super Hornet, EA-18G Growler y F-35A Lightning II, mientras que el AIM-120C-8 sería operado por la 10ª Brigada del Ejército Australiano como parte del sistema NASAMS, mejorando las capacidades de defensa terrestre contra amenazas aéreas.

El ministro de Industria de Defensa, Pat Conroy, destacó la importancia de esta inversión “Esta adquisición refuerza nuestra seguridad nacional y demuestra el compromiso del Gobierno de Albanese con proporcionar a las Fuerzas de Defensa Australianas las capacidades necesarias para proteger a Australia”.

Asimismo enfatizó, “La credibilidad de nuestras capacidades de ataque aéreo y largo alcance sustenta nuestra estrategia de disuasión, cuyo objetivo es prevenir conflictos antes de que comiencen”, “Estos misiles adicionales asegurarán que la ADF pueda proteger efectivamente a Australia contra amenazas aéreas potenciales” añadió Conroy.

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